Intención. (Parte 1)

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Entró con ella en el lugar a toda prisa, manteniéndola sujeta por un brazo y cerca suyo, intentando que nadie más la viera.

Se apresuró hacia una puerta a un costado de la que aparentemente era la cocina, la abrió de golpe y entraron pues a una pequeña bodega que estaba un tanto oscura; Sesshomaru encendió la luz de una pequeña lámpara y cerró la puerta tras de sí antes de prácticamente arrojar a la castaña sobre un montón de cajas aplastadas en el suelo...

------Aah! ---- se quejó ella por el trato tan brusco por parte del peliblanco.

-------- Más te vale quedarte aquí! ------ la reprendía él. ------- No hagas que te maten.

------- Qué??! Pero... ----- se levantaba ella del lugar en donde había caído... ------- A dónde mierda vas??! Tenemos que irnos!!

------- Ssshhhtt!!! Ya basta!! Cierra la boca!! ---- le ordenó. ----- Has lo que te digo!! Quédate aquí y no salgas hasta que vuelva, oíste??! No durarías ni cinco minutos en éste lugar, así que, si quieres que te regrese viva a tu Olimpo, quédate aquí y cállate!!

Dicho aquello, el peliblanco salió de la pequeña habitación, cerrando la puerta nuevamente por su espalda con un portazo, dejando a la joven Tenno sola con su momentáneo aturdimiento y es que no supo qué más decir o qué más hacer... O si debía realmente hacer algo.

Miró a su alrededor, percatándose de dónde estaba parada realmente...
No sabía que era aquella habitación. Incluso para ser una bodega era demasiado pequeña...
Le sorprendió que pese al montón de cajas aplastadas en el suelo y otras cajas más que estaban cerradas y apiladas en un rincón y sobre las cuales estaba la lámpara, estaba bastante limpio, aún así estaba gélido y olía tremendamente a humedad.

Sacó rápidamente de los bolsillos del abrigo que llevaba, su teléfono celular, dispuesta a llamar a su amigo médico, quién seguramente seguiría dando vueltas por toda la ciudad buscándola y le sorprendía que no la hubiese llamado todavía.
Cuando encendió la pantalla lo entendió todo...
No tenía ni una sola barra de señal.
No sabía si era por la habitación, por el club o si realmente había descendido hasta el mismo infierno, pero jamás se había quedado sin señal... No tenía ni idea de la mierda que eso era.

Guardó de nuevo el aparato en su bolsillo y suspiró pesadamente; miró entonces hacia la puerta frente a ella...

Quiso tomar el picaporte para disponerse a salir deliberadamente, pero se detuvo... no supo por qué. Tal vez su instinto de preservación había salido a flote.

Resignada a tener que esperar al Taisho, aún sin la mera certeza de que volvería por ella, se dejó caer sentada sobre el pequeño montón de cajas desechas y justo cuando comenzaba a contar los pequeños segundos que transcurrían, la puerta se abrió de repente, sin embargo, quién la abrió no era ni de lejos a quien esperaba ver...

------Aah! ------ Se exaltó ligeramente la joven que habia abierto la puerta, aparentemente no esperando ver a alguien ahí adentro. ------ Di... disculpe... ----- reverenciaba con la cabeza baja, evidentemente avergonzada por algún motivo. ----- D..de.. debí haber tocado.

La chica se disponía a irse, pero Rin la detuvo entonces:

------ No, no, no!! Está, bien, aguarda!! ----- La desconocida detuvo su salida pero mantuvo la cabeza agachada.
Fué ahí que la joven Tenno pudo notar que tenía el rostro herido, golpeado... 
Vestía una falda tableada color rojo que era diminuta,un top blanco que a duras penas le cubrían los evidentemente inmaduros senos y usaba unos zapatos de plataforma que, aún alguien tan experimentada con los tacones altos como lo era Rin, le parecieron ridículamente inmensos...

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