si no vuelvo, recuerda que te amo

Desastre

*Narra Olivia*

Los días pasaron tan de prisa que casi no los noté, entre cuidar de la depresión de Wanda, el estrés post traumático de papá y alistar el funeral de Tony había estado tan ocupada que la vida comenzó a deslizarse entre mis manos, tanto que había olvidado mi cumpleaños 16, de no ser por el pastel que Joe y Steve compraron para mi, habría pasado desapercibido por completo, pero al menos el pequeño festejo sirvió para levantar a Wanda de la cama. 

Pero para el día siguiente ya habíamos vuelto al caos habitual, después de un largo día ocupándome de los preparativos para el funeral, volví a la casa de seguridad para encontrarme con una crisis nerviosa de Wanda, las pesadillas interrumpiendo la siesta de papá y para colmo Sam y Steve habían ido con Bruce para afinar los detalles del viaje para regresar las gemas. Era Joe quien había estado encargándose de Wanda y papá, lo cual lo tenía al borde de un colapso. Tranquilicé a Wanda y la llevé a nuestra habitación para que pudiera dormir y a papá le di un ligero sedante para que pudiera relajarse. 

Una vez puestos en la cama, regresé a la sala y me dejé caer en el sillón, exhausta. Joe se sentó a mi lado y dejó caer la cabeza pues estaba tan cansado como yo. 

-hoy era la cena con mis papás Olivia... 

-mierda... *dije llevándome una mano a la frente* Lo olvidé por completo 

-era importante para mi

-lo se, lo se... de verdad lo siento mucho 

-ni si quiera he podido ir a verlos, siento que a veces olvidas que yo también tengo familia 

Me quedé en silencio pues su comentario me había hecho enojar y sentir mal al mismo tiempo, me levanté del sillón y caminé a las escaleras 

-¡no me dejes hablando solo Olivia!

-¡no tengo la energía, ni las ganas para discutir contigo Joseph!

-¿y crees que yo sí? ¡Llevo cuidando a tu hermana todo el maldito día! 

-¡YO NO TE PEDÍ QUE LO HICIERAS!

-¿¡qué hago entonces!? ¿dejarte aquí sola? ¡POR FAVOR OLIVIA! ¡eres un desastre!, ¿qué no te das cuenta? No puedes con todo, eres fuerte lo sé, pero tú también necesitas descansar y llorar las perdidas. Pepper no fue la única que perdió a Tony, Yelena no fue la única que perdió a Natasha... tu también los perdiste 

Nuevamente me quedé en silencio, no sabía que decir y las emociones se acumulaban en mi pecho ahogándome lentamente, me tomé un momento para respirar y tragar el nudo en mi garganta pues era la única forma de responder 

-no digas eso por favor 

-¿qué cosa? 

Respondió Joe casi en un susurro, supe en ese momento que la culpa golpeó su conciencia 

-no digas que soy un desastre... estoy haciendo lo mejor que puedo ¿sí? 

-Liv lo siento, no quise decirlo de esa forma, perdóname por favor 

Intentó acercarse y abrazarme pero instintivamente di un paso atrás, pues los gritos detonaron los recuerdos en Siberia y nuevamente me sentí como una niña indefensa a punto de ser lastimada. 

Mi gesto lo hizo sentir aún más culpable, agachó la cabeza en derrota y se sentó de nuevo en el sillón, yo me senté en la escalera y escondí la cabeza entre mis codos

-¿qué estamos haciendo Vee?

-no tengo idea *dije entre risas*

-Lamento haberte dicho que eres un desastre