Capítulo 11. Sudor y frio.

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Tom

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Tom.

Pasé mis manos por la parte trasera de su cabello, haciendo que sus labios se unieran más a mí.

Sus exquisitos besos sabían a la gloria.

La falta de aire hizo que nos separemos, haciendo que Isa se separara de mí.

-Discúlpeme doctor Hiddleston, pero esto no está bien -caminó hacia la puerta, pero la seguí.

-No te arrepientas de esto -afirmé.

No respondió nada y sabía que tenía razón.

-Mírame Isa

Y ella obedeció.

La tomé de las manos y ella guio su vista hacia el agarré.

-Mírame -volví a ordenar.

-No -respondió.

-Obedece gatita.

Isabella.

No podía resistirme a sus peticiones, pero me ponía cada vez más nerviosa, el solo hecho de mirarlo.

Sus manos comenzaban a quitar mi chaqueta, y no podía moverme, mi cuerpo no reaccionaba, o simplemente quería quedarse ahí. Y... disfrutar.

Recorría ya la piel desnuda de mis brazos, y mi piel se erizaba.

-Vuelve a besarme -ordenó y solo obedecí.

Me puse un poco de puntillas y me acerqué a besarlo, saborear aquellos magníficos labios, me tomó por la cintura uniéndome a él. El beso se hacia en cada segundo que pasaba más intenso, excitante y apasionado.

Mis manos se posicionaron en su bata.

- ¿Puedo? -pregunté en medio de nuestro beso.

-Si gatita -cada vez que me decía así, me recorría un frio violento el cuerpo entero.

Torpemente me deshice de él, sin dejar de besarlo, introdujo sus manos por mi espalda, aun con mi camiseta puesta.

Mis manos comenzaron a desabrochar cada botón de su camisa, sentí sus manos sobre mis nalgas y como me hacía levantar para envolver mis piernas sobre su cadera.

De un movimiento rápido hizo que me sentara en la camilla, seguí con lo mío, pero no la quité de su cuerpo, hice un recorrido con mis manos por su pecho y abdomen marcado. Hasta llegar al inicio de su pantalón sujeto por el cinturón.

Sus manos igual llegaron al único botón de mi short y se deshizo de él rápidamente, deslizándolo por mis nalgas y finalizando por mis piernas.

Tom.

Rápidamente quité su camiseta, dejándome ver sus no tan grandes senos, pero muy bien formados, sin preguntar tomé uno de ellos aun sobre su brasier, cabía perfecto en mi mano, gimió muy bajito, solo para mí.

Champagne Problems (Tom Hiddleston)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora