Narrador Omnisciente
Cuando Nikolay atendió la llamada de su cuñado nunca se imaginó que sería para darle una noticia tan mala. Su ira comenzó a crecer de manera desmedida porque en su organización los niños eran sagrados.
El que Piero fuera su sobrino hacía las cosas más difíciles; cuando se lo comunicara a su esposa las cosas se volverían intensas. Ailín era una mujer dulce, pero despiadada cuando alguien tocaba a los suyos.
Sabía que debía dejar todo organizado cuanto antes, ya que en el momento en que le dijera a su tigresa, ella organizaría a todo su equipo y los enviaría a Italia para acabar con los desgraciados que tenían cautivo a su sobrino.
La sangre tira y por eso sabía lo que pasaría a continuación: la guerra comenzaría entre las mafias más icónicas del mundo, porque... La familia es lo primero.
Llamó a sus amigos y empleados de confianza para ponerlos al corriente. Viktor, Marko y Aleksei estuvieron de acuerdo con él y le dijeron que se harían cargo del negocio hasta que volvieran.
Sabían que el viaje podría durar meses y no pensaban defraudar a su jefe por nada del mundo. Llamaron a sus mujeres y les comentaron lo sucedido, debían prepararse para una contención total de la mansión.
Malena, Lucía y Carolina, asintieron a sus esposos dejándoles claro que nadie podría contra el escuadrón «Fénix». Desde la última vez que los rebeldes tomaron la casa, muchas cosas habían mejorado. Una, era la seguridad informática gracias a los programas creados por Anya.
El recinto no solamente contaba con cámaras infrarrojas y de movimiento, sino que por medio de comandos de voz se sellaba a cal y canto haciéndolo impenetrable desde afuera. Y si alguien ajeno a la casa quedaba atrapado dentro, su muerte estaba asegurada.
—тигрица (tigresa), tenemos que salir con urgencia para Italia —dijo Nikolay entrando al dormitorio donde su mujer se encontraba jugando con los niños.
—Ljubav (amor), ¿ha pasado algo con nuestros socios o con el club? —contestó ella sin entender las prisas de su esposo.
—No sé cómo decirte esto... pero..., han secuestrado a Piero, tu hermano me pidió ayuda. Está desesperado y lo entiendo porque en su lugar estaría igual o peor —sus palabras salen temblorosas.
Ailín lo miró y sus ojos se cristalizaron, procesaba la información detenidamente mientras miraba a su marido afectado, seguramente pensando en lo que le podrían estar haciendo a su sobrino.
—No te alteres cariño, encontraremos a Piero y todos los implicados en el secuestro lo pagarán —la tranquilidad de esa mujer era aterradora.
Nikolay la miraba sabiendo lo que bullía en su interior. No por nada era la sicaria más temida de el Cirujano, le había enseñado a mantener la calma a la perfección para calcular cada paso que diera; y eso era lo que estaba haciendo en estos momentos.
—Sé que lograremos matarlos a todos, pero el pensar en que esté sufriendo o lo estén torturando no me deja ser racional. Si algo como eso les pasara a nuestros hijos, no sé lo que sería capaz de hacer —le comentó él dejándose ver vulnerable.
—Yo prefiero no imaginarme esos escenarios porque no podría reaccionar como se espera de mí en estos momentos. Tampoco me detengo a cavilar en lo que deben estar padeciendo mi hermano y Anya porque las emociones me harían flaquear y eso es inaceptable —Stjepan la había entrenado bien y ella jamás defraudaba.
—Por eso formamos tan buen equipo juntos tигрица (tigresa), eres implacable y bloqueas tus sentimientos para mantenerte alerta y enfocada. Sé que estás angustiada aunque no lo demuestres.
»He organizado las cosas para viajar cuanto antes. Los chicos se encargarán de todo; tu padre vendrá a ayudar al mío con las entregas y juntos serán la cara visible de los negocios hasta que volvamos —dijo Nikolay.
—Entonces solo queda comunicarle a Malena, Lucía y Carolina que tendrán que hacer horas extras... —dijo suspirando, ya que no le gustaba ausentarse por largos períodos de tiempo porque extrañaba demasiado a sus hijos.
