La estrategia

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Olivia se va al estacionamiento y toma su carro y conduce a baja velocidad, cerca del instituto ve a la chica que tiene loca a su amiga, esta sentada en un pequeño parque en una banca, hace mucho frío como para que ella esté allí, Olivia lo piensa dos veces o más antes de bajarse de su coche y cometer la locura  de acercarse a esa chica, al final se decide y baja.

Realmente hace mucho frío y esa chica no trae un buen abrigo, Olivia se acerca en total silencio y se sienta al lado de madelen, madelen lo nota pero decide ignorarla.

O: quieres hablarme de lo que paso hace un momento? Dice en un tono muy tranquilo y para nada reclamante.

- no. Responde con su voz quebrada y sus ojos al borde de las lágrimas, aquellas que estaba controlando y llega esta mujer a recordarle.

O: está bien.
Es extraño pero madelen se siente muy tranquila al lado de esta mujer, las palabras no son necesarias, solo su simple presencia trae tranquilidad y ese aire de que no le hará daño. - acaso no tienes frío?

- si, realmente hace mucho frío.
Una sonrisa débil se muestra en sus labios.

Olivia se quita su abrigo y abriga a madelen.
Ambas sonríen.

O: te llevo a tu casa, o al menos te doy un aventón?
- no quiero molestar.

O: tranquila, por cierto, recuerdas cuando te hice una invitación a cualquier día ir a tomarnos un café.
- por su puesto y también me dijo que me alejara de ella y no le  hice caso y mire como estoy.

O: entonces me aceptarás la invitación a tomarnos un café, uno muy caliente, hace mucho frio.

Ambas sonríen.

Van al coche y ahora se ponen en marcha.
Madelen se olvida ponerse el cinturón de seguridad y parece no escuchar lo que dice Olivia, solo logra reaccionar cuando siente el cuerpo de Olivia sobre el suyo, intentando ponerle el cinturón.

- lo siento.
O: tranquila no te disculpes.
Responde de la manera más comprensiva.

Llegan a un café restaurante muy hermoso y colorido, aún están dentro del coche y madelen no se ha percatado, de nuevo reacciona con el cálido cuerpo de Olivia sobre el suyo, quitándole el cinturón, mientras le brinda una sonrisa.

Madelen siente un impulso muy grande y antes de que la calidez de olivia se aleje de su cuerpo, madelen la atrapa con sus brazos y empieza a llorar, fue un impulso imprudente, pero Olivia le corresponde y la recibe en sus brazos.

O: shh, tranquila, llora todo  lo que desees.

Olivia la abraza muy fuerte, sin duda alguna aquí hay una conexión extraña.
Después de llorar lo más que sus ojos pudieron se separa lentamente.

O: ya? Mejor?
- si.
O: bien, vamos por un delicioso café y croasan. Te gustan los croasanes?

- me encantan. Dice mientras se seca sus ojos y una sonrisa se dibuja en su rostro.

Ambas mujeres bajan al lugar, entre cualquier anécdota ríen y la pasan bien, de nuevo llegan al coche y ahora se dirigen a casa de madelen.

- déjeme aquí.
O: bien.

Madelen mira a Olivia.

- gracias, por no preguntar más y solo tranquilizarme, y es irónico porque realmente no la conozco, solo la vi una vez y cuando la tuve de frente debo admitir que tenía mucho miedo y mire quien terminó dandome la mejor sensación.
O: tranquila es un placer, si deseas puedes darme tu número y yo te escribiré más tarde.

Madelen le da su número a la mejor desconocida que puede conocer, con el aroma tan encantador y dulce pero a la vez muy refinado que le dió mucha tranquilidad.

Se miran una vez más y madelen vuelve a agradecer y se baja del coche, a diferencia de lilith, Olivia ve caminar un poco más a madelen y luego arranca muy suave.
Madelen sabe que conocer a esta mujer no pasará por desapercibido en su vida, y sea lo que sea que pase en sus vidas ella lo recibirá.

Amor enfermoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora