Rebanada 45. Alborada.

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...

Pepe:
🥺😢

Diego:
🙂

Pepe:
Le pedí a tu papá que no me acusara, pero ya no puedo con esta culpa!!! 😭

Pepe:
Es que el sábado tus papás fueron al restaurante y me vieron trabajando. Perdón, no quería arruinar tu Sodoma y Gomorra en la cabaña.

Diego:
Tarado. 😂

Diego:
Ya me dijo mi papá que te vieron. ¿Entonces hablaste con ellos? Papá dijo que solo te había visto. ¿Te regañaron?

Pepe:
Sí. Me hubiera escondido, pero para cuando me di cuenta que ellos estaban en el restaurante, tu mamá ya me traía del brazo.

Pepe:
Me pidió que le dijera en dónde estabas, luego tu papá llegó y me dijo: “Tienes tres segundos para decirnos en dónde está Diego y con quién o te acusamos con tus papás”.

Pepe:
Y pues ya les conté que habías hecho una reservación en una cabaña del bosque para pasar el fin de semana con Carlita.

Pepe:
Luego les rogué que no acusaran a Carlita y tú mamá me regañó. Me preguntó que si no tenía cerebro, que si no veía lo peligroso que era ayudarte a hacer semejantes estupideces. 😭 Y pues, luego de cagarme, se salió muy molesta, pero tú papá me agradeció por echarte de cabeza. 😭

Diego:
No te preocupes.

Pepe:
¿No estás molesto conmigo?
¿No eché a perder la entrega de tu inocencia? 🥺😢

Diego:
Para nada.
Papá me llamó para ver si estaba bien. Mamá se molestó un poco, pero no me reclamó nada.

Pepe:
¿Y cómo te fue? 😏🤩
¿Sí se pudo?

Diego:
Estoy perdidamente enamorado. 😍

Pepe:
😂 Me alegro por ti.

...

Cierta tarde, mientras Mariana y Sebastián hacían galletas y merengues en el departamento de ella, el celular que Mariana tenía sobre la mesita de la sala de estar, comenzó a sonar.

Debido a que Mariana tenía las manos en la masa, Sebastián dejó de batir unas claras de huevo y fue a contestar.

—¡Es Carlita! —avisó Sebastián.

—Coloca el alta voz, güero.

Sebastián hizo lo que Mariana le pidió y acercó el teléfono a su novia mientras ambos escucharon a Carla decir:

—¡Hola, Marianita! Oye, Amelia y yo organizamos una fiesta algo peculiar para Pepe por su cumpleaños.

Apenas Sebastián escuchó el nombre del ex de su novia, puso los ojos en blanco mientras que Mariana se ruborizó.

—Oh… Ya. Es este sábado, ¿no? 

—Sí, amiga. A Ame y a mí se nos ocurrió hacer una fiesta de cumpleaños en el mirador del parque sur. Escucha —agregó orgullosa por su idea—, tenemos que estar allí a las seis y media de la mañana ya que el amanecer será a las siete…

—¡Qué flojera!

—¡Es para ver juntos el amanecer! No le digas a nadie, pero el otro día le estaba contando a Diego sobre un manga shoujo, Pepe me escuchó y se puso a hablar conmigo sobre ese manga. Resulta que Pepe ama los shoujos, pero es secreto, no le digas a nadie…

Piña IIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora