Berlint 6 años después de la misión strix (Damián 12 años y Anya 10 años)
¿Cómo podemos definir nuestra relación? —Anya observo a Damián mientras estaban en el puente que conectaba a la ciudad con la calle escolar
No sé—se sonrojo—no leas mi mente por favor
¡SEGUNDO! —lo tomo del brazo—mira un arcoíris—le señalo—es hermoso
El peliverde miro el cielo y noto lo que la pelirosada le comentaba, pero, no le resultaba para nada hermoso ya que para él ella era lo más hermoso que veían sus ojos cuando sonreía.
Si es hermoso—se perdió en su rostro
Ya se—la niña se emocionó—nuestra relación es un arcoíris, porque es hermoso y sale después de la lluvia
Está bien—se burló ante la inocencia de la pelirosada—vamos a clases, sino Henderson te pondrá un tonitrus otra vez
Si—la niña se colocó su mochila y camino enfrente de él
Creo que no es un arcoíris—tomo su mochila—es otra cosa
Ambos niños caminaron a clases mientras platicaban de Bondman porque Anya amaba ese tema.
Berlint 12 años después de la misión strix (Damián 18 años y Anya 16 años)
El viento soplaba debido a que el otoño estaba cerca y ambos jóvenes estaban en el puente que amaban mientras veían como las pequeñas embarcaciones pasaban por debajo, en esos Anya se había vuelto una hermosa señorita, su cabello era largo y rosa, había dejado de usar sus típicos conitos de bruja y ahora usaba un lazo negro en su cabello, media 1.69m, había crecido con elegancia y fuerza gracias a los entrenamientos de su madre, por otro lado Damián, bueno él se había dejado el mismo tipo de corte desde que era niño, había crecido hasta alcanzar los 1.87 m, su rostro tenía unas pequeñas marcas debido a que el acné lo ataco en su adolescencia y debido a que empezó a hacer ejercicio gracias al futbol tenía un buen cuerpo.
Pronto nos graduaremos—suspiro con tristeza Anya—ya no estaremos en el mismo salón de clases
¿me vas a extrañar? —se burlo
No torpe, a Becky—alzo la ceja
Yo si te voy a extrañar—sonrió con tristeza—intentar rescatarte de cada problema en el que te metes me daba vida
Ahora ya estarás más libre de eso—recargo su cabeza en su hombro—gracias por estar para mi
El joven sabía lo que sentía por Anya Forger desde los 15 años, pero debido a que ambos tenían una amistad demasiado fuerte no quería arriesgarlo todo por una relación que creía que no tenía mucho futuro ya que próximamente ella sería una espía y él un político, aunque le dolía el corazón, un acto de amor era apoyarla y no ser una carga, pero en esos días había pensado que debía ser sincero con ella, aunque fuera rechazado, tenía que confesar lo que sentía.
Oye Anya—suspiro—yo quería decirte que ya sé que es nuestra relación
¿Qué es? —sonrió
No es un arcoíris—suspiro y apretó con levedad sus manos—lo que yo siento por ti es
El joven miro los ojos verdes de Anya Forger, amaba verlos ya que le daban una calma inmensa, adoraba contar sus pestañas, aunque siempre se perdiera y le encantaba verla sonreír.
¿Qué sucede? —se extraño
Anya—la miro a los ojos, no había vuelta atrás—la verdad es que te amo
La pelirosada se sonrojo demasiado y lo miro con sorpresa, su mente parecía que había hilado todo el rompecabezas de los pensamientos que leía del joven, ahora todo tenía sentido, cada una de las palabras, acciones y regalos, era un sentimiento puro.