13

2K 254 487
                                        


OHM

Día uno.

Nanon se acuesta en el sofá, después de colocar un vaso de agua en la mesa, y lo miro en silencio, porque estoy tenso.

No debería estar preocupado, porque tiene supresores, así que no puede salir mal.

—¿Tanto miedo te da? —me pregunta agarrando su teléfono.

—Nunca he tenido que estar cerca de un Omega en su celo, y según he oído, se puede perder el control.

—¿Hablas del sexo?

—Sí.

—Ohm, yo ya quiero coger contigo, no es como si fuera algo nuevo, relájate, ¿sí?

—Hablo de mí.

Voltea a verme, claramente interesado.

—¿De ti?

—H-Hueles diferente, y me está poniendo nervioso.

—Se llaman feromonas, y es la razón por la que no puedo salir, pero tú no tienes que preocuparte por eso, no eres irracional como los Alfas de afuera, y yo siempre me porto bien.

Día dos.

Empieza a preocuparme que Nanon no haya salido hoy de su habitación.

Tiene un inhibidor de olor, así que desde la sala no me siento golpeado por su aroma, pero ni siquiera me ha dado los buenos días a los que ya me acostumbré.

—Hola —dice Jimmy abriendo la puerta principal y lo miro asustado— Nanon siempre autoriza mi huella para estos días, le traje de comer y como no tengo idea de lo que comes tú, tengo opciones, hay galletas para que tengas el pelo fuerte, y latas de carne para adulto, no tienes que agradecer.

Perfecto, comida de perro, no me sorprende.

Él camina, luego de poner unas hamburguesas en un plato, hacia la habitación, pero antes de tocar la manija, me mira.

—Me estás gruñendo, Ohm.

—No.

—Me estás gruñendo —repite ahora sin darme la espalda— ¿Vas a atacarme o algo parecido?

—No.

—Bien —dice volviendo a intentar abrir, y le gruño sin querer.

—Perdón, Jimmy.

—Si me atacas voy a matarte, y veré la manera de justificarme con Nanon.

—No quiero atacarte, s-solo…

—¿No quieres que otro Alfa se acerque a tu Omega cuando está en celo? —pregunta riendo.

—Él no es mi Omega.

Ríe más fuerte y pone el plato en mis manos.

—Bien, lobo tonto que no entiende que el único olor que me calienta es el de un Alfa, para que no sigas haciendo un berrinche, vas a encargarte tú.

—Pero Nanon, no ha salido de ahí, y va a molestarse si entro.

—No lo hará, pero tal vez le asuste verte, porque suele ser muy desconfiado los primeros días, no sé si él te lo ha dicho, pero realmente solo quiere descansar ahora, y es importante que te asegures de que tome la pastilla también.

Me pongo nervioso al ver que me ha dejado solo.

Es mi culpa, lo admito, pero no puedo controlarlo.

Me levanto, para ir a la puerta, pero no quiero abrirla, así que toco primero, sin encontrar una respuesta.

Zona roja || OhmnanonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora