MARSHALL
Iba en el auto mirando la ventanilla mientras escuchaba música a un volumen muy fuerte, la maldita razón era que la tal Jessy con Aleida vienen junto a mí, ya que según ellas vienen a buscar trabajo y de la ciudad a la casa es mucho dinero (que según Aleida no tienen) si se venían en transporte. No lo sé, pero cuando me lo dijeron creo que mintieron.
A los pocos metros de llegar reconocí la silueta posada a lado de un auto negro hablando por teléfono, el chofer se estaciono y me baje no sin antes decirle un "Gracias Thomas".
Al parecer mi padre aun no me había visto, me acerqué lentamente y rodeé su cintura mientras le mordía levemente el hombro.
—Claro señor Thompson— volteó a mirarme y me acaricio el cabello en un gesto de cariño, miró de reojo detrás de mí y volvió la vista hacia mí, mientras pasaba su brazo encima de mis hombros y me acercaba hacia él —Si de verdad lo necesita puedo ver el informe, solo envíemelo a mi correo y más tarde le llamare— se quedó un momento en silencio —En unos minutos le vuelvo a llamar— añadió y termino con la llamada.
—¿Tienes trabajo? — pregunté mientras miraba hacia arriba, aun con mis manos enrolladas en su cintura.
—Nada con lo que no pueda— se acercó y me dio un beso en la frente. Escuchamos un carraspeo, mire hacia atrás y ahí estaban esas dos mujeres.
Ahg no entiendo porque tengo que estarles soportando todo el maldito tiempo.
Miré a mi padre directamente y enarqué una ceja.
—Le dije a Aleida y a Jessy que nos podía acompañar— sentí un nudo en mi garganta y me solté de su agarre, "Claro, después de todo fueron esposos y supongo que en algún momento se amaron" me coloque nuevamente mis audífonos, subí el máximo volumen y con la canción de pumped up kicks me adentre a la tienda.
Mire que mi padre solo soltó un suspiro y se adelantó para abrir la puerta, pero soy tan orgulloso que abrí el lado izquierdo de esta y me adentre, mientras que por el lado derecho se adentraban Aleida, Jessy y al último mi padre.
Mire a Drake que estaba hablando con unas señoras y tenía varios vestidos en su mano, nos hizo una seña con sus dedos de "un momento"
Marie se me acerco y me sonrió, sin necesidad de hablar me mostro el traje y el vestidor, los de la tienda me conocían tan bien, que sabían que cuando estoy enojado, mis berrinches como Alec los llamaba, mi música se escucha hasta cuando llevaba audífonos.
Me adentre al mostrador y después de varios minutos estar dentro y hasta probarme el birrete salí de este y me acerqué en donde estaba mi padre, él estaba de píe, se podía apreciar detrás del mueble de telas, iba a hablarle, pero él estaba riendo con esas mujeres.
Mordí mi labio fuertemente y me aleje nuevamente al vestidor, me quite el traje nuevamente y al salir se lo di a Marie, alzo las cejas y yo asentí en señal de que me quedaba perfecto.
Salí de la tienda y tecleé en mi celular un mensaje a mi padre.
"Iré a casa yo solo, tengo cosas que comprar. Disfruta tu tiempo con ellas."
Me alejé de la tienda y me pedí un taxi, minutos despues de camino mi celular comenzó a sonar, por más que ignoraba las llamadas interrumpían mi música.
Lo puse en modo avión y seguí tranquilo escuchando mi música melancólica y mirando a través de la ventanilla, si, era un dramático en toda la palabra.
En cuanto llegue a casa, me adentre en mi habitación y la cerré de un portazo, le puse seguro y mordí mi labio una vez más, esta vez con más fuerza, para poder contener las lágrimas, pero fue imposible.
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SINNERS +18
RomanceMarshall era un chico extraordinario, Marshall con solo dieciséis años comenzó una relación con su padre que lo hizo convertirse en un pecador sin perdón, Marshall cuando quiso redimirse, la deuda llego, los pecadores tenían que pagar y el perdón se...