Zona roja || Ohmnanon

30

JIMMY

Bright está mostrándonos todo lo que tenemos atrasado, pero no puedo concentrarme, porque tengo la atención en Chimon.

Hemos peleado anoche, y nunca había pasado antes.

—Nanon y First van por este —dice mostrando la foto— le debe a gente que lo quiere muerto, y yo voy a encargarme de cerrar unos negocios fuera de la zona, Jimmy está a cargo de la casa hoy, y Chimon vas a patrullar en la noche, las 12 horas, así que vete a dormir.

—No soy tu puta seguridad —responde cruzando los brazos— hice esa mierda anoche, y la noche anterior, no entiendo que…

—Vete a dormir —digo interrumpiéndolo y él me mira— y cierra la boca.

Siento en su olor que está enojado conmigo, pero no me responde y sale tirando la puerta.

Probablemente nadie más acá podría hablarle así, pero sé que incluso si me está odiando ahora, él me respeta.

Bright palmea mi hombro antes de irse a su oficina, y eso significa que quiere hablar.

—¿Pueden explicarme qué demonios pasa con el esquizofrénico? —pregunta First y yo miro a Nanon.

—Yo le voy a contar —dice sonriéndome y asiento— gracias, Jimmy.

Apenas me dejan solo, camino a la puerta en el fondo, y al entrar veo a Bright acomodando la droga en la mesa.

—¿Quieres?

—Soy doctor, no seas idiota —respondo quitándole lo que tiene en la mano— ya te he dicho que vas a matarte si sigues así.

—Morir no suena mal —bromea riendo.

A veces me preocupa de verdad.

Nunca ha sido el tipo más centrado del mundo, pero desde que murió Win, algo cambió, y parece necesitar esa droga, para mantenerse vivo.

—No te mueras, sabes que nunca estaré listo para estar arriba y nos iremos al carajo sin ti.

—Eso creía cuando eran todos unos niños acá, pero ya han crecido, y no me necesitan, porque nunca he sido un buen líder, ya viste a Chimon, no hice un buen trabajo con él, no sé en qué momento se volvió tan…

—Chimon es un gran chico, Bright, si, quizás no es tan flexible como Non y First, pero hiciste un buen trabajo con los tres, yo hablaré con él, necesita reglas, y pensar en sus acciones, sigue dándole las guardias, ya te expliqué por qué no debe pasar tiempo con Nanon.

Él asiente.

—¿Alguna vez te ha dolido que esté enamorado de él? —pregunta más serio y yo lo miro confundido— te conozco desde que naciste, Jimmy, tú sabes de lo que hablo.

Bajo la mirada, porque lo sé.

—No puede dolerme algo que nunca he esperado tener, yo solo quiero que encuentre a un Omega que lo ame y que sea feliz con él.

—Si no estuviera enamorado de mi novio muerto, estaría enamorado de ti —dice riendo de nuevo— eres tan lindo por dentro y por fuera, que a mí me importaría un carajo que seas un Alfa, y si Chimon no puede darse cuenta de eso, es un idiota.

—No es un idiota por ser normal —respondo con un nudo en la garganta.

—Tú eres la mejor persona que he conocido, y yo, mejor que nadie, sé cuánto vales, la “naturaleza” puede irse a la mierda, y Chimon también.

—Sé que te molestas con él, pero no es su culpa que yo no le guste, y tú lo quieres.

—Claro que lo quiero, yo lo entrené, y siempre voy a estar orgulloso de él, aunque creo que él no está orgulloso de mí.

Me levanto, porque sé que se siente mal.

—Yo me encargo —digo sonriéndole antes de salir— Y aunque no te lo decimos seguido, todos acá estamos orgullosos de ti, incluso Chimon.

No me gusta dejarlo solo, desde esa noche.

Bright siempre ha estado dispuesto a dar su vida por cualquiera de nosotros, y lo hubiera hecho por Win, si hubiera llegado a tiempo.

Camino al piso de Chimon, y apenas me ve desde el sillón, porque abro la puerta con mi huella, se pone tenso.

—¿Qué haces aquí? —pregunta a la defensiva cuando me acerco— ¿No fue suficiente gritarme delante de todos?

—Pudiste responder.

—Tú sabes que no lo voy a hacer —dice levantándose— lo hiciste por eso, porque me conoces, y porque tú eres la única persona que... tú lo sabes, idiota.

Se queda en silencio, con la respiración agitada.

—Yo le pedí a Bright que te dé las guardias, porque es lo que necesitas ahora, así que contrólate cuando le hables.

Anoche ya he sido lo suficientemente cruel explicándole que Nanon no lo quiere cerca, y no quiero hacerlo de nuevo.

—Es muy fácil para ti, porque le gustas a todo el mundo, y no tienes idea de cómo se siente amar a alguien que solo te ve como a un amigo, es frustrante, y doloroso.

—Hablas de la sensación de querer morirte, porque sabes que no sucederá, y que no importa cuánto ames a esa persona, y no importa lo cerca que estén, nunca te va a corresponder, y a veces tienes esperanza, pero luego notas que no importa cuánto te conozca, no te quiere de la manera en que lo quieres tú.

—Sí —dice mirándome confundido.

—Y tú decidiste forzar algo que no va a pasar, porque no soportas la realidad, me ha pasado pero yo acepté que no siempre tendré lo que quiero tener, y decidí dejar que esa persona encuentre a alguien más, porque yo no soy lo que quiere, y es algo que debes aprender a aceptar también, no eres lo que Nanon quiere, y necesito que lo entiendas.

—Nunca has sido antes tan duro conmigo.

—¿Qué?

—Siempre estás de mi lado, es algo que me prometiste, pero estos días estuviste hablándome como si ya no fuera así.

—Intento corregirte, Chimon, porque no estás haciendo las cosas bien, Nanon tiene un Alfa ahora.

—Me pediste que no dañe a ese idiota, y no lo he dañado, ¿no es suficiente?

—Idiota —digo pasando las manos por mi rostro.

—¿Tú crees que él es mejor que yo?

—¿Ohm? —pregunto confundido.

—¿Él te agrada?

Desvío la mirada, porque no quiero contestar.

—Siempre he sido tu favorito, tú me quieres, y eres la única persona en este lugar que jamás me da la espalda, pero desde que llegó estuviste de su lado.

—Él hace feliz a Nanon, es un gran chico, me agrada, ¿de acuerdo?

—¿Y yo?

—No eres muy agradable cuando actúas así —digo sinceramente y me levanto para irme— piensa en lo que estás haciendo, porque no voy a apoyarte más con esto.

—¿Crees que tiene sentido que él si le guste a Nanon y no yo?

—¿Por qué estás tan obsesionado? —pregunto ya molesto— sí, tiene sentido, eso quieres escuchar así que voy a ser sincero, creo que es un tipo agradable, es listo, es guapo, y me gusta...

Me quedo en silencio, porque él se va, tirando la puerta.

Ni siquiera me dejó terminar.

—Me gusta para Nanon —completo caminando al congelador, para agarrar una cerveza.