𝘾𝙚𝙣𝙩𝙧𝙤 𝙅𝙪𝙫𝙚𝙣𝙞𝙡 [ SKZ ]

Capítulo 48

El plan estaba hecho y todos estaban listos para contar la historia falsa, sobre el dinero a nadie le importó pues preferían pagar el tratamiento de Hyunjin y que se curara a tener que comer tres veces al día y verlo sufrir.

En un momento pude ver cómo Minho se llevaba a Jisung hasta su habitación, pensaba en si era bueno seguirlos o simplemente mantenerme al margen... creo que en esta ocasión y luego de todo lo sucedido mantenerme al margen era la mejor opción así que eso hice, en todo caso preferí escuchar a los chicos sobre tomar turnos para ver a Hyunjin y en el plan evidentemente yo estaba incluida pues sin mí o papá no podían salir del centro sin que las alarmas sonaran.

Changbin se acercó a mí en uno de esos momentos y me susurró en el oído.

– Me acompañas afuera por favor?

Yo asentí y dejamos a los demás hablando, caminamos hasta el pequeño invernadero que teníamos.

– Te encuentras bien?- tomé su mano.

Changbin suspiró y agachó la cabeza, era cómo si se avergonzara de verme.

– Changbin?

– Hyunjin... él... entró en coma por el golpe o fue por el tumor?

– No lo sé, podría haber sido por cualquiera no estoy segura.

– Crees que si... los jueces se enteran de toda la verdad cerrarían el centro?

– Es posible... dirían que no tomamos control sobre ustedes cómo se debería y... nos echarían.

– Siento que no puedo mentir pero sé que no debo decir la verdad... es muy difícil para mí.

– Quieres que te alejen de aquí?

– No...

– Entonces sigue el plan, por favor, sé que es difícil pero es por todos y en especial por Hyunjin.

– Y el tribunal no puede hacerse cargo de los gastos si digo que fui yo?

– No... a ellos realmente no les importa, lo único que pasará es lo que ya sabes.

– Me siento muy mal t/n... de cualquier forma Hyunjin está en el hospital por mi culpa...

– Changbin... ya hablamos de esto, por favor ya no pienses así, solo me pone triste- puse mi mano sobre su mejilla- verte así me lastima, por favor trata de dejar de pensar que fue tu culpa.

– Está bien... ya no diré nada- se acercó y me dió un abrazo cálido- discúlpame por preocuparte tanto...

– No pasa nada.

– T/N!!!- Felix gritó desde la puerta desconcentrandome por completo y volviendo a alterar mis nervios.

– Qué sucede!?

– Es tu papá! Está en el teléfono y solo quiere hablar contigo.

En ese momento corrí lo más que pude hasta la oficina.

– Papá!?

– Hija... llegaron bien?