Only One ✅

-Capítulo 15-

UN DÍA ANTES DEL COMIENZO DE LOS JUEGOS

ABNER

-Abner, venga...

Pero él no quería hablar sobre aquello con su hermano. Seguramente Damen se burlaría de él, y no quería que eso pasara.

-No pienso hablar contigo.

Abner camina hasta su cuarto y entra. Cuando va a cerrar la puerta, su hermano se interpone y entra.

-Hermanito, ya te he dicho que no voy a decir nada estúpido.

Aquello no le sorprende al chico pelirrojo. Damen siempre se solía ponerse por encima de los demás. Cosas de tener demasiado ego.

-Tú eres estúpido siempre.

Damen suelta una risa. Parece que estar obligando a su hermano a hablar le divierte.

-Va Abner, ¿te gustan los hombres o no?

-¿Si te respondo te callarás de una maldita vez y te irás de mi habitación?

Damen estira la mano y la coloca de tal forma que Abner pueda estrecharla.

-Trato hecho.

Los dos hermanos asienten y se sientan en la cama de Abner para iniciar la conversación.

-Bien, no pienso andarme con rodeos. Te voy a decir la verdad y si no te gusta es tu problema.

-Está bien hermanito.

Abner se aclara la garganta y procede.

-Me gustan los hombres.

Damen asiente como si él ya lo supiera y se levanta victorioso.

-¿Hay alguien que te guste ahora mismo?

-Sí.

-¿Puedo saber quién es el afortunado?

-Tom.

-¿El panadero? -Abner asiente y espera a que Damen diga algo, pero no ocurre nada. El chico piensa durante unos instantes y luego camina para salir de la habitación.- Hoy dejarás de quererlo.

Abner se queda estupefacto sin saber cómo interpretar aquello.

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Damen había salido de la casa hacía unas horas y sus padres no estaban en casa, así que Abner estaba solo. El chico estaba sentado en el sofá sin saber qué hacer. Podría entrenar para los juegos, pero eso supondría un gasto de energía innecesario. Prefería esperar hasta el comienzo. Abner decide cerrar los ojos en un intento de dormirse, pero la puerta de la casa se abre. Abner mira y ve la cabellera pelirroja de su hermano entrar a la casa acompañado de alguien más. Abner se fija mejor y lo reconoce. Sí, era él, no había ninguna duda. Pelo castaño, ojos naranjas, rostro lleno de pecas... Era Tom.

-Damen, ¿qué haces con él aquí?

El chico mira a su acompañante y le guiña el ojo. El otro joven sonríe tímido.

-Abner, tu hermano es todo un caballero...

Tom coloca su mano sobre el hombro de Damen y lo acaricia.

-¿Qué mierdas está ocurriendo aquí?

Abner se levanta y se acerca a la pareja de chicos.

-Oye Abner, no te enfades. Te lo voy a explicar.

Damen se peina el largo cabello con la mano y luego procede con la explicación.

-He ido a por pan a su panadería. Él estaba allí atendiendo y hemos empezado a hablar. Nos hemos caído demasiado bien, así que lo he invitado a venir a casa. Además, me ha convencido para probar cosas nuevas.