Capítulo 56 Parte 1

863 65 35
                                    

*Antes de empezar, me gustaría aclarar que cada vez que aparezcan "***" significa un cambio de escenario. Ya lo entenderán mientras vayan avanzando*

***

I don't wanna let go. I know i'm not that strong 

I just wanna hear you saying "Baby, let's go home"

Come back, I still need you

 

56

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

56.1. I am breathing 

*Primer día*

Pelea por ti...

Pelea por ti...

Pelea por ti...

Sus ojos se abrieron con sorpresa, fue tan rápido que su cabeza ardió por unos segundos. Le costó entrar en sus cinco sentidos y procesar la información que estaba frente a sus ojos. Se miró las manos y, para su gran sorpresa y aunque sentía algo de dolor, sus heridas parecían estar sanas. Apretó su puño, esa mano que tan herida estaba, pero no le dolió como lo había hecho antes ¿Qué estaba pasando?

No entendía nada. Despegó la cabeza del duro suelo de tierra y levantó la mirada, terminó soltando un resoplido al ver lo que la rodeaba. Era un bosque conocido, pero a la vez tan extraño y peculiar. La luna estaba en su máximo esplendor, pero aquel ambiente era más brillante y claro de lo normal, casi parecía de día.

A unos pocos metros de ella había un lobo que parecía estar muy herido y cansado. El animal luchaba por ponerse de pie. Ella no podía verlo, así tan indefenso, y no ayudarlo. Por lo que, a paso torpe, hizo fuerza para ponerse de píe e intentar ayudarlo e intentar saber qué era lo que estaba ocurriendo. Sin embargo, el lobo caminó sin prestarle mucha atención.

—Déjame ayudarte —le dijo, pero el animal no frenó su paso—. Estás exhausto y herido, no debería seguir así.

Se resignó a aceptar que no sería escuchada y observo todo eso que le rodeaba. No entendía por qué, pero fuera de las emociones que tenía acumulada, aquel ambiente extraño guardaba una rara sensación de paz y tranquilidad.

Probó dar unos pasos, haciendo fuerza sobre su pie lastimado. Dolió, pero no tanto como lo hacía antes de...de ayudarlos.

Fue como si de repente se acordara de lo que había pasado y no le sentó nada bien ¿Había muerto por ellos? ¿Por eso estaba en ese extraño lugar? ¿Ser una loba solitaria en un bosque raro era un castigo?

—Esto no es un castigo.

Una voz.

Esa voz.

En el fondo sabía de quien era, claro que lo sabía, pero sus memorias no le dieron el nombre del dueño de aquella voz.

𝓜𝓲𝓮𝓷𝓽𝓻𝓪𝓼 𝓛𝓪 𝓟𝓲𝓮𝓭𝓻𝓪 𝓢𝓲𝓰𝓪 𝓑𝓻𝓲𝓵𝓵𝓪𝓷𝓭𝓸 -Wyatt LykensenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora