L O B I T O ||TAEGI

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Las palabras del omega hacían eco en su mente una y otra vez, en consecuencia de ello solo podía beber aún más de las pequeñas copas que se encontraban en la fina barra situada frente a él. Sabía que no era la solución de enfrentar los problemas, él más que nadie lo sabía, pero sus impulsos y frustración no lo dejaban pensar con claridad, ganandose el mismo sentimiento con mayor intensidad.

Se encontraba en el bar el cual solía ir sus primeros días visitando aquella zona. Para nadie era un secreto que no le gustaba frecuentar con mucha gente, antes mucho menos, entonces prefería ir al sitio anteriormente no frecuentado.
A pesar de estar un poco sorprendido por la cantidad de gente que se encontraba allí actualmente, no fue impedimiento para tomar.

La noche era tan oscura como sus ojos, salvo que esta estaba iluminada por diversas estrellas las cuales le daban un toque especial y mágico, a diferencia de sus ojos, que solo eran de un oscuro apagado, su ser estaba apagado.

A pesar de esto TaeHyung siempre admiró la noche y salir a caminar cuando esta se hacía presente, la única diferencia fue que esta vez se encontraba en la ciudad. Desde pequeño siempre odió los lugares llenos de personas, pero hoy era la ecepción.

Las calles se encontraban vacías y oscuras, siendo iluminadas por los focos y luces que rondaban por estas.

La aparente oscuridad que observaba siempre era iluminada con algo, eso lo hizo preguntarse algo.

¿Algún día alguien lo iluminará de esa manera?

Como los focos a las calles.

Como las estrellas a la noche.

¿Alguien lo haría con él?

Sus sentimientos mezclados seguían allí, aquellos que eran conformados por ira, confusión, tristeza, enojo, y soledad.
Suspiró mientras volvía a colocar sus manos, ahora frías también, en ambos bolsillos de su gran camperón.

Pronto, en su recorrido sin rumbo alguno por las frías calles, mientras caminaba por uno de los miles de callejones, se enfocó con un reluciente cartel neón, no pudo evitar levantar su mirada para visualizar un pequeño bar, y como si fuese algo del destino, sintió algunos pares de billetes allí. No dudó en entrar.

El lugar era perfecto, la estética de este mas la melodía de fondo era lo que buscaba, quizá lo ayudaría a despejar sus pensamientos atormentantes.

El primer trago fue totalmente ingerido y no sintió efecto ninguno.

Con el segundo y tercero tampoco.

Con los siguientes el efecto de alcohol comenzaba a notarse, está bien, ya había tomado alcohol antes y no había sido nada del otro mundo. Sonrió satisfecho al saber que su cometido poco a poco se lograba...quizá, y solo quizá, podría volverlo a repetir más tarde.

Kim no se consideraba una persona borracha, era una muy resistente al alcohol.
Las personas dicen que otras cuando toman se vuelven bastante agresivas, usandolo muchas veces como justificación para hacer actos indebidos, ¿entonces por qué TaeHyung sentía lo contrario?

Quizá servía como un modo de olvidarse de las cosas por un momento, tenía más que en claro que a pesar de la razón por la que lo consumas, este llegaría a ser peligroso para tu salud, pero sentirse relajado y despejado por algún tiempo era como un peso quitado de encima, aunque claro, volver a la realidad no es nada bonito.

Sin duda no sería la última vez que visitraía aquel lugar.

Tomar de golpe quizá si le había afectado más de lo pensado, su cabeza ya no se encontraba despejada conforme los tragos aumentaban, si no que esta se encontraba dando vueltas, quizá no había vuelto a sentir lo mismo que años atrás y eso le frustraba.

"Yoongi, mocoso, nadie te dio permiso para meterte en mi cabeza a todas horas".

El miedo de que este se vaya inició desde el primer día en que lo vió, la simple imagen mental de Min Yoongi estando con alguien, Min Yoongi sonriendole a alguien, Min Yoongi besando a alguien, Min Yoongi riendose y sonrojandose de las cosas más mínimas dichas y hechas por alguien que no sea él. Eso sería mucho, demasiado, para Kim.

- Hola, hermoso- Insistió aquella muchacha, Taehyung salió de su ensoñación y la observó.

- ¿Qué necesitas?- Su voz nuevamente sonaba amarga, tal y como su mente y sobre todo su garganta. Aquella chica no se rendiría, y antes de comenzar a hablar acarició un poco las piernas del alfa, este ignoró completamente el acto y tomó un trago de su bebida.

- Quiero ver que tomas, alfa- Con cautela se acercó a la botella que se encontraba a un costado del alfa, haciendo que sus pechos tocasen "accidentalmente" con el cuerpo de aquel hombre, revelando así un poco más de su cuerpo.

El alfa gruñó levemente, aunque aquella femina hizo caso omiso y bebió.

- Delicioso, alfa- Guiñó el ojo mientras sutilmente se colocaba entre las piernas de este- Pero me gustaría probarte a tí, ya sabes.

Por un lado, la imagen de Min Yoongi nuevamente se hizo presente en la cabeza del alfa...

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☁️ Descubrí que en algunas ocasiones tengo buena técnica para rimar a la hora de describir, les juro que no es impovisado.

☁️ No se si les había comentado, no estaré muy activo hasta el viernes, los quiero mucho, gracias por todo el apoyo.