Bousni💋

Capítulo 61💋

Jimin fue el primero en despertar por una necesidad muy básica e importante que necesitaba su cuerpo en ese momento, comida.

Abriendo sus ojos lentamente, parpadeó un par de veces antes de que pudiera adaptarse a la luz que se colaba desde la ventana y entonces observó a su pareja recostado sobre su abdomen con un brazo rodeando su cintura, apegándolo a su cuerpo mientras que una de sus piernas estaba enredada entre la suya.

Como su cabeza estaba girada en su dirección, Jimin aprovechó unos buenos minutos para observar el rostro de su esposo con sus varoniles facciones completamente relajadas, mostrando solamente paz.

Cuando su vejiga comenzó a protestar llamando su atención, luchó un poco con el agarre de su pareja, obteniendo un suave gruñido antes de que finalmente Yoongi le soltara y pudiera deslizarse por la cama rápidamente, ya que, conociendo a su esposo, sabía que este inmediatamente le buscaría entre sus brazos nuevamente.

Una pequeña mueca adornó sus labios cuando se sentó en la orilla y luego se levantó, sus músculos protestando inmediatamente por el abuso de su cuerpo, uno muy bueno por supuesto, y del cual no se quejaba para nada.

¿Cómo hacerlo cuando había disfrutado cada maldito segundo de ello? Aun cuando Yoongi lo había atormentado y molestado más de una vez a lo largo de la noche, no podía quejarse diciendo que no le había gustado.

Trasladándose al baño, alivió su vejiga y tiró de la cadena. Observando con anhelo la ducha, no pudo resistirse a entrar y tomar un baño refrescante que se llevó de su cuerpo todo el sudor y rastros de semen que pudieron haber permanecido.

Saliendo, tomó una gran toalla suave y secó su cuerpo y cabello, cuando observó su reflejo en el espejo, sus ojos se volvieron grandes tras contemplar las marcas de amor en cada maldito lugar.

Tenía marcas de besos y mordeduras a lo largo de su cuello, hombro, costillas, cadera, pelvis y...

Retrocediendo un paso, Jimin contempló las mismas marcas en sus muslos, desde el interior al exterior.

—Joder... —murmuró tocando suavemente algunas de ellas, estremeciéndose ligeramente con ello.

Considerando como había sido su pareja durante la noche, en realidad no debería de estar tan sorprendido del estado de su cuerpo, o lo sensible que estaba su trasero.

Yoongi realmente había amado jugar con sus nalgas vestidas con la ropa interior.

Mordiendo su labio inferior para ocultar su gran sonrisa satisfecha, Jimin volvió a la habitación para encontrar a su pareja en la misma posición, recostado sobre su abdomen con las sábanas cubriendo la parte inferior de su muy desnudo cuerpo y sus brazos ocultos bajo la almohada en la cual un costado de su rostro estaba apoyado.

Acercándose, Jimin se subió a horcajadas sobre su trasero y se inclinó en su espalda colocando sus manos unidas bajo su barbilla.

Un suave suspiro escapó de los labios de Yoongi al sentir su piel ligeramente más fresca contra la suya.

—Hora de despertar, cariño —murmuró y sopló suavemente sobre su nuca.

Yoongi se quejó, más no dio cualquier otra señal de reaccionar.

—Vamos, tengo hambre, tienes que alimentarme —ordenó besando su cuello.

—No, no lo tengo que hacer —pronunció en voz baja y ronca.

—Si tienes —sonrió contra su piel—. ¿Quién fue la bestia insaciable que gastó toda mi energía durante toda la noche? —canturreó.

—¿Y quién era el otro insaciable que no hacía más que pedir más y más? —preguntó alzando una ceja, manteniendo sus ojos cerrados.