-Capítulo 32-

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DÍA 3
···
HAZECURIA

ELIANA

Llevaba ya un día con Grette, pero Eliana lo había sentido como unos minutos. La chica no se había dado cuenta de que ya habían perdido un día hasta que llegó la noche. Estuvieron todo el día paseando en busca de alguien, pero no habían logrado ver nada. Al caer la noche decidieron que descansarían y cuando amaneciera seguirían la búsqueda. Y allí estaban, buscando a alguien. Eliana no sabía con certeza qué ocurriría si se cruzaban alguno de los demás participantes, pero sabiendo lo poco que conocía de su acompañante, seguramente Grette no dudaría en matarlo.

La pareja había estado aproximadamente dos horas caminando sin encontrar nada. Se supone que deberían de encontrarse entre los participantes, pero Eliana, en los tres días que llevaba allí, solamente se había encontrado con Grette. Y no la había matado.

-Eliana...

La chica mira a la rubia.

-¿Qué ocurre?

Grette señala al frente con el dedo y Eliana mira hacia aquella dirección. Al instante entiende porque la chica había señalado hacia allí. Eliana ve a dos chicos, uno pelirrojo y el otro pelinegro, que están allí, a unos metros de ellas. No se han percatado de la presencia de las chicas debido a los árboles que los separan.

Grette y Eliana caminan lentamente hacia atrás para hacer un poco de distancia con la pareja y así hablar sobre lo qué harán. Grette deja a Xenox en una zona un poco más alejada para que no le pase nada y luego vuelve con Eliana para planear sus siguientes movimientos.

-Bien, tenemos que acabar con ellos.

Eliana no parece muy contenta con esa decisión, pero es lo que deben hacer. Entiende que para no morir debe matar, y es lo que piensa hacer.

-Grette, entiendo tu plan, pero sabes que lo más probable es que acabemos perdiendo nosotras, ¿no? Son dos chicos, mucho más altos que nosotras y más fuertes, dudo que podamos luchar contra ellos y ganarles.

Grette se acerca a Eliana y la agarra del rostro.

-Hay algo mucho más fuerte que dos hombres altos y fuertes: Dos mujeres con sed de venganza.

Eliana sonríe y siente una oleada de valor. Sí, lo logrará. Ella lo hará por Skender y Grette por Aetel.

Las dos jóvenes vuelven al lugar en el que estaban antes y se colocan tras un árbol. Cuando estén preparadas para atacar solamente tendrán que salir de su escondite e intentarlo.

Grette agarra de la mano a Eliana y se la apreta, dándole más fuerzas. La chica de pelo rubio se acerca al oído de Eliana y le susurra algo.

-Cuando te de la señal salimos y nos los cargamos. -Eliana asiente, esperando la señal. Va mirando de vez en cuando a los chicos para ver si comienzan a andar o hacen algo extraño, pero simplemente están allí parados, descansando para seguir con su camino.- Si en los próximos dos minutos no ocurre nada salimos. -Eliana espera ansiosa la señal, pero tarda en llegar.- ¡Ya!

Las dos chicas salen corriendo y cada una va hacia uno de los chicos, pero al verlos paran en seco. Los dos jóvenes se estaban besando y, al ver a Grette y a Eliana ir corriendo hacia ellos han parado.

-¿Qué narices?

El pelirrojo parece estar sorprendido. Se acerca a su compañero y le agarra la mano.

-¿Vosotras quiénes sois?

Grette apunta con su arco a los chicos y Eliana, al ver que su acompañante no ha bajado la guardia en ningún momento, decide agarrar su arma. Pero entonces, en el peor momento, se da cuenta de que ella no tiene arma. Solamente tiene un cuchillo, pero eso no le servirá ni para defenderse de un simple animal.

-Yo me llamo Eliana y ella es Grette. ¿Cómo os llamáis vosotros?

Los chicos dudan unos instantes pero luego responden.

-Yo soy Blake y él es Abner.

Los cuatro se miran unos segundos y luego, tras ver que ninguno hacia nada, el pelirrojo decide hablar.

-¿Participáis en los juegos, verdad?

Eliana asiente y luego ve que Abner empieza a cargar una ballesta. Los cuatro jóvenes están preparados para cuando uno haga un simple movimiento atacar. Abner apunta a Eliana con su arma y Grette apunta a Blake. Eliana mira a la chica de pelo rubio esperando que no sea capaz de empezar ella la lucha, pero se da cuenta de que está tensando el arco para lanzar una flecha. Si ella ataca, matará a Blake y Abner también atacará y la matará a ella. Están entre la espada y la pared.

-¡Parad! -Eliana no puede más y habla. No puede permitir que alguno muera. Ella quiere ser feliz con Grette y, aunque no debería, también quiere que aquellos dos chicos sean felices juntos. Si tiene que escoger entre la muerte y el amor, elige el amor.- ¿Podemos hacer como que no nos hemos visto?

Grette se acerca a Eliana y le recrimina lo que acaba de hacer.

-Eliana, tú misma habías aceptado acabar con ellos. ¿Porqué mierdas ahora no quieres seguir con el plan?

Eliana mira a los dos chicos, que se habían relajado, y luego vuelve a mirar a Grette.

-Se quieren y yo no soy capaz de ver cómo se rompe una pareja. Prefiero dejarlos marchar y perder antes que matarlos y ganar. Si alguno de los dos muere por mi culpa me sentiré mal por el resto de mi vida.

Grette suspira y les indica a los chicos que se pueden marchar. La pareja comienza a andar y desaparecen de allí.

-Que sepas que cuando menos te lo esperes alguno de esos dos te matará. Aquí no existe lo bueno y lo malo, aquí lo único que hay es la capacidad de vivir o morir. Ya verás que al final pensarás que haberlos matado habría sido lo mejor.

Eliana no piensa en lo que Grette le estaba diciendo. En ese momento lo único que tenia en mente era el beso de los dos chicos. Era la primera vez que veía a una pareja del mismo sexo besarse. Si ellos dos podían significaba que...

-¡Grette!

Eliana corre tras la chica, que había comenzado a caminar hacia su caballo, y la agarra de los hombros. Cuando ésta se gira, Eliana la besa.

Por fin sabe que lo que siente por aquella chica es real.

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