Jimin y Jungkook no podrían ser más diferentes. Ninguno de los dos se habría hablado de no ser porque Jungkook estaba a punto de reprobar química y Jimin era el único que podía ayudarlo.
Una vez sus caminos se cruzaron ya no fue posible separarlos;...
Quería agradecerles por ser pacientes conmigo y seguir leyendo y apoyando esta historia a pesar de no actualizar seguido.
Les juro que pondré el corazón en cada capítulo nuevo para que ustedes puedan disfrutarlo.
Gracias por todo ❤️
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Jimin había salido del baño, secandose el cabello con su toalla amarilla, iba tranquilo por el pasillo hasta que llegó a su cuarto y vio como Yoongi lo miraba todo pálido y nervioso.
—¿Todo bien?
—Tengo que decirte algo.
Jimin miró a todos lados. Rosé no se encontraba en casa, pero eso no evitó que cerrará la puerta del cuarto con seguro y fuera a sentarse a su cama, justo al frente de Yoongi.
—Te escucho —le dijo.
Yoongi, visiblemente se puso más nervioso. Jimin jamás había visto a Yoongi tan nervioso. Incluso, se levantó de la cama y sacudió sus manos para luego, secar el sudor de sus palmas en la camiseta del señor de los anillos que tenía.
Jimin comenzaba a preocuparse de verdad.
—Estoy saliendo con alguien —confesó Yoongi, al fin.
Jimin asintió lentamente.
—Tenía mis sospechas...
—Con un hombre —soltó de golpe, interrumpiendolo—. Con un hombre que conoces. El chico es Taehyung.
Entonces Jimin se quedó en blanco. Su cara perdió el color, y apenas parpadeó al escuchar la confesión.
—¿Jimin?
Yoongi se encogió de vergüenza ante la reacción de Jimin. Por primera vez se sentía vulnerable y al mismo tiempo culpable por ocultar eso tanto tiempo. Al menos, eso creyó Jimin al ver a su amigo de aquella manera.
Intentó controlar sus reacciones faciales y el tono de su voz cuando soltó la primera pegunta:
—¿Tú y Taehyung?
Yoongi asintió.
—¿Juntos?
Yoongi volvió asentir.
—¿En una relación?
Yoongi asintió y luego negó con la cabeza pero luego asintió de nuevo.
—¡No lo sé! —Se puso las manos en la cintura—. Es complicada esta cosa que tenemos él y yo. Nunca le hemos puesto nombre, pero sé que salimos. Llevamos mucho tiempo haciéndolo, debe significar algo, ¿verdad?
—Espera, espera —Jimin lo detuvo—. ¿Cuánto tiempo ha estado ocurriendo lo que sea que ha estado ocurriendo entre ustedes dos?
