NANONVeo a Ohm mirando el techo, cuando salgo de mi habitación, porque no puedo dormir.
Creo que él tampoco.
No prendo la luz, pero no está tan oscuro, por la luz que llega de la terraza y camino con cuidado hasta su lado.
Me siento en la alfombra, apoyando la cabeza en el sofá, abrazando la almohada que he traído.
He estado pensando mucho, porque ya no puedo ignorar que Ohm es especial para mí.
—¿Qué pasó? —pregunta obviamente confundido.
—No puedo dormir.
—¿Sigues enojado conmigo?
—¿Tú sigues con ganas de hablar con First?
—No —responde con claras ganas de reírse.
—Entonces no.
Suspira, acomodándose en su lugar.
—Pensé que First te agradaba.
—First me agrada, nosotros somos amigos —digo mirándole.
—¿Entonces por qué estás tan enojado?
—Él dijo que quería quedarse contigo.
Es terrible la sensación que pasa por mi cuerpo, cuando siento que alguien va a tomar lo que es mío.
Y para mi lobo, Ohm es el Alfa que me pertenece.
—Es que no me pusiste una correa —bromea sonriéndome, pero yo hago un puchero.
Él suspira levantándose, para sentarse a mi lado.
—Nanon —dice golpeando su hombro con el mío— tú eres complicado.
—Lo sé —respondo asintiendo— es que mi lobo y yo siempre estamos en desacuerdo, esa es la forma bonita de decir que debo luchar con mi parte instintiva, todo el tiempo.
—Últimamente me está ocurriendo.
Volteo hacia él, interesado en lo que dice.
—¿En serio?
—Nunca antes mi lobo había querido tanto algo, y yo siempre he estado bajo control, pero ahora parece no entender que no puede tener lo que quiere.
—¿Qué quiere?
—A ti.
Bajo la mirada, intentando ignorar esa emoción que he sentido al oírlo.
Es que yo no soy así, pero empieza a ser inevitable negar lo que me hace sentir.
—No es bueno para ti, estar interesado en mí —susurro sin mirarlo— ya te lo he dicho, no perteneces a este lugar.
—Lo sé.
—Pero te quiero mantener conmigo, y eso está haciéndome mierda la cabeza —le digo sinceramente— no quiero que veas a otros Omegas, porque tú eres mío, y me asusta pensar de esa manera.
—Lo entiendo, yo sé que eres literalmente la peor opción para tener algo de lo que yo busco.
—Sí, es justamente lo que digo, esa es una idea terrible y por eso creo que debería sacarte de este lugar.
—Eso nos ahorraría muchos problemas.
—Sí —respondo mirando sus labios.
Jadeo cuando me agarra del cuello, y me besa, atrapando con fuerza mi labio inferior.
Odio tener a mi estúpido lobo feliz, porque esto es lo que quiere.
Suspiro cuando agarra mi mejilla al alejarse, y besa mi nariz, acomodando mi cabello con la otra mano.
—Me gustas —dice acelerando más mi corazón— aunque sea una terrible idea.
—Entonces voy a ponerte una correa —respondo pasando mis dedos por su cuello.
—¿Con tu nombre, Nanon?
—Claro que sí.
—Bien —acepta sonriendo.
—¿En serio no te molestaría?
—¿Por qué? —pregunta besando de nuevo mis labios— si yo te pertenezco desde que te vi.

ESTÁS LEYENDO
Zona roja || Ohmnanon
FanfictionDespués de ser testigo de un asesinato, Ohm conoce un lado de la ciudad que no sabía que existía.