DEJA VU ━━ peter parker

xxxii. mess with the cat

capítulo treinta y dos!
problemas con la gata
( te saca las garras )

—¡BUENO, ENTONCES! —Peter miró a su lado cuando Nina y MJ se unieron a ellos. Él y Ned caminaban por los pasillos de regreso al frente de la escuela cuando sonó la última campana, al pasar junto a los estudiantes limpiando los casilleros, charlando sobre lo que harán durante su verano: casas de vacaciones, viajes, playas, lugares para ir al cine, o mejor aún, el viaje a Europa. Todos los que iban estaban emocionados por eso. Especialmente Peter. ¿Un descanso de la lucha contra el crimen? Sí, por favor. ¿Un descanso de todas las cámaras? Sí. ¿Un descanso del trabajo escolar? Bueno, más o menos... es un viaje escolar, así que... ¿Podrá obtener el mejor telón de fondo para decirle a la chica que le gusta que todavía le gusta? ¿Quién no querría escuchar eso en lo alto de la Torre Eiffel?

¿Un descanso de ver la cara del Sr. Stark en todas partes?

...Peter tenía la sensación de que lo necesitaba más.

Incluso cuando miró hacia un lado, allí estaba, mirándolo fijamente en un mal dibujo de un estudiante con marcador rojo y amarillo. Peter sintió que se le cerraba la garganta. Los recuerdos regresaron a ese día, tan oscuro con cenizas y fuego que parecía como si fuera de noche. El Complejo de los Vengadores se destruyó a su alrededor... Un segundo Peter estaba en Titán, y al siguiente, rodeado por una guerra cinco años después, esperaba ponerse al día y luchar por su vida... y ver morir al Sr. Stark.

No era solo un mentor, no era solo un ídolo que Peter admiraba desde que era un niño. No fue solo el hombre que le dijo: Buen trabajo, chico, en la exposición científica en Queens hace tantos años. No sabía cómo explicar qué era el Sr. Stark, y ahora era demasiado tarde, porque se había ido. Se había ido, y Peter apenas tuvo la oportunidad de ponerse al día, preguntar qué hizo en los últimos cinco años, verlo como un padre, despedirse apropiadamente y agradecerle. Por todo.

Y todavía dolía. Todavía dolía como una herida fresca en el pecho de Peter Parker.

Y nunca olvidará cómo se veía el Sr. Stark: quemado y apenas consciente, incapaz de decir una palabra... solo mirar, solo mirar.

Peter tuvo que apartar la mirada. El tenia que.

—¿Peter?

Se dio cuenta de que había perdido la noción de lo que Nina había estado diciendo. Volviéndose hacia ella al escuchar su nombre, vio un rostro amable con preocupación. Ella los siguió a todos a paso lento en su patineta, apenas la había recuperado de la oficina del director. Ya no tenía a Felicia cerca para robárselo. —¿Estás bien? —ella le preguntó.

Forzó una sonrisa en su rostro, asintiendo. —Sí, sí, solo pensando en el viaje, ya sabes. ¿Qué estabas diciendo?

Ella frunció los labios, sin creerle, pero no dijo más. En cambio, le dio un codazo a MJ a su lado. —Estaba diciendo —dijo Nina—. Que íbamos a tener una fiesta de pijamas... —Michelle levantó la nariz ante la palabra—. Antes de irnos al aeropuerto mañana, juntos —Le envió a Peter una mirada mordaz que MJ no podía ver, diciéndole: no aparecerá esta noche.