Capítulo 3💋

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Compartiendo una superficial conversación con el senador Park, Yoongi sonrió y asintió sin escuchar realmente lo que el hombre le hablaba.

En sus ojos y mente, estaba cierto rubio que se mantenía alejado de su familia, más de lo usual, lo cual por supuesto que llamaba su atención.

Como siempre, Park Jimin vestía un aburrido traje color gris con unas tallas más grandes que no hacia gloria del cuerpazo que poseía, y si no fuera porque había visto aquellos marcados músculos y delgada cintura, Min habría creído que utilizaba ese tipo de ropa para esconder su gordura o algo así.

Pero no, por lo que se preguntaba si Jimin tenía realmente algún gusto de moda o era tímido para mostrar su cuerpo.

Distanciado de todos los demás, incluso de aquel amigo que lo acompañaba a cada una de las fiestas, Jimin parecía estar algo... Irritado, a punto de explotar si lo observaba bien y eso...

Eso no anunciaba nada bueno.

El chico probablemente podría arruinar su noche si hablaba de lo sucedido en las Vegas, aunque estaba la posibilidad también de que hubiera soltado todo el cuento antes de que llegara y por ello parecía que la familia lo había distanciado.

Y sí, no había forma de que lo negaran cuando antes por lo menos disimulaban un poco, aunque fuera con uno de los miembros turnándose para pasar, por lo menos unos minutos con el aburrido chico.

Pero si fuera así, más de alguno ya le habría mencionado algo al respecto y no estaría la supuesta "paz" Que los rodeaba luego de una gran cena lujosa e incómoda, tensa.

Tenía que buscar el momento oportuno para hablar con Jimin y así pedirle que firmara ese papel de divorcio o Jungkook y Namjoon estarían jodiéndole al respecto, sin contar que su boda tendría que verse retrasada y aunque no le importaría decir la verdadera razón de ello, no quería crear problemas si podía evitar el drama.

Pero buscar el momento oportuno estaba siendo algo difícil cuando tenía a Su-ji apegada a su lado y con cada familiar abordándolo por separado cada vez que eran liberados.

—¿Cierto, cariño? —preguntó su prometida.

Yoongi parpadeó y la observó.

—Perdón, ¿de qué hablábamos? —preguntó sonriendo para que no se percataran de su desinterés.

—¿Muchas cosas en la mente? —preguntó el senador Pak con una suave sonrisa comprensiva—. ¿Trabajo? ¿O la boda?

—Por supuesto que es por ambos, tío —sonrió la hermosa castaña de ojos azules—. Y lamento haberte molestado cuando tenías tanto trabajo —expresó con un puchero, apoyando un costado de su cabeza en su hombro.

—No, está bien —respondió con su mirada siguiendo el camino por el cual se retiraba Jimin y su amigo—. Un hombre inteligente siempre puede dividir bien su tiempo.

—Eso es cierto —apoyó el señor Park alzando su copa—. Ojalá pudiera decir lo mismo de mi hijo —negó.

—No hables mal de Jimin oppa, tío —regañó Su-ji—. Él siempre se esfuerza para estar a la altura de tus expectativas —indicó.

—Lamentablemente, nunca parece lograrlo —comentó despectivamente.

—Si vas a comenzar a hablar mal de Oppa, mejor me retiro un momento —anuncio observando no muy feliz al senador Park antes de observar a su prometido—. Vuelvo enseguida.

Asintiendo y recibiendo un beso en su mejilla, Yoongi contempló como su prometida se retiraba.

—Siempre se coloca así cuando hablamos de Jimin —negó el señor Park volviendo a llamar su atención.

Bousni💋Donde viven las historias. Descúbrelo ahora