『••55••』

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Desperté aún envuelta en la misma sabana, mis ojos me ardían por haber llorado hasta quedarme dormida. Era doloroso todo lo que estaba pasando y me sentía mal de no poder hacer algo al respecto.

Después de que comenzaba a ver a Taehyung como un hombre que sabía soportar el dolor y afrontarlo ahora lo veía como un ser despreciable.

Quería seguir llorando pero no podía tenía que buscar la manera de salir de aquí. Me levante y de inmediato me fui a dar un baño para relajarme y quitarme el olor de Taehyung.

Sentir el agua tibia correr sobre mi cuerpo me relajo y me hizo sentir tranquila. Cuando salí me seque y ví mejor la cosas que habían en el baño, la mayoria eran productos que usaba a diario, así confirmaba como Taehyung siempre estuvo al pendiente de cada detalle sobre mí.

Termine de ducharme y me dirigí a mi armario, era sorprendente el orden con la que la habían acomodado. Decidí ponerme algo cómodo, un pans y una sudadera pues comenzaba a sentir un poco de frío.

El lugar se sentía muy silencioso, justo en ese momento comenzaba a sentir pánico sentía que no podría resistir estar mucho tiempo sola y encerrada.

Aunque prefería mil veces estar sola que estar acompañada de Taehyung. No sentía apetito pero ya había pasado mucho desde la última vez que comí y tenía que mantenerme fuerte para salir de aquí.

Me dirigí a la cocina y prepare algo rápido, parecía que tenía muchas variedades para escoger. Al comer no sentía mucha diferencia pues desde la muerte de Hyeri lo hacía sola.

Un suspiro de dolor salió de mi ser, cuando termine de comer me dedique a limpiar todo aunque fue rápido. No tenía nada más que hacer, no había nada para entretenerme.

Y así pase los días que Taehyung no vino, era tan aburrido y mi ansiedad aumentaba cada día al no tener nada productivo que hacer lo peor era que me atormentaba con mis pensamientos.

Sabía cuanto sufrirían mis papás al no verme, solo esperaba que fueran lo suficientemente sabios para saber que yo no me iría así de la nada, sin dejar explicaciones.

Lloraba hasta quedarme dormida, la cabeza me dolía pero era inevitable, por más que buscará una salida era imposible. La puerta estaba bien forzada, era imposible abrirla.

Cuando me quedé completamente dormida, sentí besos húmedos sobre mis hombros lo que ocasionó que despertará sobre saltada.

Al darme la vuelta ví a mi peor pesadilla, ya había regresado y venía con una enorme sonrisa.

—Hola mi amor—saludó—No sabes cuanto te extrañe—comentó acercándose a mí.

Yo lo miré con miedo, quería que se fuera pronto.

—¿No vas a saludarme?—contestó serio.

No supe que hacer con exactitud solo sentí cuando se abalanzó y me beso con necesidad.

Hasta que se volvió a separar y se alejo para quitarse su abrigo colgandolo en el armario.

—Tus padres ya saben—comentó.

—¿Qué te dijeron?—hablé por primera vez angustiada.

—Están muy preocupados—dijo—No podían creer lo que les decía pero tuve que actuar tan bien para que me creyeran además yo siempre he cuidado bién de tí no podían dudar de mí palabra.

Eso me había dolido, no quería que mis papás sufrieran, siempre había sido muy unida con ellos.

—Taehyung... —dije llorando—Tienes que dejarme ir.

Secrets ~ TaeroséDonde viven las historias. Descúbrelo ahora