Secrets ~ Taerosé

『••30••』

Terminaba de ponerme mis tenís cuando mi mamá tomó la maleta que había traído para guardar mis pertenencias.

Ya me habían dado de alta, tenía que seguir una dieta y tratar de estar tranquila. Por ahora me sentía decepcionada y el dolor en mi pecho no se iba pero ya no quería llorar.

Me sentía cansada de eso.

—Tu padre vendra en diez minutos—informó mi madre viendo el mensaje que le había llegado.

Me levante para ayudar a mi mamá pero me sentía débil, sin animos de nada sin embargo me dejó ayudarla para que empezará hacer algo.

Después de tener todo listo esperamos a que mi papá llegará para llevar la maleta, me sorprendía mucho lo que había pasado.

Mis papás me habían dicho que Taehyung se mostraba muy preocupado por mí e incluso había pagado los gastos médicos.

Mi papá entró a la habitación y nos saludó alegre, él intentaba hablarme sobre cualquier cosa para distraerme y se lo agradecida porque funcionaba.

Tomamos mis cosas y salimos de la habitación para irnos del hospital. Durante el trayecto mis papás me llevaron a comer a un restaurante que al solían ir cuando eran más jóvenes.

Yo acepté pues pensaba que me haría bien salir de mi depresión, no podía olvidar lo que pase con Wonwoo pero tampoco podía dejar que me siguiera doliendo tanto lo que había hecho.

El restaurante era similar a lo de los padres de Wonwoo, aún recordaba la primera vez que los conocí y lo amables que se portaron conmigo, ese día el me pidió ser su novia.

—Cariño... —mi madre llamó mi atención—¿Ya sabes que pedirás?

Rápidamente le dije al mesero lo que quería y se fue con nuestras órdenes.

—Ha cambiado mucho el lugar—mencionó mi papá nostálgico.

—Lo se, ahora se ve más moderno—concordo mi mamá—Me alegra que hayamos venido.

—A mi también—comente integrandome a su conversación.

Mis papás sonrieron y continuaron platicandome como era el lugar cuando ellas venían de jóvenes.

Yo escuchaba atenta sus anécdotas, mis papás desde muy jóvenes habían querido salir adelante y era difícil para ellos pues se habían independizado.

Mi mamá conoció en la Universidad a Lee Sunmi quien los ayudó en tiempo económicamente para solventar algunos gastos, fue así como ellas comenzaron a tener una fuerte amistad.

—Es verdad no he hablado con ella—recordó mi mamá—Le preguntaré a Taehyung como se encuentra.

Entonces eso me hizo recordar lo que escuche decir de Jennie y Taehyung, Sunmi en realidad estaba internada en un psiquiatra.

No se me hizo prudente decirlo si Taehyung no lo había dicho era por algo y tampoco quería que supiera que había escuchado una conversación tan personal con su hermana.

Y ahora que lo recordaba Jennie aún no aparecía, ¿donde estará?, me preocupaba mucho aunque ella dijera que estaría bien me intrigada saber cómo estaba.

—¿Saben algo de Jennie?—cuestione intrigada.

—No cariño—habló mi papá—Siguen investigando.

Mis papás tampoco entendían como es que Jennie se hubiera ido de un día para otro, les preocupaba mucho sin embargo no había algo que pudiéramos hacer.

Terminamos de comer y ahora si nos dirigimos al Penthouse.

El camino no había sido tan largo y yo me alegraba de volver después de todo ya consideraba el departamento como mi hogar.

Taehyung nos recibió y se alegró de que yo estuviera mejor algo que le agradecí mucho.

Subí a mi habitación para cambiarme y descansar un poco antes de la cena. Me di una ducha rápida y cuando salí me dispuse a secar mi cabello.

Regrese al cuarto y me acerque al tocador para ponerme crema fue ahí cuando recordé el alajero en donde guarde el anillo de compromiso y las llaves de la casa que había comprado Wonwoo.

La abrí para mirar el anillo, sabía perfectamente que había pertenecido a su madre y creía que lo correcto era devolverlo.

Recordé que mi mamá me había dicho que los papás de Wonwoo estaban preocupados por mi salud pero entendieron cuando dije que no estaba lista para hablar con ellos.

El caso de Wonwoo ya se había cerrado, el asesino, Park Jimin, ya estaba en la cárcel y por lo que sabía su condena había sido de cincuenta años.

Al menos tenía el alivio de que ese tipo estaba pagando por lo que hizo, ahora entendía porque Wonwoo la defendió aunque conociendolo pudo haberlo hecho por cualquier mujer.

Me era difícil procesar todo aún y lo haría poco a poco. Después de cambiarme ya no tuve tiempo de descansar pues Hyeri vino a verme.

—¿Puedo pasar?—tocó mi puerta.

—Adelante—respondí.

De inmediato abrió la puerta y lo primero que ví fue su característica sonrisa, con ella traía una canasta con galletas.

—Que alegría verte mejor Rosie—dijo contenta—Te traje esto—me entregó la canasta.

—Que linda, no te hubieras molestado—dije con una pequeña sonrisa.

—No es ninguna molestia—respondió.

Comenzó a platicarme lo difícil que habían sido estos días, Taehyung tenía mucho trabajo pues él proyecto en Nueva York ya habia empezado y aún no estaba listo para viajar.

Después de un rato platicando nos dimos cuenta de que era hora de la cena así que la acompañe para ayudarla a servir aunque también se nos unió mi madre.

Estábamos a la mitad de la cena cuando mis padres tocaron él tema que menos quería.

—Hija.. —dijo mi padre—Dentro de unos días nos tenemos que ir, creemos que lo mejor para tí es regresar a Nueva Zelanda.

Claramente parecía la mejor opción ahora pero no sabía porque tenía un enorme sentimiento de que no podía hacerlo.

Sentía que aún me quedaban cosas por hacer en Corea, por ejemplo terminar mi carrera y esperar a que Jennie volviera.

—Esto es lo que creemos cariño pero nos interesa saber que es lo que quieres tú—comentó ahora mi madre.

—Vine aquí a estudiar y creo que lo mejor sería que continúe—respondí—Tengo que superar lo que pasó pero siento que debo quedarme.

—¿Estas segura Rosé?—cuestionó mi mamá—Es probable que Taehyung dentro de poco ya no pueda estar contigo.

Entonces me acorde del proyecto, el era un socio importante y ahora que Wonwoo no estaría para ser sus ojos allá no veía otra opción para él.

—No se preocupen, yo aún me quedaré un tiempo por Jennie—respondió Taehyung rápidamente—Si Rosé decide quedarse les aseguró que se quedará en buenas manos.

—¿De verdad? ¿y el proyecto?—cuestione.

—Bueno alguien tenía que ocupar el puesto de Wonwoo—habló con delicadez pues sabíamos que aún era un tema difícil para mí—Así que Siwon contrato a alguien más, esa persona será mis ojos allá.

—Entonces si quieres quedarte no habrá de que preocuparnos—respondió mi mamá—¿De verdad quieres eso?

—Si mamá—respondí decidida.

Mis papás se veían indecisos pero les demostraría que estaría bien.