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Kenma llegó a casa, realmente se le había pasado la hora.
— ¡Kenma!
Hinata se le tiró encima y de forma inconsciente lo olfateó por unos segundos y luego, siguió en eso al sentir un olor desconocido.
— ¿Estiviste con otra personita que no conocemos? — Siguió olfateandolo. — Desconocido... alfa no peligroso, feromonas tranquilas.
— Hice un amigo.. — Acarició el cabello de Hinata. — Hola Suga.
— Hola cariño.
Sugawara apareció con su pequeño hijo entre los brazos, quien estaba en su pecho en un intento de dormir.
— ¿Hoy saldrán en la noche igual?
— ¡Solo para vigilar! iremos luego con Theo y ya sabe, simplemente estaremos ahí para hacernos presente. — Sonrió. — ¡Tenemos un avance! es una chica de 16 años y otro chico de 14 años, ambos omegas que se unieron a nosotros y suelen acompañarnos de vez en cuando. El lugar cada vez se hace más grande.. todos los días
— Deben tener cuidado con eso.. recuerden que los pueden engañar. — Ladeó su cabeza.
– Theo se encarga de eso, de que no sea un engaño. — Bostezó. — ¡Así que tranquilo suga! somos cuidadosos.
– Ah.. — Soltó una pequeña risa, acercandose luego a ambos, dejando un beso en su frente. — Me gustaría ayudarlos, pero mi pequeño niño no puede estar sin mamá.
— ¡No importa! que estés aquí animando ya es de gran ayuda, suga.
— ¿Van a comer?
Ambos asintieron, dirigiendose hacia la cocina luego de las indicaciones de Suga quien iba a dejar a Keitaro.
— Tomen algo de sopa para poder calentar el cuerpo, ¿sí? luego comen algo del pastel que preparé y ya hacen lo que gusten. — Se sentó.
— ¡Dormiremos! y luego saldremos.. algún día, iremos de día donde todos nos vean. — Habló Hinata mientras tomaba sopa.
— ¿Eso no es peligroso?
— Pues si.. pero es como seguir ocultándose si no lo hacemos. — Kenma Habló. — Saldremos cuando seamos lo suficientemente grandes, mientras nos mantendremos exponiendo alfas y ayudando a omegas a prevenir, esop.
— Tengan cuidado, tengan cuidado con la policía y sus armas, no creo que duden en disparar. — Los miró. — Ustedes saben..
— ¡Lo sabemos! pero sabemos en dónde debemos estar para no estar en real contacto con ellos.. ¡somos como ninjas en las noches! pegamos y corremos, tirando pintura también.. así.
— Ya, ya. — Negó, riendo luego. — Sigan comiendo, deben alimentarse bien antes de andar por ahí, no quiero que se desmayen.
— Kenma. — Lo miró, teniendo su boca llena. — ¡Aprendamos a hacer bombas! explosivas y de humo, ¡las de humo son más utilices ahora!
