NIGHTDALE

35. Rubio o Moreno

Al día siguiente sería sábado y podría recuperar horas de sueño...o eso pensaba hasta que vio la de llamadas que Suja le había dejado en el móvil. Se puso a hacer ejercicio en la habitación del motel antes de enfrentarse a ella. Iba a tener que contar a sus amigos todo lo que había pasado en su ausencia...bueno...quizá a Owen no, no fuese a darle un ataque de los suyos.

Antes de decidir si salía del motel o no, le dedicó a su móvil unos minutos de atención ya que Abel aún estaba durmiendo. No sólo tenía llamadas, Sujamí le había reventado a mensajes, memes y múltiples tonterías que demostraban lo que se había estado aburriendo. Eso o lo había pasado bastante mal y estaba desesperada por un poco de compañía. Ambas, eran ambas.

> On tas-Me aburro-Qué haces, a dónde vas, me gusta lo que veooo nananan eehehe-hola ola hola ola hooooooolaaa ヾ(@゜∇゜@)ノ
-Toma, un vídeo de una llama siendo fabulosa, biach.Vyr intentó no reírse ante el despliegue de herramientas. También ante la flexibilidad del cuello del animal.
>> Hola, pedorra ﾍ(ﾟ∇ﾟﾍ)
> Al fin! Tan hardcore fue la noche?
-Yu okis? (ò__ó)
>>...bastante fuertecita la verdad, tengo cosas que contarte...pero en persona.
> pero estas entera??? Te han hecho pupita??
>> un poco en el culito,( ( | pero ya estoy bien
- contestó, procurando no reírse en voz alta por lo literal de la expresión.
> En el culito??? 'Wait a minute'....⌒°(º ᴗ º )°⌒
>> joder, siempre pensando mal...aunque sí, esta vez tienes motivos de sobra.... "ψ(｀∇')ψ se me ha ido las manos otra vez (u////u)...
> Ayyyy morenaaaaa
-¿quién ha sido el suertudo que ha tocado tierra de Nadie? .+:｡(ﾉ･ω･)ﾉﾞ
-¿lobete rubio o... MORENO? Vyr movió el móvil en modo silencio y le hizo una foto a traición a Abel, quien dormía sobre su estómago y tenía la cara tapada con todo el pelo revuelto.
>>Tengo un problema, Suja.
> ES MORENO!
-pero bueno a este no lo conozco, aunque no es super pálido así que no puede ser un vampiro...
>> ya...bueno...es que...('ω｀*) Es nuevo por aquí. Es humano, por cierto...está to weno.
> uh preséntalo ~
>> uaghj, el lunes te lo presento. Este finde tengo que estudiar un poco...ahora...necesito despertarlo para que me lleve a casa.
> joé todos se lo están pasando bien este finde, vale... ten cuidado.
-si intenta hacerte daño, lo mato ＼| ºヘº |／ *inserte cuchillo aquí*

Al ver un gif de la película de American Psycho, Vyr terminó riéndose en voz alta.>> no es lo que piensas, pero sí, ya te lo cuento después. Besitos loca~

Tras cerrar el chat y ver que aún eran las ocho de la mañana, probó a despertar al cazador, zarandeándolo suavemente del brazo. Sólo consiguió que se girase hacia el otro lado y rumiase entre dientes.

Vyr puso los ojos en blanco, con una sonrisa maliciosa. Vestida con la ropa interior y una de las camisetas anchas de Abel, se le sentó encima de las piernas con cuidado de no hacerle daño.

- Hum, pues nada, montaré en tu moto e iré yo sola a casa...qué remedio.- El chico sonrió soñoliento y abrió los ojos despacio, otras partes de su cuerpo también se habían despertado, probablemente hacía rato.

- Eso si encuentras las llaves...

- Serás...- bufó, decidida a quitarse de encima aunque al final no pudo y sólo le dio un toque suave en el pecho antes de tenderse encima de él -. Tengo que ir a casa, moreno. Seguramente me espere una bronca guapa...aunque créeme que me tientas - sonrió, pellizcándole las tetillas con mala leche.

- ¡Eh! - se quejó, dándole una nalgada como venganza.

Vyr se puso tan colorada con el contacto que se forzó a sí misma a quitarse de encima y rodar hasta poder sentarse. No por que aquello le hubiese incomodado. Le gustaba demasiado. Se conocía y no era recomendable seguir por ese camino. Cuanto antes se alejase de él, mejor. Pero quería repetir con tantas ganas...

- Puedo hacerle un puente a tu moto o volver corriendo. Para mí lo segundo es como un paseo de nada...pero es agradable ir en moto acompañada - gruñó avergonzada, tirándole un cojín.Abel Busco su móvil para mirar la hora y bufó.

- Pero si es tempranísimo.

Vyr lo miró poniendo ojitos y estrujó los brazos contra sus pechos para que la imagen hiciese el resto a través del escote. Llevando una camiseta de él, a la mínima que se inclinaba se veía todo. Sólo podían pasar dos cosas con eso y por suerte, los eventos se inclinaron a su favor.

