El amor era una cosa difícil de entender cuando tienes 6 años sobre todo cuando lo único que conoces es la indiferencia de tus padres, pero al ver a esa fastidiosa pelirosa su corazón latía demasiado, era una sensación rara y tan cálida que lo hacía querer comportarse como el niño que era.
Aunque a veces su forma de actuar con ella era fastidiosa ya que por tener más privilegios no tenía tapujos en su vocabulario, pero después del evento del autobús, él la reconoció como una amiga y eso estaba bien ya que aún eran pequeños para entender ese sentimiento complejo que Becky veía como algo maduro.
Poco a poco ambos niños empezaban a intentar comportarse como amigos, pero la forma de ser de Anya aún le sacaba de quicio cuando era demasiado imaginativa, pero muy en el fondo esa cosa era muy entretenida en su cabeza.
Vi un episodio de Berlint Love—comento la pequeña pelirosa mientras caminaba con su amiga—mi mami se emocionó mucho, pero yo me aburrí demasiado
Es que aun eres pequeña Anya—la castaña acaricio su cabello rosa que ahora ya estaba un poco más largo—creo que cuando seas más madura entenderás lo que es el amor
Hmp—sonrió alzando los hombros y siguió caminando con su mejor amiga por los pasillos
Esas torpes no hacen más que hablar de cosas sin sentido—un rubio susurro a su grupo de amigos—son tan infantiles y feas
Hmp—un peliverde solo bufo ante ese comentario
¿Sucede algo alteza? —Emile miro como su amigo seguía con la mirada a la peli rosada
Si—asintió con vergüenza
Ha estado mirando a Forger últimamente—Ewen observo a su mejor amigo—dígame acaso usted
¿Qué? —se puso nervioso al ver que su mejor amigo estaba a punto de descubrir su secreto
¿La va a retar a un duelo? —comento sin pensar
No—suspiro feliz—solo me pregunto si en serio su madre es un gorila
Mi mami no es un gorila—una pequeña voz se hizo presente
¿En qué momento llegaste acosadora? —el rubio se sorprendió
No le digas así a Anya—Becky los miro de mala manera—mocosos
¿Por qué el segundo cree que mi mami es un gorila? —se acercó al rostro del chico
Ah—se puso sonrojado
Respeta su espacio personal—Emile la empujo
Oye—el peliverde miro de mala manera a su amigo robusto y le dio la mano a Anya para que se levantara—dime ¿estás bien?
Si—tomo su mano—gracias
Ah—se puso más nervioso al sentir la suavidad de su mano
Becky solo observo la escena y sonrió divertida, estaba siendo testigo de un momento de una pareja que nadie más conocía, era entretenido ver como el pequeño hijo de los Desmond tenía un crush con su mejor amiga.
¿De qué te ríes? —Anya miro a Becky con duda
De nada—tapo su boca con sus manos—estaba pensando en la leyenda de los dientes de león
¿La leyenda de niños? —se burló el ojo ámbar
Dicen que si encuentras un diente de león en el atardecer y lo soplas se te concederá un deseo—hablo sin importarle lo que dijo Damián
¿Puedo pedir convertirme en imperial escolar? —Anya se emocionó //la misión de papi se cumplirá\\
Si—sonrió con ternura—bueno vámonos Anya, ya fue demasiado convivir con estos nefastos