Tomadas de la mano, las chicas entraron al Galery café en Lower East Side, donde habían quedado con Ralph, para desayunar.
_Pensé que íbamos a tardar más en el tráfico. -Dijo Camila, mirando su reloj de pulsera.
_Llegamos puntuales. -Asintió con la cabeza Lauren. _Y Ralph no ha llegado.
_Qué bueno, me habría avergonzado llegar tarde el día que lo voy a conocer.
_Con Ralph hay que ser puntual siempre. -Respondió Lauren a la vez que buscaba con la mirada el mejor lugar disponible para sentarse. Cuando lo decidió, empujó con delicadeza a su chica, con una mano en la espalda, hacia la mesa.
Se estaban despojando de sus respectivos abrigos cuando Ralph llegó, agitado y al verlas, caminó apurado a su encuentro, pero contrario a lo esperado, ignoró a Lauren y abrazó a Camila, quien sorprendida y riendo, le devolvió el abrazo.
_Mírate nada más lo guapa que eres. -Le dijo sin soltarla.
_Tu eres un verdadero Kent. -Le devolvió el halago, que no era mera cortesía, era real que el hombre era guapísimo con su 1,82 de estatura, cuerpo trabajado, ojos azules enormes y una barba cuidadosamente perfilada.
_Hola Lauren. -Le dijo indiferente y se centró nuevamente en Camila. _Siéntate junto a mí, preciosa. -Le pidió a Camila y le guiñó el ojo, antes de correrle la silla para que se sentara.
_Si sabes que ella es mi novia, ¿no? -Le dijo Lauren y él finalmente la miró con burla y le soltó:
_Por ahora.
Camila no pudo evitar reírse y Ralph la miró haciéndose el ofendido.
_¿Acaso no crees que pueda hacer que te enamores de mí?
_Se vale soñar, querido. -Le dijo Lauren burlona y prosiguió. _¿Para mí no hay abrazo?
El de inmediato la envolvió con sus brazos y le dio un beso en la cabeza.
_Estoy feliz de verte nuevamente. -Le dijo con cariño.
_Y yo a ti, Ralphy.
Se acomodaron en sus respectivos lugares y recibieron la carta de manos del mesero.
_Sé que eres una chef por lo que me preocupaba no atinar en la elección del lugar. -Le dijo Ralph a Camila, con su sonrisa perfecta. _Hasta que recordé este café, puedo jurar que no hay platillo malo en la carta.
Camila agradecida, le devolvió la sonrisa.
_Entonces me voy por los rothko, con queso, jamón y buscuit.
-¿Y a ti qué se te antoja, Lolo?
_Gofres con sirope de arce y arándanos. _Y al poner la carta sobre la mesa, remató: _Y todo el café que quieran traerme.
Ralph levantó la mano y le pidió al mesero lo que las chicas querían, además de unos huevos benedictinos para él.
_Está muy lindo el lugar, antes de irme tengo que echarles un ojo a las fotografías. - Lauren se refería a las que estaban exhibidas en las paredes del café galería en el que se encontraban.
_Recién montamos esta exhibición. -Les contó. _El dueño es mi amigo y es un apasionado de las artes visuales y plásticas y abrió este lugar para darle un espacio a los artistas emergentes.
_Voy anotando ideas, mi amor. -Le dijo Camila a Lauren y le sonrió de oreja a oreja, pensando en su propio emprendimiento.
_¿De qué hablas, preciosa? -Curioso le preguntó Ralph.
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RENACER
FanfictionCuando se pierde todo, incluso las ganas de vivir, solo es cuestión de seguir respirando porque la vida da revancha.