Capítulo 36. No tenemos nada.

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Isabella

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Isabella.

- ¿A dónde ibas? -preguntó él

-No es algo que te importe -no sé cómo lo dije, pero lo hice.

-Carajo Isabella, ya basta -golpeó el volante y me asusté demasiado

-Entonces habla, ¿Qué demonios quieres?

Soltó un respiro frustrado.

-Gatita, lo que tenemos... -lo interrumpí, poco me importaba que se moleste.

- ¿Lo que tenemos? Tu y yo no tenemos nada -lo dije con fastidio, y de reojo vi como tensaba su mandíbula.

-Carajo, no me interrumpas Isabella.

Tom.

-Entonces ya dime lo que quieres conmigo, tan solo soy un juego para ti -habló Isabella.

Estaba molesto, pero debía tranquilizarme.

-No lo eres.

-Por lo que vi, si lo soy.

-No debiste ver eso -respondí seguido de un respiro.

-Pero lo hice, con eso comprendí todo.

-Por Dios Isabella, no es así.

-¿Entonces? Explícame lo que vi -estaba molesta -por que razón tu estabas con ella en su oficina y no específicamente hablando.

-Una equivocación.

-Claro, una equivocación recorriendo su interior.

-Isa...

- ¿Qué Tom? ¿Qué justificación darás? ¿Qué no es lo que parece?

-No la tengo -negué.

Suspiró y se formó un silencio incomodo.

-Podrías quitar el seguro -habló -necesito irme.

No dije nada, no emití ni un solo sonido.

-Por favor ya abre la bendita puerta -casi gritaba.

-Isa -pasé mi mano por mi cabello -no eres un juego para mí. Elina... ella no es nada.

-Claro, Tom -hizo una pausa -no sé si puedo creerte

-Yo estoy siendo sincero contigo, ¿Qué más quieres Isabella? -pregunté tratando de mantener la calma.

-Quiero no volver a poner en riesgo mi corazón -volteó a verme.

-Yo quiero lo mismo -la miré.

Tenía que decirle la verdad, la verdad de que no quiero perderla, de que me gusta y que me siento bien a su lado, a pesar de tener miedo, siento que mi corazón era lo que necesitaba.

-Isa no es fácil esto, no para mí. No quiero que te alejes de mi vida.

-Entonces no permitas que me vaya.

Champagne Problems (Tom Hiddleston)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora