Cap 32: Un secreto demasiado grande

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Abarne corrió por el pasillo y abrió la puerta de la habitación de Nerea, al ver la escena ante sus ojos cerró la puerta de golpe y puso el seguro con manos temblorosas.

La sirena estaba tirada en el suelo con los ojos fuertemente cerrados, sus manos estaban apoyadas en un charco de agua con vidrios rotos que se clavaron en su piel. Estaba completamente inmóvil, murmurando palabras innentendibles con sutiles expresiones desesperadas y dolorosas.

— ¿Nerea? ¿Nerea? — Abarne movió con nerviosismo el hombro de la mujer. Al ver la extensión escamosa ante sus ojos el nerviosismo le llenó el corazón.

«Esto es malo... Si alguien la viera en este estado, estaríamos en serios problemas. Debo llevarla fuera de aquí»

Abarne trató de recordar algún cuerpo de agua dentro del palacio que fuera lo suficientemente discreto para esconder un pez del tamaño de Nerea. Había un lago artificial profundo al este de las habitaciones del Príncipe, o una cascada falsa al norte de sus habitaciones (las de Nerea y compañía) que no era muy profunda pero era lo suficientemente escondida para sus propósitos. La cascada está mucho más cerca, por lo que Abarne tomó una rápida desición. Tomó al pez de tamaño humano y saltó por la ventana con gran agilidad, llevando a Nerea con la más rápida velocidad que su cuerpo le permitía. En un par de minutos escuchó el sonido de agua corriendo y por fin pudo soltar un pequeño suspiro de alivio.

La cascada tenía unos 3 metros de altura y la corriente bajo ella tenía un metro de profundidad y dos metros de ancho. La cascada estaba oculta detrás de una rocaya y un denso grupo de árboles de naranja. Esta ubicación es lo bastante alejado de los caminos marcados dentro del palacio, por lo que habría menos peligro de ser vistas por alguien.

Abarne colocó a la pequeña sirena bajo la cascada, mojando todo su cuerpo y suspirando al ver qué Nerea dejaba de fruncir el ceño.

— *Ah* Que alivio, me asusté por un momento.

— Y no es para menos, mira este gran secreto. Cualquiera con una lengua de oro ya habría gritado esto al mundo — una voz encantadora sonó junto a Abarne. La Elfo estaba paralizada de los pies a la cabeza.

— Pero oye, eres muy afortunada. Encontrar a una leyenda viva es un gran peso sobre tus hombros ¿puedo tener tu autógrafo? — la encantadora voz volvió a sonar, está vez mezclada con el sonido de suaves pisadas en la roca.

Abarne giró la cabeza para encontrarse con una bella cara de rasgos seductores. Pero esta hermosa aparición tenía la piel y el cabello azul, sus ojos eran azul muy oscuro. Su figura, aunque joven, tenía las curvas en los lugares correctos, y su ropa era agua fluyendo. Esta jovencita estaba parada muy cerca de la cascada, su presencia traía consigo una especie de sensualidad y misterio.

— Una ondina... — Abarne susurro con sorpresa.

— Oh si, este pequeño detalle — la jovencita uso sus delgadas manos para tocar su largo cabello — Una prisionera en mi propia casa. No es nada del otro mundo, querida elfo. Mi vida es bastante aburrida en este pequeño cuerpo de agua artificial.... Oye, yo también soy una rareza andante, tener la suerte de nacer de una cascada artificial...

— Pensé que las ondinas solo nacían de corrientes de agua naturales — Abarne miro a izquierda y derecha para asegurar que nadie estaba cerca.

— Si, por eso soy una rareza andante ¿Quieres mi autógrafo? — Katyin Trébol sonrió ampliamente, actuando como una niña — Tuve la “gran" oportunidad de nacer aquí porque el agua de este riachuelo artificial proviene de la misma corriente subterránea que alimenta al Lago Trébol Celeste. Así que en teoría cuenta como corriente natural.

— Ya veo... Olvide presentarme, mi nombre es Abarne Myrkviar.

— Soy Katyin Trébol — ambas intercambiaron un apretón de manos amistoso — ¿Cómo se llama la sirena?

— Nerea Miramar.

— Ese nombre me suena familiar.... — murmuró Katyin con desconcierto — ¿Y qué hace una sirena tan lejos del mar?

— De saberlo, me ahorraría muchos problemas; lastimosamente no lo sé.

— ¿La conociste en forma humana, verdad?

— Algo así ¿Cómo lo sabes?

— El collar que lleva alrededor del cuello es un artefacto santo de camuflaje. Lo hicieron las sirenas de agua dulce, los ancestros de las actuales sirenas. Hay muchos de estos desechados por ahí, pero es muy raro que encuentren uno en el mar. Pensé que las últimas sirenas de agua dulce habían jurado jamás dejar que sus descendientes pisarán la tierra — Katyin se rasco la barbilla con contemplación.

— ¿Y tú como sabes todo esto? — Abarne tenía una mirada dubitativa, no le cabía en la cabeza cómo una persona atrapada en su propia casa podría saber tanto.

— Memoria heredada. Has escuchado alguna vez que ¿el agua conoce el pasado y el presente? Cuando abrí los ojos por primera vez ya sabía todo eso — Katyin estaba parada con una expresión orgullosa.

— Oh... Pero si es un artefacto santo ¿por qué de repente se revirtió su efecto?

— Porque está dañado. Cuando dije que las últimas sirenas de agua dulce juraron no dejar que sus descendientes pisaran tierra, me refería a que borraron todo su legado, cualquier pista que apuntara en dirección terrestre fue destruida. Y lo que no pudo ser destruido, como este tipo de artefactos santos, fue reestructurado a fuerza o escondido bajo capas sobre capas de  barreras mágicas. En conclusión, aunque es un artefacto santo ya no puede hacer todo lo que podía originalmente, por eso tu amiga perdió su disfraz tan repentinamente.

— Entonces ella se convertirá en sirena de vez en cuando ¿cómo puedo saber cuándo lo hará? Sabes que si alguien más la viera así, ella estaría en grandes problemas — Abarne se sentó al borde de la rocaya mirando con preocupación a la sirena que dormía plácidamente dentro del agua.

— Cuando las perlas neblina son de color azul, quiere decir que el collar tiene suficiente maná para mantener el camuflaje. Y esto será así hasta que la última perla se vuelva completamente blanca, en ese momento el disfraz ya no podrá sostenerse y ella volverá a ser sirena.

— Pero solo ha estado aquí siete días ¿el collar esta tan defectuoso?

— No realmente. Collares en tan buen estado como este tienen la energía suficiente para sostener la forma humana durante 15 días. Pero tu amiga tiene un problema de salud muy grave, lo que implica que el collar tiene, no solo que darle un disfraz humanoide, sino también proteger su océano espiritual y sus venas del mar del alma, lo que implica un mayor gasto de energía.

— Ella parece tener una salud muy pobre — Abarne sacudió la cabeza con resignación e impotencia.

— Es cierto, su salud no es de las mejores, podría contarse entre las peores. Por eso me sorprende que esté aquí y no bien protegida por su familia allá en el mar. Es tan extraño — Katyin se sentó sobre la cascada y jugueteo con el agua — ¿Alguien más sabe que es una sirena?

— Mi hermano, mi prima sabe que existe pero no sabe que esta en tierra — Abarne se sintió  un poco afortunada de que el Templo de la Roca llamará de repente a Nahele, por lo que ella tuvo que irse esa misma mañana de bajar del barco, por lo que Nahele no sabía que había una sirena convertida en humana.

— Entre menos personas lo sepan mejor. Si algo malo le sucede a esta pequeña mientras está en tierra, probablemente vendrán a vengarse después. Tiene la marca de protección de un Sabio de las profundidades sobre su cuerpo, lo que quiere decir que su estatus en su clan no es para nada bajo, incluso podría ser parte del templo.

La sirenita: ¡Así no será la historia!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora