Ayúdame park sunghoon. ‹𝟹 Sungsun

extra 2

—Ya basta pequeño cachorro. —suplicó un dormido alfa a las 3:00 am de la madrugada. Tan solo sabía que será una mala noche de llantos incontrolados.— Ya no llores por favor Soobin.

El trabajo acumulado y el cuidado del bebé no eran una de las mejores combinaciones de la vida, había llegado tan cansado que solo quería dormir y dormir en la cómoda cama de su habitación. Pero el pequeño Soobin no tenía esos planes para su padre, ya con su pancita llena, un baño relajador para el bebé y un pañal totalmente limpio junto al pijama de ositos que Sunoo había comprado tiempo atrás de manera sorpresa para el alfa que lo hacía ver adorable al bebé, y este, Soobin quería llorar toda la noche.

—Tal vez tenga hambre. —tomó al cachorro de la cuna que Jungwon había comprado, ya que si fuera por el alfa padre todo el cuarto sería de Kumamon, un oso animado del cual siempre fue fanático. Colocó su dedo meñique cerca de la boca del cachorro, quien mismo lo babeo y trataba de obtener alimento. Si tenía hambre. Con el niño en brazos caminó hacia la parte baja de su departamento y ni que decir de cómo se veía el lugar, la sala estaba llena de papeles importantes sobre su trabajo, en la mesa aún estaban sus platos de la merienda y en la cocina hay más platos que lavar, los demás platos eran del desayuno y almuerzo de dos días atrás. Suspiró cansado dejando a su hijo en la cuneta de mano que estaba botada en algún lugar dejándolo allí, donde lo pueda cuidar y supervisar.

Primero tuvo que lavar los platos, dejando espacio para poder acomodar todo allí, no le llevo más de media hora por lo que dejo los biberones en agua caliente para desinfectar también cuidando para que no se dañen como hace días atrás donde olvidó que había puesto los biberones en la cocina y al acordarse aquellos estaban fundidos.

Cuando terminó de limpiar por completo apagó la cocina y realizó todo el proceso de la preparación, colocando las dos cucharaditas de la formula y batiendo para que el líquido y el polvo se mezclen; miro al bebé que ahora observaba atento a las figuritas de sonidos que tenía la cuneta. Suspirando al ver la hora, 4:00 am. Soobin parecía no tener mucha hambre sino el mismo no pararía de llorar hasta que su padre lo alimente.

—Es momento de que comas y a dormir. —habló como si el bebé pudiera entenderle.

Estaba dándole de comer bien, y no sabe en qué momento pasó junto a la desesperación del padre alfa por calmar al cachorro. Él bebe se ahogaba, la leche tenía un agujero demasiado grande por lo que terminó desparramándose en la boca del cachorro y llegando a la nariz provocando aquello.

Soobin en busca de aire, por instinto vómito cuando su padre le dio la vuelta para palmear su espalda, expulsó todo provocando que su ropa quede empapada y el piso sucio. Eso no era importante ahora, Sunghoon sabía que su hijo estaba bien cuando el llanto del niño inundó la sala después de semejante susto.

El alfa después de aquello ya se encontraba en el cuarto del cachorro cambiándole la ropa por una nueva y en ello pensó que no podía ser tan eficiente como su madre, que tal vez eso jamás hubiera pasado y ahora todos estuvieran felices.

Siempre con culpa en su pecho.

—L-Lo siento...

Derramó un par de lágrimas cuando la culpa aún más fuerte llegó a él, dejando sus manos alado cuando las lágrimas que se avecinaban fueron enormes junto a las ganas de llorar aquella hora. El cachorro paró de llorar al sentir las feromonas tristes que expulsaba su padre sin saber el porqué de aquello; se quedó allí mirándo como la culpa comenzaba a carcomerle a Sunghoon.

Respiró profundo y habló:— Dormirás conmigo hoy, tal vez hay algo con lo que te puedas sentir a gusto pequeño Soobin.

Tomó al cachorro y se dirigió a su cuarto, dejando al niño en la cama rodeado de almohadas para evitar algún accidente, llegó hacia el armario y tomó una de las fundas plásticas que contenía prendas de Sunoo, donde contenía el olor característico de su omega.

Rodeó con eso al cachorro, para que después él se acueste y disfrutar de algunas horas de sueño que le quedaban aún; dando palmaditas a Soobin este cayó dormido al rato disfrutando de la calidad del silencio apago la lamparita de mesa y el cuarto se sumió en un oscuro lugar y con su brazo rodeó al niño y lo atrajo a su pecho degustando el olor dulce de Sunoo y el olor a leche materna de su hijo.

La alarma sonó tiempo después dando aviso a un nuevo día, y no me refiero al sonido del reloj sino al llanto de Soobin que exigía atención por su padre.

꒰ ･ ･ ･ ꒱

—Muy buenos días.

—Muy buenas vengo de visita a un paciente.

—¿Nombre?

—Kim Sunoo.

—Oh lo siento, pero este paciente esta con restricción. Solo las personas autorizadas pueden pasar. ¿Usted es un familiar del paciente?

—Era un amigo que hace tiempo no ve, y cuando me enteré de lo sucedido quería verlo. ¿Seguro que no puedo pasar?

—Lo lamento, pero es una orden de su alfa debido a temas personales.

—Gracias de todos modos.

—No quiere dejar su nombre para así averiguar si puede pasar, el señor Park no debe tardar en llegar a su vista diaria.

—¿Park? Ahh no gracias prefiero contactarme con el mismo.