Damián estaba molesto, el plan de sus amigos solo hizo que la chica rubia hija del vicepresidente Garnet ganara, él no quería bailar con ella sino con la chica que era consolada por Becky y ese chico Arnold.
Bailamos—le dio la mano
El peliverde cerro sus ojos y paso de largo, nadie le iba a ordenar con quien bailar asi que se acerco a Anya y le dio la mano.
Levántate, yo—se puso nervioso al ver los ojos verdes de Anya—tendrás el honor de bailar conmigo
Pero no gane—se confundió
No importa, a mi nadie me ordena con quien bailar—miro de mala manera a las niñas que estaban mirando la escena—levántate o me voy
No seas grosero—Anya le dio la mano
Los murmullos no se hicieron esperar, las chicas estaban muy molestas del desden que hizo el pequeño a la chica rubia quien ahora bailaba con Ewen, pero a Damián no le molestaba solo disfrutaba el bailar con ella hasta que noto que la chica parecía mareada y se detuvo.
¿Qué tienes?—la miro
Creo que la gente es mala con Anya—se agarro la cabeza
Eres muy chismosa para oír los cuchicheos—se burló—haz lo que yo, solo importa lo que yo pienso y olvido que los demás existen
Esta bien—le dio la mano de nuevo
Ambos volvieron a bailar, entonces cuando otra vez los pensamientos de las chicas se estaban por hacer presentes, recordó las palabras de Damián y solo se concentro en que estaba divirtiéndose.
Al terminar el baile, Becky llegó a abrazar a Anya, entonces Damián la soltó, era mucho para su pobre corazón, pero antes de que se fuera Anya lo detuvo
Gracias, eres un buen chico—le sonrió
Ah—se sonrojo
¿Ahora somos amigos?—se emociono
El chico no respondió y salió corriendo por los pasillos mientras sus leales amigos corrían tras él.
Vaya, si que fue mucho para él—se burlo Becky
Y a partir de eso, Damián empezó a bailar con Anya en las fiestas de fin de semestre, ¿su excusa? Que así nadie los molestara por ganar favores, porque no quería que se aprovecharan de ellos.
Pero en su baile de 16 años, el joven tenía fiebre y no podía ni levantarse de su cama, pero eso no iba a impedir bailar con Anya Forger, por lo que con sus pocas fuerzas se coloco su traje negro y peino su cabello, porque nadie iba a bailar con ella más que él.
Anya estaba aburrida tomando jugo mientras observaba a Becky rechazando a los chicos que se le acercaban, aun su amiga estaba esperando que llegara el día en el que su padre Loid le hiciera caso pero ese sueño era muy lejano ya que ahora era padre de dos pequeños revoltosos.
Anya—Arnold se acercó
Hola—lo miro a los ojos mientras tomaba su jugo
No veo a tu guardian hoy—se burló—dime ¿quisieras bailar conmigo compañera de lengua clásica?
Pero antes de que Anya aceptara o rechazara la oferta Damián la tomo del brazo
Ella baila conmigo—sus pocas fuerzas lo hicieron correr al ver al joven acercarse a Anya
Pero ¿no estas enfermo?—se sorprendió—se ve que quieres mucho baile con Anya, dime ¿por qué?
Ah—sintió sus pocas fuerzas irse
Te llevaré a la enfermería—Anya lo tomo del hombro—vamos, Becky regreso
La castaña solo alzo la mano y observó como su mejor amiga ayudaba al chico a caminar
Ese torpe—susurró
Tan necio como siempre—Emile comió un bocadillo
Anya llevo al chico a la enfermería pero estaba cerrada entonces caminaron a la habitación del joven quien iba ardiendo en fiebre.
Debes de tener mas cuidado—lo recostó en su cama—si te enfermas mas feo estarás llorando por faltar a clases
No podia dejar que bailaras con él—susurró
Anya es muy bonita y obvio tendrá muchos admiradores—se burlo
Lo se—la observó—por eso no quiero que alguien más me gane
¿Ganar?—alzo la ceja
¿No te has dado cuenta que me gustas?—empezó a quedarse dormido
Espera, no te duermas dime todo—lo tomo de la mano—oye, segundo
