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- ¿Me vas a besar hoy, o tampoco? - la pelinegra solamente le miraba a los ojos, como si fuera lo más hermoso del mundo, nada le importaba ni siquiera el lugar donde estaban, eran ellas dos y nada más.
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- ¿Sabes? Te merec...
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(...)
Tomaron el desayuno en un silencio un tanto incomodo, principalmente para Harry y Lyra que no paraban de recibir miradas nada discretas de los Weasley. Lyra estaba tratando de evitar las miradas mientras jugaba con su tenedor y su comida, realmente no tenia mucho apetito pero le parecía un poco inadecuado irse a su habitación sabiendo lo que estaba pasando la familia de pelirrojos. Se obligo a comerse lo de su plato bajo la mirada atenta de Sirius quien parecía mas preocupado por su sobrina que por las miradas que los Weasley le daban.
— ¿Tan mal cocino? —pregunto Sirius en un tono intentando sonar bromista
— No, cocinas muy bien — negó rápidamente — Es solo que... Bueno... apesto a vomito y el uniforme es incomodo — Hizo una mueca.
Y no era del todo mentira, pues con todo el asunto se había olvidado por completo que casi se había vomitado encima además de aun llevar puesto el uniforme del día pasado, recordando como horas atrás había estado sudando. Se sentía sucia y solo quería darse una buena ducha.
— Bueno, entonces yo recogeré tu plato, y usted jovencita apestosa — Sirius le dio un toque en la nariz con una pequeña sonrisa — Iras a darte un baño y cambiarte esa ropa —
Arrugo el rostro ante el toque de Sirius, haciéndola soltar una risita.
— Con permiso — murmuro viendo a los Weasley que aun comían
Recibió murmuros que apenas eran audibles, por lo que se levanto de la mesa y se fue en dirección a las escaleras, subiendo hasta el piso que correspondía a su habitación. Abrió la puerta y se dio cuenta que su habitación estaba exactamente como la había dejado durante el verano, estaba impecable y sin una pizca de polvo, dándole a entender que por mas que Kreacher siguiera molesto con ella por no decirle de primera instancia lo sucedido con su abuela, no dejaría de limpiar su habitación.
Se dio la ducha mas larga que había recordado tener en toda su vida, por momentos dejaba que el agua caliente recorriera todo su cuerpo mientras ella seguía dándole vueltas al asunto de lo que había pasado la noche anterior. ¿Cómo había llegado al ministerio? ¿Fue ella la que ataco al señor Weasley? Tal vez por eso los Weasley no la miraban. No encontraba una explicación lógica a lo que había pasado, bueno... Si había una pero no quería aceptarla. Pasaban los minutos y seguía bajo el chorro de agua que caía de la regadera, había terminado de enjabonarse desde un buen tiempo atrás pero el tener tantas cosas en la cabeza no la dejaban moverse de su lugar.
Cuando reacciono de cuanto tiempo llevaba en la ducha fue que finalmente cerro las llaves, tomo su toalla y se enredo en ella para así salir del baño. Una toalla estaba enredada en su cabello y la otra cubría su cuerpo, secándose completamente con esta para así ponerse ropa cómoda, luego se cepillo los dientes suponiendo que en cualquier momento irían a ver al señor Weasley. Vio su baúl de Hogwarts a los pies de su cama, suponiendo que de alguna manera lo habían transportado hasta su habitación. Con una toalla en la mano, para terminar de secarse el cabello y tomando su varita que estaba sobre la cama, bajo las escaleras hasta llegar a la planta baja, camino hasta la cocina pero la encontró extrañamente vacía y silenciosa.
