𝑨𝒏𝒅 𝑰 𝒘𝒂𝒏𝒏𝒂 𝒌𝒊𝒔𝒔 𝒚𝒐𝒖, 𝒎𝒂𝒌𝒆 𝒚𝒐𝒖 𝒇𝒆𝒆𝒍 𝒂𝒍𝒓𝒊𝒈𝒉𝒕
𝑰'𝒎 𝒋𝒖𝒔𝒕 𝒔𝒐 𝒕𝒊𝒓𝒆𝒅 𝒕𝒐 𝒔𝒉𝒂𝒓𝒆 𝒎𝒚 𝒏𝒊𝒈𝒉𝒕𝒔
Los lobos en Seabrook viven bajo el lema "Lobos unidos", pero ¿Seguirá en pie cuando una extraña loba apa...
Antes de empezar, como me encanta la canción de este cap, me tomaré el tiempo de poner en los comentarios la traducción. Espero que disfruten el capítulo💖💖
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"Butterfly Fly Away"
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20. I promise
Luego de caminar por horas, hablando de un sinfín de cosas menos de la que realmente querían, llegaron a un gran edificio negro, muy bello y horrorosamente gigante. Resultaba que el padrino de Jessica vivía hasta el último piso, entonces, el tiempo que pasaron en el ascensor era horrorosamente largo.
—Creo que debí preguntar esto antes, pero recién encuentro la oportunidad de hacerlo —empezó a decir Wyatt—. Si aún tenías a tu padrino aquí, un lugar aparentemente seguro ¿Por qué arriesgarte para llegar a una manada que no sabías si te aceptaría?
—Soy una mujer lobo, estoy destinada a estar con la manada —explicó—. Podía vivir con él, lo tenía todo, pero dentro mío había un asqueroso e insoportable vacío.
—Entiendo —dijo él, sin saber que más decir—. Lo bueno es que ahora ni aunque quieras estarás sola... la pequeña Ween no se atreverá a dejarte ir.
Ella sonrió, negando con la cabeza... sin embargo, se dio cuenta que no le había dicho un dato importante.
—¿Te dije lo que es mi padrino?
—Un humano ¿No es así?
—Nop, es un brujo —dijo, justo antes de salir del elevador—. Y un consejo, no te quites el collar y maten la calma... suele ser un poco muy intenso y controlador.
Por alguna razón, Wyatt sintió miedo y trató de volver al elevador, pero este se cerró en su cara. Supo que no fue casualidad, porque pequeñas chispas lo golpearon.
—Eso no se vale —se quejó, llegando junto a ella—. No vale usar tus poderes en mi contra.
—¿Acaso tu no usas tus habilidades de alfa en mi contra? —replicó, apoyándose en la pared junto a la última puerta del pasillo—. Es aquí, toca.
—¿Por qué yo? Es tu padrino.
—Eres mi alfa, debes proteger a los lobos de posibles riesgos —se encogió de hombros con una sonrisa—. Tranquilo, no muerde... creo.
El Lykensen tocó la puerta y, al instante, trago saliva con temor, pues desde el interior se escuchó como alguien se quejaba con enojo. Se aguantó las ganas de salir corriendo cuando un hombre vestido completamente de negro y con el ceño extremadamente fruncido.
—Tuviste toda la semana para llegar, pero decides llegar justo hoy ¡¡¡Estaba en el final de mi libro!!! —dijo el brujo, sacudiendo un libro muy cerca del rostro de Wyatt.
