Pasaron tres días de búsqueda infructuosa . Jimin se veía cada vez más desanimado. Jungkook a solas en la habitación lo consolaba y trataba de subirle el ánimo.
- Mira Humamin te tengo un regalo- le dijo Jungkook pasándole un paquetito plateado.
- ¿Un regalo?¿ para mí?- preguntó Jimin tomándolo con sus manitos.
- Sí- Jungkook sonrió- lo mandé a confeccionar especialmente para tí Humamin.
Jimin desenvolvió el papel y dentro había una cajita de terciopelo de color azul, cuando abrió la cajita sus ojitos se llenaron de lágrimas.
- Es...es precioso Atún- dijo Jimin mirando un anillo de plata con piedrecitas violetas incrustada alrededor que brillaban tenuemente.
- ¿ De verdad?¿ te gusta Humamin?- le preguntó Jungkook mirándolo- es para pedirte oficialmente que seas mi novio.
Jimin se lanzó a sus brazos y lo besó repetidamente por toda su carita riéndose y llorando al mismo tiempo.
- Ponlo en mi dedo Atún- Jimin le pasó su manito y Jungkook sacó el anillo y se lo puso en su dedo corazón y luego sin soltarla le dio un besito tierno y dulce con sabor a lágrimas.
- Eres lo mejor que me pudo haber pasado Atún, cada día te quiero más y más- Jimin miró su anillo ahora en su dedo- ¿pero y tú?
Jungkook sonrió y le mostró su mano donde también había un anillo, lo único diferente eran las piedras de color amarillo.
- Son de tu color favorito Humamin, elegí violeta para el tuyo porque ese es mi color, míralo atentamente- le dijo Jungkook alzando su manito y la suya- el tuyo tiene una sola piedra de color amarillo y el mío una sola de color violeta, con eso quiero decirte que compartimos nuestros corazones...
Jimin no lo dejó terminar y lo abrazó muy fuerte.
- Mi novio es taaaan romántico y dulce, me dan ganas de comerte- le dijo riendo Jimin.
- Puedes...- le dijo Jungkook sonrojándose.
Jimin lo tomó de la mano y lo llevó a la cama donde lo sentó y luego él lo hizo sobre sus piernas rodeándole el cuello con sus brazos.
- Cada vez tengo más ganas de la marca permanente Atún- Jimin restregó su naricita con la de Atún.
Jungkook le rodeó la cintura atrayéndolo hacia sí.
- Yo...yo también lo quiero, pero tengo miedo de lastimarte Humamin- Jungkook depositó un besito en su frente- esperemos un poco más, aún no me siento seguro para dar ese paso.
Jimin suspiró sobre su rostro, Jungkook sintió su aliento tibio y con olor a menta.
- Está bien, pero ¿ podemos seguir practicando?- Jimin le mordió la oreja suavecito, le gustaba esa zona de Jungkook.
- Podemos, no te negaría nada a tí Humamin.
Jimin sonrió y bajo por su mejilla depositando besitos hasta llegar a su boca.
Ya no había dientes chocando, en tres días habían superado esa etapa, ahora se besaban lentamente, degustándose sus bocas, ambos daban y recibían, sintiendo como sus cuerpos reaccionaban, como despertaban a sensaciones desconocidas y placenteras, como el calor de sus cuerpecitos crecía al estar en contacto.
Jimin anhelaba más, quería tener el sabor de la piel de Jungkook impregnado en su piel, y por primera vez metió sus manitos por debajo de la polera de Jungkook recorriendo con la yema de sus dedos sus costados y abdomen. Sintió como Jungkook retuvo el aliento, pero no se alejó sino que volvió a besarlo introduciendo sus palmas por debajo del pijama de Jimin tocando con suavidad su espalda.
El beso se volvió más profundo, ambos anhelando algo más.
Jungkook sabía que si seguían así los llevaría a un punto al que todavía no se sentía preparado para afrontar, así que empezó a bajar la intensidad del beso, poco a poco, y con una fuerza de voluntad que ni el mismo sabía que poseía. Dándole unos últimos piquitos separó su boca y apoyo su frente sobre el hombro de Jimin aún deslizando suavemente sus manos por la piel caliente de la espalda de Jimin.
- Se lo que estás haciendo- le susurró Jimin con su respiración agitada- somos novios Atún, te deseo tanto que duele, ¿podemos tocarnos por lo menos?
Había tal ansiedad en las palabras de Jimin, tanto anhelo, que Jungkook no pudo fingir que no lo afectaba, el se sentía igual.
- Creí...creí que era mejor detenernos, mi gato está alborotado y eso me asusta- le confesó Jungkook.
- No tienes que tener miedo Atún, yo sé que tanto tú como tu gato no harán nada que yo no quiera, y ya no quiero duchas heladas...
- Me pones en aprietos Humamin.
- ¿ No quieres?
- Sí, sí, lo quiero, quiero tocarte y besar más que tú boca- suspiró Jungkook en su cuello estremeciendo a Jimin.
- Tú no harás nada, yo tendré el control, ¿ así estarás más tranquilo?
Jungkook no sabía que responder, ¿ tranquilo?¿ Jimin a cargo?, antes de arrepentirse asintió con su cabeza.
- Voy a cuidar de tí, ¿ok?- Jimin lo tranquilizó.
Le levantó la polera y se la sacó lentamente, deslizando a continuación su mirada por el torso de Jungkook.
- Eres hermoso- Jimin pasó sus palmas abiertas por su cuello bajando lentamente para tocar su pecho y luego sus abdominales trabajados- mi novio es sexy- le dijo Jimin a un Jungkook que casi no respiraba mirando embelesado lo que Jimin le hacía.
Jimin se desabotonó su pijama y lo deslizó fuera de sus brazos.
Jungkook respiró hondo. Jimin era una obra de arte, su piel blanca y tersa, tonificado sin ser musculoso.
- ¿Puedes tocarme?- las palabras de Jimin eran suaves como mantequilla derritiéndose sobre su boca.
Jungkook lo tocó, primero con sus nervios a flote, pero era agradable deslizarse por la piel tibia y suave de Jimin.
- No pares...se siente tan bien- dijo Jimin cerrando sus ojitos y mordiendo seductoramente su labio inferior.
Jungkook ahora llevó su boca para acariciar la piel ardiente de Jimin y éste ahogando un gemido se aferró fuertemente a su pelo, sentía tanto, que no sabía si sería capaz de soportarlo. Para Jungkook era un exquisito bocado que una vez probado ya no quería soltar.
Y así, entre tacto desordenado, besos húmedos, suspiros contenidos, respiraciones agitadas, y roces muy íntimos a través de sus pantalones aún puestos, Atún y Humamin tuvieron su primer orgasmo.