- Hala, va. Si hasta he hecho ejercicio ya.

El joven se levantó y le miró entrecerrando los ojos. - Eres terrible... - murmuró, dirigiéndose al baño para adecentarse.

- Eso me dicen - evitando seguirle a toda costa, buscó su ropa con la mirada aunque no podía evitar la tentación de espiarlo. Tras unos diez minutos en el baño, el cazador salió más despierto y recuperó los pantalones del suelo.

Ella se había sentado en la cama para ponerse sus propios pantalones y después le tocaba el turno a sus botas. Sus mejillas seguían coloradas y miraba un poco más descaradamente los gestos de su igual. Quizá embobándose más de lo que debería.

Abel se puso una camiseta negra ajustada y se sentó para calzar las botas.

- Así que el hogar de la cazadora. - Sonrió -. ¿Me invitarás al desayuno? - bromeó.

- Bueno...si no te molesta contar medias mentiras y decir que eres mi tutor o algo así...con suerte mi padre no se despertará pronto - sonrió, un poco nerviosa y haciéndose una trenza baja y fuerte. Se puso también la cazadora de la estrella roja y se ajustó el resto.

- No creo que a tu padre le haga gracia escuchar que has pasado la noche con tu... "tutor" - rió con malicia.

Vyr le miró con el ceño fruncido y las orejas coloradas. No pensaba con claridad con ese tío cerca.

- Crees bien...aunque dudo que se haya enterado de que andaba fuera...- suspiró -. Pero tampoco le sorprendería - añadió en voz un poco más baja -. ¿Vamos?

- ¿Porque no le dices que has estado con una amiga? - preguntó, mientras cogía las llaves y abría la puerta -. Puedo dejarte un par de casas más lejos.

- No me arrepiento de lo que ha pasado, si lo dices por eso - contestó, alzando una ceja -. Bueno, da igual, tú déjame donde te diga - sonrió, dándole un beso en la mejilla para huir.

Abel cerró con llave y avanzó a la moto, le ofreció el casco a Vyr y se sentó sobre el vehículo. La cazadora se lo ató con calma y se montó justo detrás, pasando las manos bajo la chaqueta del piloto, ahora con más confianza. Con descaro.

- Estoy lista.- El chico llegó al final a la dirección que le había indicado y apagó el vehículo.

- Su destino, majestad - bromeó.

- Gracias por traerme, caballero - sonrió, quitándose el casco para guardarlo en el cajón del asiento de atrás -. Siento no haberte dejado dormir, pero una tiene demasiadas obligaciones.

- Ya. Suerte con tu padre y... gracias por todo - agregó, lo último con un tono de voz más amable.Suja se había levantado para ir a gritarle al de la moto que dejara de hacer escándalo tan temprano por la mañana cuando vio a Vyr. Entonces se escondió tras la cortina para espiar.

- Calla...- rumió acalorada -. Espero verte pronto y que te portes bien mientras tanto - sonrió por fin -. A todo esto, después de comer suelo ir a entrenar con Rhyss a la tienda. Ya sabes dónde buscarme.

- Nos veremos más tarde entonces - sonrió, encendiendo la moto y perdiéndose entre las calles del pueblo.

Vyr se quedó allí, más tiesa que un palo de escoba. Hasta que no salió de su campo de visión no se giró para mirar de nuevo la casa, buscando a Suja. Esperaba que hubiese visto todo, casi agradecía que Abel hubiese tenido el casco echado, tapándole la cara. Estaba siendo tan tonta que ahora le daba vergüenza.

Vio a su amiga espiando y saludó con la manita. La aludida pegó un gritito y corrió escaleras abajo para abrir la puerta y recibirla en pijama.

- ¡Tiene moto! - fue lo único que ofreció por saludo.

- Y qué no tiene ese tío...- ronroneó, abrazándose a ella -. No te lo he contado...pero es un Cazador, como yo. L...L-lo conocí la noche del jueves....- carraspeó, incómoda.

La menor abrió la boca en una O perfecta mientras se dejaba abrazar.

- ¿Pero Rhyss sabe ya de esto?

- Tía, es que hemos tenido dos días bastante intensitos...- resopló, nerviosa y separándose de ella -. El bombonazo se llama Abel y venía detrás de los lobos. Huían de él por que intentaba matarlos.

Sujamí prestó atención a la historia pues, además de ser larga, estaba llena de detalles que para ella parecían loquísimos. Con la historia de los lobos parecía que se le desencajaría la mandíbula y por suerte, al final consiguió contarle un poco más de Abel, aunque sin entrar en detalles más privados.

Por supuesto desayunaron y dedicaron un par de horitas hablando del tema, cotilleando e intentando arreglar otros problemas, como el de Owen.

Sujamí había decidido ir a ayudar a Rhyss con la búsqueda del hechizo, alternándolo con los estudios y Vyr tenía que estudiar también, comer y entrenar.

El sábado resultó ser un poco más normal que el resto de aquella maldita semana y como estaban demasiado ocupadas, no vieron ni un momento libre para poder coger el teléfono y llamarse.

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Gracias por leernos!