En la casa Desmond, un bullicio se oía y Damián se sentía demasiado aturdido ya que acababa de encontrar su certificado de Edén con muchos dibujos, sus dos pequeños hijos Lizzie y Dimitri habían intentado replicar el arte de Picasso, pero termino en un montón de garabatos y líneas deformes que manchaban su nombre en ese documento oficial.
¿Damián? —la voz cantarina de su esposa se acerco
¿Qué? —estaba harto del ruido que sus hijos tenían y hoy no tenía ganas de ser amable con nadie
¿Me estas contestando feo? —se enojó y frunció el ceño
Anya es que ¿ya viste? —le mostro el documento—tiene muchas líneas
Ya los regañe—lo observo—mañana podemos ir a Edén para que puedan darte otro certificado
Eso no es lo que me molesta—cerro los ojos y su voz sonaba demasiado furiosa—estoy molesto de que tu no los detuviste, ¿Dónde estabas?
Damián tuve que atender un negocio—lo miro—amor, la tía Sylvia me necesitaba
Los dejaste sin supervisión Anya—se levantó—esto está mal
Papi no regañes a mami—la pequeña Lizzie de 5, era una niña de cabello negro y ojos verdes se acercó a su progenitor—mami no es culpable, ella solo estuvo 4 minutos en el teléfono y fue cuando encontramos esa hoja, pensamos que te iba a hacer feliz
Si—el pequeño de 3 años, pelirosa de ojos amarillos miro a su padre con mucho miedo—mami no fue la culpable
Damián observo los ojos de sus hijos y sintió como un recuerdo de él cuando era pequeño afloraba en su mente, en donde Donovan lo regañaba por haber roto un jarrón valioso por error.
Vayan a la sala—les ordeno
Papi, por favor lo sentimos—empezaron a llorar
Damián ya fue suficiente—Anya abrazo a sus dos hijos—maldición solo fue un estúpido certificado, si fuiste el mejor estudiante y creo que has madurado demasiado como para ponerte así por un documento que se puede recuperar
Anya—lo observo—déjenme solo
Eres un idiota—tomo la mano de sus hijos y se fueron a la sala de su casa para ver Bondman—eres un idiota
//A veces me pregunto ¿Qué hubiera pasado si no nos casábamos? \\
Anya leyó el pensamiento y giro a verlo, eso le había dolido demasiado y sus ojos con lágrimas lo hacían notar, cosa que Damián observo y se sintió más culpable, si, él no era el mismo chico de cuando joven pero aún conservaba algunas cosas negativas, se sentía culpable de lastimarla y lastimar a sus hijos, por eso de vez en cuando se preguntaba ¿y si no se hubiera casado con Anya?
Que idiota—suspiro y camino hacia la terraza sentía sus ojos pesados, entonces poco a poco perdió el conocimiento.
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Un hombre de 30 años se levantó de su cama intentando buscar a su esposa quien le costaba levantarse, pero al girar vio que no estaba a su lado.
¿Anya? —la busco—maldición, seguramente me dormí enojado con ella y ella se fue a casa de sus padres—suspiro frustrado—que idiota soy
El hombre empezó a buscar su ropa y abrió su gran ropero notando que no estaba la ropa de su esposa que ocupaba la mitad de este, entonces su corazón empezó a latir con mucha fuerza pensando que la chica se enojó tanto que se iba a divorciar de él.
Entonces aun con su pijama busco por toda su casa a la dueña de sus suspiros y sus sueños observando que no había fotos de su familia, su corazón no aguanto tanta presión entonces empezó a buscar por todos lados la casa y no encontró a nadie.
