Los paisajes cambiaban con el paso del tiempo, las personas crecían y a veces esos lazos evolucionaban en algo más.
La gente creía que la vida estaba comprada y que solo debían disfrutarla pero, a veces hay cosas que truncan eso y tus sueños se van como una nube en el cielo.
Anya y Damián el vivo ejemplo de que las cosas logran cambiar con el tiempo, su relación bueno al inicio no fue la mejor ya que al ser unos niños su lado infantil logro hacer que las cosas se complicaran pero después de que la misión strix terminara, las máscaras se cayeron y ambos pudieron entablar una amistad cordial.
Pero a veces el dolor de las mentiras nublaban el juicio de Anya entonces cuando cumplio los 13 años y sus compañeros 15 años decidió ser sincera porque no quería seguir lastimando al joven que sabía por su mente que la amaba.
Entonces un día mientras el joven terminaba de jugar fútbol con sus amigos noto que Anya lo esperaba, sus mejillas se sonrojaron demasiado pero trato de ser fuerte y fue a verla.
¿Qué haces tan tarde?—le puso la mano en su cabeza
Esperándote—le sonrío con algo de tristeza provocando que el peliverde se preocupara
¿Sucede algo?—se agacho para verla a los ojos
No se como decirte esto—frunció los labios—quisiera que fuéramos amigos siempre pero cuando te diga esto, yoLa pelirosada no pudo decir nada porque sintió como la besaban y la empujaban contra el árbol en donde estaba recargada, no quería corresponder porque se sentía una mentirosa pero su corazón le gano a la razón y cerró los ojos.
Damián sonrío y la abrazo con fuerza, sabia lo que iba a decirle y le agradecía que al fin fuera sincera pero también quería infundirle confianza de que él no la repudiaría.
No importa lo que hagas o si matas a alguien—siguió abrazándola—yo te amo demasiado Anya
Pero Damián—seguía oculta en el pecho del joven
No tienes porque cargar con esto—le susurró—se la verdadLa chica se separo y miro al joven quien le dedico una sonrisa.
No tienes porque cargar con algo que hiciste para que no estuvieras sola—acarició su cabello—yo te amo y entiendo tus razones, por favor, deja de culparte
Anya empezó a llorar, no entendía porque el chico sabía la historia de la misión strix, pero ahora él estaba ahí sonriéndole y abrazándola como si no fuera culpable, le dolía el traicionarlo y más porque sabía lo puro de sus sentimientos.
Los años pasaron y después de esa confesión de amor ambos chicos decidieron tener una relación de amor, los dos eran felices y se apoyaban demasiado, sus amigos estaban a favor de esa relación ya que al final los dos ya no estaban solos, mientras que sus familias igual apoyaban esa relación.
Cuando la graduación de la universidad llego, Damián le pidió a Anya que se casaran y formaran una familia, la chica acepto y ambos emprendieron un nuevo viaje juntos.
Quien diría que el gruñon se casaría—Becky observaba a su amiga quien estaba tomando café—sobretodo quien diría que se casaría contigo
Era algo obvio—Ewen hablo—él solo se casaría con Anya
Y aquí estamos—Damián tomo la mano de la pelirosada—juntos
Juntos—la chica le sonrío
¡Son tan cursis!—Emile se burló—pero los tolero
Por cierto—la castaña carraspeó la garganta—ya saben donde irán de viaje el otro año
Si—los dos la vieron
¿Dónde?—el rubio los miro con curiosidad
Vamos a ir a donde grabaron Bondman—se emociono Anya
Típico—sonrieron sus amigos
Es que lo que quiera Anya se lo daré—puso la mano en la cabeza de su esposa—ella es la razón de mi alegría
Basta—se sonrojo—te amo
Te amo más—beso su mejilla
¡Dejen de coquetear enfrente de los solteros!—grupo Emile en forma de burlaEl viaje que planeaban era una gran ilusión para Anya y Damián ya que debido a que sus trabajos los absorbieron no habían tenido vacaciones de navidad en su segundo año de matrimonio, ellos querían un viaje increíble antes de empezar a formar su propia familia.
————Actualidad
Una pelirosa se encontraba sentada en una banca de la escuela Edén mientras miraba el suelo, sus manos estaban algo frías porque no llevaba guantes para la nieve y su nariz estaba roja por el frío ambiental.
