Yoongi prácticamente había nacido para meter la pata.
Después de la pelea con Jimin le había pedido disculpas y como el humano no era rencoroso lo perdonó de corazón, además descubrió que Yoongi podía ser simpático y divertido con su humor un poquito subido de tono.
Jungkook era el más feliz de que esos dos se llevaran bien, aunque constantemente sermoneaba a Yoongi por enseñarle palabrotas a Jimin.
Tenía un surtido variopinto de ellas, "hijo de puta", " que te den por el culo ", "puta madre ", y muchas otras que el humano aprendía rápidamente, cosa que hacía enojar a Jungkook.
Uno de esos días en que Jimin soltó un rosario completito por pegarse en el pie, Jungkook explotó de coraje.
- ¡ Humamin!, ¿ qué te dije de decir palabrotas?, eso sí lo aprendes rapidito, !aghhh!, pero leer y escribir sí que te cuesta, ¿ verdad?- Jungkook lo miraba con los brazos en jarras y echando humito por las orejas.
- Lo siento Atún, se me salieron- Jimin miraba a hurtadillas a Yoongi quien lo miraba burlón divirtiéndose de lo lindo con la reprimenda que le estaban dando, ¡gato traidor!, pensó Jimin mirándolo con enojo- Yoongi tiene la culpa, se la pasa diciendo palabrotas y...
Yoongi vio a Jungkook darse vuelta hacia él y le mostró todos sus dientes y encías en una sonrisa conciliadora, no tenía ganas de un nuevo sermón por parte de Jungkook.
- Yoongi...- había empezado Atún pero no alcanzó a terminar de hablar.
- ¿ Qué es eso que asoma debajo del colchón de tú cama Atún?- preguntó Yoongi dirigiendo la atención fuera de su persona.
- ¿ Qué cosa?- preguntó Jungkook mirando el colchón por donde se asomaba algo.
Yoongi rápidamente se acercó y sacó unas revistas abriendo sus ojos como platos y luego sonriendo con picardía miró a Jungkook.
- ¡ Guau!, te lo tenías bien calladito bribón- miró a Jungkook que no entendía nada- dándonos sermones y tú picaron mirando cochinadas.
Jimin estaba pálido, Yoongi tenía las revistas que el había escondido en sus manos, hasta el pelito le temblaba de vergüenza y nervios.
- ¿ De qué hablas?, yo no soy ningún cochino- Jungkook le arrebató de un manotazo las revistas y casi se desmaya cuando vio las imágenes, ya no estaba enojado, estaba coloradito de cabeza a rabo- yo...yo nunca las había visto...
- Segurolis- dijo Yoongi- llegaron a tú colchón por arte de magia, porque no creo que Jimin sea el...
Jungkook y Yoongi voltearon a mirarlo.
- ¡Mierda fuiste tú!- dijo Yoongi con la boca casi en el suelo y luego se largó a reír a carcajadas.
- ¿ Humamin?- Jungkook lo miraba con ojos asombrados, no podía ser, su dulce humano, ¿ era un pervertido encubierto?.
- Y tú- Yoongi apuntó a Jungkook con el dedo- sermoneándome por enseñarle palabrotas.
- ¡ No es lo que piensan!- gritó Jimin a punto de llorar.
- Sí, seguro que creíste que eran historietas de Disney- le dijo atorado de la risa Yoongi- se me olvidaba que ereees taaan iiiinocente.
Jimin no sabía que decir para defenderse, además Jungkook parecía momia y no decía nada sólo lo miraba.
- ¡ Son unos tontos hijos de puta!- les gritó Jimin y salió corriendo mientras las lágrimas le caían.
Yoongi dejó de reír y pasó a estar asustado, ¿ y sí Jimin se iba?, Jungkook le patearía el culo y eso le dolería bastante además que de seguro lo pondría de patitas en la calle.
- ¡Atún ve por el humano!, al fin y al cabo no hizo nada malo, ¿o acaso tú nunca has visto una revista con pornografía?- Yoongi lo sacudió del brazo para hacerlo reaccionar.
- Yo...yo nunca había visto algo así- balbuceo Jungkook todavía asombrado y apretando las revistas con sus manos.
- Después hablaré con ustedes, ¡ ahora ve por Jimin!- le gritó Yoongi- ¿ qué tal si tú humano se va?
Jungkook sintió terror de que tal cosa sucediera, su pequeño humano solito vagando por las calles, salió corriendo como si diez perros lo siguieran.
Jimin no había ido muy lejos, se había escondido en la azotea, ¿ cómo iba a mirar a Jungkook sin sentir vergüenza?, ¡ nunca debió recoger esas revistas!, ni siquiera había vuelto a verlas otra vez y no podía parar de llorar.
- ¡ Humamin!, ¡Humamin!, ¡ bebecito!- Atún gritaba a todo pulmón para que Jimin lo escuchara.
Jimin lo oyó y abrazó con más fuerzas sus rodillas escondiendo la cabeza entre ellas sin dejar de llorar.
Jungkook se daba vueltas desesperado hasta que escuchó un tenue gimoteo que venía desde arriba del edificio abandonado y subió las escaleras corriendo hasta la azotea, allí lo vio en un rinconcito hecho un ovillo en la penumbra.
- Humamin...bebé- Jungkook se arrodilló a su lado.
- Déjame sólo Atún- sollozó más fuerte Jimin.
- No, está oscuro y hace frío, vamos adentro mi niñito hermoso- Jungkook le acarició su pelito.
- ¿ No estás enojado?- por fin Jimin levantó la cabeza, Jungkook apenas vislumbraba sus ojitos llorosos.
- No Humamin, nunca podría enojarme contigo, sólo me sorprendiste- ahora Jungkook lo abrazó.
- Me da mucha vergüenza mirarte Atún, seguro estás decepcionado de mí- balbuceo Jimin escondiendo su carita en el cuello de Atún- las encontré por accidente en la basura y me dio curiosidad, pero te juro que sólo las miré una sola vez...y mi cosita despertó...y me asusté...y las escondí...
- Yo te creo tesorito, tú nunca mientes...¿ qué dijiste Humamin?- Jungkook recién procesó las palabras de Jimin- ¿ tú...tú cosita qué?
- Despertó así...solita...cuando miré las revistas...no quería que supieras, por eso las escondí porque me daba muchita vergüenza- Jimin bajó nuevamente su cabeza y retorcía sus deditos.
- Está bien Humamin, no hiciste nada malo, es normal que tu cosita despertara, mi atuncito también lo hizo, ¿ recuerdas?- Jungkook se sentía un poquito extraño hablando de eso con Jimin, pero tenía que hacerlo, su humano era tan inocente.
Jimin asintió y le mostró una sonrisa gigantesca.
- ¡ Eres el mejor Atún!- luego puso cara de enojado- ¡ ese tonto de Yoongi tiene toda la culpa!
- No te enojes con él, está muy preocupado por tí, pensó que te irías, lo que pasa es que sus neuronas son un poco defectuosas- Atún le cerró un ojo sonriendo- pero no se lo vayas a decir.
- ¿ Estaba preocupado?- preguntó Jimin.
- Sí, sabía que metió la pata y está arrepentido, el te quiere Humamin, claro que tiene maneras extrañas de demostrar su cariño, así que perdónalo.
Jimin lo abrazó fuertemente y asintió, ahora todo estaba bien y por primera vez su corazoncito galopó rápido y de forma diferente al sentir el abrazo cariñoso de su Atún.
- ¿Atún?, ¿ puedo ponerle nombre a mi cosita también?
Jungkook rodó los ojos y suspiró derrotado.
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