si no vuelvo, recuerda que te amo

Corazón roto

*Narra Olivia*

Busqué a mis hermano entre la gente que intentábamos evacuar, cuando por fin los encontré, miré a Pietro con algo de tristeza 

-¿Ahora si podemos comer el chocolate?

Me sonrió y se agachó para estar a mi nivel

-Vamos a hacer un trato, si logramos salir de esto, te daré todo el chocolate. 

Sonreí de oreja a oreja y asentí con la cabeza, realmente no creía que saldríamos de esta, pero quería hacerlo sentir mejor. De pronto escuché una voz familiar por el comunicador, era Fury. Había llegado en un helicarrier gigantesco, era aun mas grande que los que destruimos en Triskelion. Pietro y yo estábamos atónitos, llegamos a Nat y Steve para admirar lo que sería nuestra salvación. 

-¿Esto es SHIELD? *Dijo mi hermano, aun asombrado por las inmensas naves 

Comenzamos a evacuar a la gente, los subimos a unas naves mas pequeñas. Necesitábamos asegurarnos de que todos estarían a salvo, no sería fácil, pero para esto fuimos entrenados, supongo. 

Mientras subimos a la gente, Stark me llamó por el comunicador

-Vengadorcita, vamos a requerir de tus servicios 

-¿qué debo hacer?

-Necesitamos que ayudes a Thor a destruir la ciudad flotante 

Supongo que tendré que usar mi habilidad de tierra, pero jamás lo había hecho a esta escala, no se si podré hacerlo pero vale la pena intentarlo. 

Antes de destruir la piedra, debíamos evitar que Ultrón dejara caer la ciudad, así que fuimos llamados al núcleo para luchar. Llegamos y rodeamos el núcleo, Ultrón apareció con todo y su ejercito, era el momento clave, la batalla mas importante que hemos librado. 

La batalla comenzó, venían en todas direcciones y tiraban a matar, pero nosotros también éramos fuertes, probablemente mas que ellos. 

Thor, hombre frambuesa, Stark y yo logramos separar a Ultrón del resto y comenzamos a atacarlo al mismo tiempo. Poco a poco se comenzó a debilitar hasta que Hulk llegó y lo lanzó por los aires, entonces decidieron huir, pero no podíamos permitirlo, un señor llamado Rhodey, Frambuesa y yo fuimos tras ellos. 

Volví al núcleo con mis hermanos, Wanda debía protegerlo, Pietro debía llevar a las personas a los botes y yo debía estar lista para destruir la ciudad. Nos miramos, como diciendo hasta pronto y cada quién se dirigió a donde era requerido. 

Thor fue enviado de vuelta a la iglesia y yo fui llamada por Stark, mientras Thor golpeaba la ciudad desde afuera, yo la destruiría desde adentro. De pronto escuché un grito desgarrador, pero fue interrumpido pues desactivaron mi comunicador, no entendía que estaba pasando, intenté salir a buscarla, pero Stark no me lo permitió

-Necesitamos que destruyas esto pequeña 

-pero... mi hermana 

-Ella está bien, lo prometo 

Decidí confiar en él, de cualquier forma no tenia opción. La ciudad comenzó a caer súbitamente, debíamos destruirla ahora o millones de personas morirían.

-Olivia, Thor, a mi señal... ¡¡Ahora!! 

Usé absolutamente toda la fuerza que había en mi, transformamos todo en escombros. Para cuando mi trabajo estaba hecho, ya no quedaba fuerza en mi para volar de vuelta al helicarrier, ni siquiera para intentar mantenerme despierta, poco a poco mis ojos comenzaron a cerrarse mientras miraba las enormes piedras caer sobre mi y hundirme en el océano. 

Desperté por el sonido de la voz de Thor, me tenía entre brazos mientras caminaba dentro del gigantesco Helicarrier de SHIELD. Solo lograba mantener la conciencia por unos segundos, en uno de esos momentos de lucides, sentí como me entregó a los brazos de Nat, ella me sostuvo con delicadeza y retiró el cabello empapado de mi rostro, por un segundo creí que mamá era quien me sostenía. 

-¿Mami? *dije con las pocas fuerzas que me quedaban*

Pero luego todo se tornó negro de nuevo. Desperté un par de horas después en un auto, Steve conducía, Stark iba de copiloto y Nat estaba a mi lado, mi cabeza estaba apoyada en su regazo. Me levanté muy alarmada y mi respiración se agitó de inmediato 

-¿Mis hermanos? ¿Dónde están? ¿Dónde estamos?

-Vamos camino a la torre cielo, todo estará bien. 

-Ellos están ahí 

Hubo un silencio por unos segundos, pero Stark asintió con la cabeza, haciendo que la tranquilidad volviera a mi. 

-No puedo creer que lo logramos, pensé que moriríamos 

-Casi mueres hoy pequeña, estuviste inconsciente por varias horas, nos tenías preocupados 

-lo siento Steve

Un par de minutos después llegamos a la torre, de nuevo disfruté el camino por los pasillos y el elevador. Llegamos a una sala muy grande, mi hermana estaba sentada en el sillón, me miró con tristeza, no lo entendía, habíamos ganado, ¿no es así?

-¿Dónde está Pietro? Prometió darme chocolate si ganábamos 

Cuando miré al resto, parecían consternados, nadie respondía mi pregunta, solo miraban al suelo. 

-Ven aquí cielo *dijo mi hermana desde el sillón*

Me acerqué despacio, por el tono de su voz supe que eran malas noticias. Me tomó de las manos y luego acarició mi rostro, había lagrimas corriendo por sus mejillas. 

-El ya no está cielo, Ultrón le disparó y...

-No, pero el es muy rápido... no pudo.. el es muy rápido, él... 

No pude terminar la oración, comencé a llorar, no podía articular palabra, cada músculo en mi cuerpo dolía, sentía que mi pecho iba a explotar. Wanda me abrazó con fuerza y me acunó en sus brazos, pero aun así me seguía doliendo, como el día que murió mamá. 

*Narra Wanda*

Olivia lloró hasta quedarse dormida, quería llorar pero las lagrimas no salían, me sentía adormecida, no podía creer él se había ido. Todos en la torre se acercaron para darme el pésame, me preguntaron que podían hacer, me ofrecieron agua y comida, pero no sentía hambre o sed, no sentía nada. Pero debía mantenerme fuerte para Olivia. Stark y Steve se acercaron a mi y me miraron con tristeza. 

-Ya prepararon un cuarto para ustedes, será temporal, en lo que terminan las instalaciones del nuevo cuartel, ahí tendrán un hogar.  *dijo Stark con la mirada en el suelo*

Stark parecía querer remediar nuestro dolor a toda costa, no era nada como lo que imaginamos. 

Steve se ofreció a llevar a Olivia en brazos hasta la habitación. Al llegar la recostó en la cama y se sentó a mi lado

-¿necesitas algo?

No quería hablar del tema, así que decidí enfocar mi tristeza a mi deber hacia con Olivia 

-Se quedó dormida con la ropa húmeda, seguramente pescará un resfriado 

-creo que estará bien 

-no quiero despertarla, al menos ahora no siente dolor. 

Me miró con tristeza pero aun así sonrió, me recordó que estará cerca por si lo necesitamos y se marchó, no sin antes depositar un beso en la frente de Olivia y cubrirla con una manta. Me alegra saber que tenemos a alguien en quien apoyarnos, al menos no pasaremos por esto solas.