Un Beso Letal

10. Promises

-¿Viven ambos juntos?

-Sí-ambos asintieron al unísono.

-Me lo pensaré-conteste con una amplia sonrisa extendiéndose por mis labios.

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Terminamos saliendo del estadio a las cinco de la tarde, porque a Carter se le ocurrió la maravillosa idea de seguir
jugando porque no admite que su hermano haya perdido contra mi.

Y efectivamente, ganó, las siete partidas que jugamos. Fue muy deprimente verlo marcar cuatro canastas seguidas mientras yo no llegaba ni para marcar una limpia.

-Creo que iré a ducharme-comentó sacudiendo su cabello castaño que estaba realmente húmedo por el sudor.

-Apestas-en verdad aún tenía el rico aroma de su perfume, mezclado con menta y champú masculino. Pero algo es algo...

-No te describas-me guiñó un ojo antes de subir corriendo las escaleras hacia el piso de arriba.

-¿Cómo le quedan fuerzas para subir escaleras de dos en dos?-suspiré agotada a puntito de dejarme caer en la entrada, si no fuera por Aiden que me sujeto ya estaría sentada en la entrada.

-No parece que estés acostumbrada a hacer ejercicio, eh-rió mientras me ayudaba a subir las escaleras.

-Tengo agujetas-informé-yo para esto no sirvo.

-¿Última vez que hiciste deporte?

-Salía a correr antes-informé-pero lo deje al llegar aquí.

-Viniste hace dos semanas Evelyn-el pelinegro puso los ojos en blanco-puedes retomarlo.

-Eso intentaré-asentí-también intentaré regresar a boxeo.

-Hay un gimnasio abajo-informó.

-Ya nada me sorprende aquí-resoplé dejándome caer por fin en la gran cama que había en el cuarto en donde pase la noche-puede que hasta tengan la misma NASA aquí.

-Puede ser-el sonrió-bueno... te dejo, tengo que ducharme, dentro de poco tengo que irme.

-¿Por qué?-cuestioné-digo... Reese se ve muy feliz porque estáis aquí con ella, ¿Porqué no vivís aquí ambos?-no entendía nada, tratan a Reese como si fuera su princesa más apreciada, cosa que obviamente entiendo, la niña es un amor de personita, lo que aún no entiendo es el porqué se van, si los tres están felices juntos...

-Nos encantaría quedarnos con ella, pero no se puede-Aiden negó-por cositas que pasaron, el gobierno no cree que Carter y yo seamos responsables para ella.

-Pero, ¿aquí con quien vive?

-Con Aída-se encogió de hombros-y de vez en cuando también viene Thomas Kings.

-¿El padre de Carter?

-Alias mi padrastro-asintió un tanto irritado-por eso, hoy nos tenemos que marchar en menos de dos horas.

-Entonces igual yo debo ducharme, iré con ustedes-decidí al final, creo que es la mejor opción teniendo en cuenta que no soporto a Kylier-y quédate con tus cien euros.

-Te los daré-se llevó la mano al bolsillo pero yo le detuve.

-Solo era broma, si se que Carter te pidió que me dejarás ganar.

-No lo hizo.

-Sí, claro-asentí con ironía-como sea, viviré con ustedes, en lugar de cien pavos dame una habitación bonita en donde dormir-dije con tono amenazante-porque si no...