Su aspecto no era nada malo pero sus ropas no eran apropiadas para un ambiente de nieve.
El profesor Henderson caminaba por esa area y cuando la noto hizo una mirada de tristeza, poco después se acerco a ella y carraspeó la garganta para llamar su atención.
Señora Desmond—comentó con neutralidad—hace mucho frío, le invito un café en mi oficina
Profesor—lo observo y asintióLa chica se levanto de la banca y siguió al profesor, no sabía porque pero no tenía frio aunque usaba un vestido holgado azul sin mangas, al llegar a la oficina sintió el calor de la chimenea y se sentó en el sillón mas mullido
¿Gusta galletas?—le paso una caja
No puedo—sonrío con tristeza y toco su vientre crecido—tengo una dieta
Perfecto—sonrío con melancolía—entonces le prepararé un té
Gracias—suspiróEl adulto mayor estaba acostumbrado a la presencia de Anya desde hace unos meses y aunque buscaba junto a sus seres queridos que volviera a sonreír no podían lograrlo.
Cuando terminó de hacer el té le dio su taza a la chica y él se sentó frente a ella.
Hace frío hoy—movió su cuchara en la taza del té—Damián amaba mucho la nieve y yo la odiaba
Si, recuerdo que cuando la nieve cubrió la escuela el joven Desmond y sus amigos hicieron muchas bolas de nieve—sonrío con melancolía—usted igual los ataco con eso
Era divertido—cerro los ojos—era una tradición que teníamos, el que tirara mas bolas de nieve haría lo que él otro pidiera—su voz se hacia mas triste—pero ahora no esta
Señora Desmond—intento calmarla
No se preocupe—unas pequeñas gotas de lagrimas fueron limpiadas con el papel higiénico—me contendré porque este bebé merece una mamá sana
¿Cómo esta pasando esto?—la observó
A veces quisiera que él sintiera lo que yo siento, pero fue cruel y yo fui muy tonta—su voz temblaba—él debía estar acá conmigo ahora pero me ayudo a bajar de la montaña nevada
El joven la amo demasiado que sacrifico vivir su vida con usted para que pudiera vivir—dejo la tazo en la mesa
Si, eso me dicen Becky, Ewen y Emile—dejo la taza—pero profesor, lo amo tanto que no puedo dejarlo ir, yo quería irme con él, es algo que nadie ha entendidoEl adulto mayor comprendió las palabras y se levanto para darle un abrazo a la chica que se desmorono al sentir eso, su corazón estaba destruido, su marido había muerto en el viaje al país donde grabaron Bondman ya que la montaña nevada no tenia indicaciones y se perdieron en la blanca nieve, por eso Anya siempre intentaba salir los días nevados sin ropa abrigadora porque era su forma de autocastigo por vivir, ella quería morir con su esposo pero cuando se entero que iba a ser madre se aferro a la vida y al recuerdo de su amado Damián.
Profesor, lo extraño demasiado—lloro—no quiero vivir en un mundo donde no este Damián Desmond
Lo se—intento calmarla—pero, a veces hay que amar y dejar ir, no lo hace cruel ni a usted tonta, tiene que vivir Anya, por usted y por ese bebé
Si—limpio sus lagrimas—graciasEl profesor llamo a Loid Forger para que fuera por Anya, el rubio llego a los 10 minutos y se despidieron del viejo profesor.
Henderson observo como Loid intentaba tapar a su hija y como ella se resignaba a caminar, sentía el dolor que emanaba, el dolor de haber perdido a alguien a quien amaba demasiado y que tenían planes por culpa de las inclemencias del tiempo.
Le deseo lo mejor señora Desmond—suspiró—usted no esta sola
Y era cierto, Anya contaba con el apoyo de sus amigos, de sus padres y la familia de su esposo, pasara lo que pasara nunca iba a estar sola, aunque era cierto, no era lo mismo que estar con ese peliverde molesto.
Mientras tanto Anya observaba por la ventanilla en lo que su padre manejaba, en la radio estaba la canción de Ilove you so y mientras traducía la canción las lágrimas volvieron a hacerse presentes.
Tengo que alejarme y dejarte ir—pensaba y tocaba su vientre—tengo que superarte—las lágrimas seguían bajando—pero te amo tanto
Nota: iba a escribir otro +18 pero dije tengo ganas de escribir algo triston