—Eso también ya está solucionado amor, Viktor, Marko y Aleksei ya les informaron y han activado el protocolo de seguridad. Hasta no saber los nombres de todos los implicados será mejor actuar con cautela —Ailín lo miró y le sonrió.
—Veo que tienes todo bajo control —dijo acercándose a él y besándolo con pasión.
—No sabemos si el secuestro es en represalia a tu hermano o a toda su familia, y eso nos incluye a nosotros —contestó él mientras metía una mano dentro del pantalón de su esposa internando sus dedos en lo profundo de su cavidad.
—Nikolay... ahh... por... favor, ljubav (amor)... no hay tiempo... ahhh... —jadeaba sin poder evitarlo—. Debemos viajar con premura... dios... ahh... —Nikolay disfrutaba viéndola perdida y a su merced, eso no cambiaría nunca.
Aunque ella pudiera matarlo, él la dominaba y doblegaba a su antojo. Le hacía perder la cabeza, siempre había sido así, por eso, ella ya no luchaba y se dejaba llevar perdida en la lujuria.
Luego de unos minutos relajando el estrés salieron rumbo al aeropuerto privado, el jet saldría a la hora estipulada y no se retrasaría por nada. Nikolay ya tendría tiempo de saciarse y tomarla como quería en las ocho horas que duraba el vuelo de Moscú a Milán; porque así eran ellos... pura pasión y sexo desenfrenado.
******
Cuando llegaron a Italia llamaron a Patrick para saber dónde estaba, él les envió un mensaje indicando que fuesen a la bodega Nº3, le pasó la dirección y le dijo que los esperaba allí.
Ellos sabían que no sería bonito lo que verían, porque si Nikolay era sádico cuando torturaba... Patrick lo superaba.
Gustav había llegado hacía unas horas con su mujer y cuñada, ya que para los Dmitriev siempre había reinado un lema: La familia es lo primero. Por eso no dudó en mover sus citas y viajar a la brevedad para apoyar a su sobrina y ayudar a su esposo y socio en lo que hiciera falta.
Los ánimos entre Gustav y Sam estaban caldeados porque el «Alacrán» había logrado casarse con ella haciéndole firmar un aval (que era su club Addio al Celibato) por hacerse responsable de una deuda que su hermana tenía y por la que la estaban amenazando.
La muy ingenua creyó en la generosidad desinteresada del ruso, aceptando sin darse cuenta que el contrato que en realidad firmaba era un acta de matrimonio. Sam estaba furiosa y quería cobrarle ese engaño al bombón de su esposo... como ella le decía sin que él supiera. Pero esa es otra historia que pronto conoceréis.
Al entrar en la bodega se encontraron con una escena que los dejó anonadados ya que no era Patrick el que estaba torturando a uno de los infiltrados, sino Anya. Su tío se mostraba complacido y feliz de ver lo buena que había salido su pequeña para el negocio.
Patrick estaba embelesado con su chiquilla, la miraba con lujuria, disfrutaba de verla faenar con tanta delicadeza y destreza. Su pecho se hinchaba de orgullo al percibir lo relajada que estaba con lo que hacía; no se apreciaba remordimiento o dolor en sus actos y eso lo emocionó en demasía.
Ailín se sentía orgullosa de su cuñada porque en sus ojos veía determinación, esa que cualquier madre tiene cuando lastiman a su cachorro. En el caso de Anya era más profunda porque ni siquiera sabía dónde lo tenían, haciéndola más peligrosa y sádica.
Sabía que su hermanita como le decía cariñosamente, llegaría hasta las últimas consecuencias con tal de obtener una respuesta; y ese hombre se la daría, sí o sí.
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Desvelando tus secretos
RomancePatrick Graffagnino es el próximo jefe de la Sacra. Impulsivo, manipulador y arrogante, es lo que lo define. Cree que siempre lleva razón, es capaz de hacer cualquier cosa con tal de obtener lo que desea. No le importan las consecuencias de sus act...