No seas cobarde.
Has pasado por peores escenarios y has salido entera, seguro que puedes con una cena.
Estoy siendo ridícula.
Dime algo que no sepa.
De pie frente a la enorme puerta de cristal, no me muevo. Por fuera esta casa podría parecer un condenado museo, las paredes de un color blanco cremoso, luces dando en cada ventana y camino que se ve, el techo de tejas de un gris muy oscuro, dos ventanas en cada lado de la puerta, ya que las tres de arriba no parecían suficientes. Los árboles en los alrededores de la casa dan un toque rural a pesar de estar a solo veinte minutos de la cuidad.
Contengo la respiración cuando toco el timbre junto a la puerta.
En cuanto lo hago, sin saber por qué, analizo lo que llevo puesto. Unos pantalones negros ajustados, una blusa azul sin ser demasiado reveladora pero tampoco parecer una santa, las botas con tacón me llevan matando desde las escaleras en la entrada, mi cabello recogido con una trenza bien hecha sobre mi hombro, mi abrigo ya no parece ser suficiente.
Tal vez no debí ponerme este atuendo hoy, ¿si vengo demasiado casual? ¿o demasiado arreglada? Lo ultimo que necesito es ponerme en ridículo frente a Savannah.
Alguien abre la puerta.
Una mucama por como esta vestida. Me mira de pies a cabeza haciendo que me sienta juzgada.
-Buenas noches, soy Alissa Gallagher- hablo-, la Sra. Walker me espera.
-Claro que sí, Srta. Gallagher, la están esperando en la sala del ala este- dice mientas me ayuda quitarme mi abrigo.
Me deja entrar y me quedo boquiabierta. Esta casa puede pasar por un museo de arte, fotos, pinturas, como si esta fuera una de las casas importantes de la casa de Windsor, junto a la puerta hay un hombre de traje totalmente quieto, lo había visto antes, fue el guarda espaldas que me dejo entra a casa de Theo.
Honestamente no puedo, ni siento el deseo de recordar su nombre. Estoy mas concentrada en no perderme que en él.
-Por aquí Srta.- me guía me mujer.
Me lleva por el pasillo que yo admiró asombrada, un lugar hecho para la realeza, todo esta de una manera tan perfecta o irreal. De una manera que solo en los cuentos para niños podrías imaginarte. Paso frente a un espejo y veo mi reflejo. Me veo, una mancha oscura en un lugar de luz, caos intentando ser paz.
La mujer se detiene frente a unas puertas blancas, sin decir una palabra abre una de las puertas. Escucho voces en la habitación.
Relajo mis hombros, al entrar no veo a nadie, entro a un comedor, en donde supongo que será en donde cenaremos, pero hay una habitación en donde las puertas están abiertas, de ahí provienen.
Al llegar a la puerta me aclaro la garganta.
Hay cinco personas en la sala. Entre ellos Theo, quien está dándome la espalda. La sala es de colores marrones y neutros, con corinas que hacen juego con las ventanas que dan hacia el patio de enfrente.
- ¡Alissa! - escucho a Ada, quien es la primera en dar a conocer mi presencia poniéndose de pie para abrazarme.
Entro a la habitación.
Savannah Walker estaba sentada en una silla individual hablando con Issac, quien está en un sofá, en donde también estaba Ada y con una mujer de cabello claro que también me da la espalda.
Theo esta de pie al otro lado de la sala, se gira al momento que Ada dice mi nombre. Evito mirarlo cuando saludo a mi amiga.
-Buena noche para todos- saludo.
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FALLEN [SAGA CAIDOS #1]
RomanceLa verdad siempre termina saliendo a la luz. Alissa, es una exitosa y muy reconocida editora alcanza la cúspide de su carrera después de tanto trabajo y sacrificio, pero su pasado resurge devolviéndola a sus peores pesadillas al reencontrarse con un...