A reason to stay ☕ | hv - km

60. Una razón para quedarse

•TH•

-Vamos, Tete, tú puedes -me animo a mí mismo antes de tocar la puerta de Jungkook.

Cuando venía hacia aquí, repasaba una y otra vez los consejos que me dio mi novio:

Uno, no grites; dos, sé respetuoso y no interrumpas; tres, sé completamente sincero; cuatro, no te pongas a la defensiva; y cinco, no lleves notas adhesivas.

No sé si quiso hacerse el gracioso con ese último consejo o si lo dijo en serio, de cualquier manera, lo único que me quedó claro es que lo he traumado. Pobre, le piden notas adhesivas en la tienda y tiembla.

Cuando llegué al edificio y toqué el timbre del apartamento, atendieron y dije mi nombre, pero no hubo respuesta del otro lado, simplemente me desbloquearon la puerta y entré.

Ahora estoy con la mano levantada, pensando en miles de excusas por las cuales no perder mi orgullo de esta manera, pero no encuentro ninguna, por lo tanto, doy dos golpes y me alejo esperando a que me reciban.

Escucho pasos suaves del otro lado, y si bien esperaba que quien me abriera fuera Jungkook, el que aparece es Jimin.

-Taehyung -dice, en forma de saludo. Sin embargo, su rostro no es nada parecido al de ayer en la noche. Este Jimin me mira con una mueca y en sus ojos hay indiferencia, disgusto incluso.

Bueno, empezamos mal.

-Jimin -saludo también e inclino mi cabeza-. ¿Está Jungkook?

No puedo evitar pensar que Jimin es muy intimidante en estos momentos. Es como si estuviera rodeado por un aura oscura. El chico que vi anoche era todo amabilidad y sonrisas; el chico frente a mí podría matar con la mirada.

Trago saliva con pesadez, esperando su respuesta. Espero que Jungkook esté adentro, no quiero quedarme mucho tiempo solo con su novio. Da miedo.

-Salió -dice simplemente y se recarga contra el marco de la puerta.

Por fuera muestro serenidad, por dentro estoy llamando al imbécil de Jungkook en diez idiomas distintos. ¿Cómo va a dejarme a solas con su novio?

-¿Va a volver pronto? -pregunto y le dedico una sonrisa para aliviar el ambiente.

-No lo sé -responde cortante y se da la vuelta, dejando la puerta abierta.

¿Me está dejando la oportunidad de huir o...?

-¡Pasa! -grita desde adentro y yo me sobresalto.

Bueno, este es mi fin.

Paso rápidamente y cierro la puerta. Si la situación fuera otra, hace rato que me hubiera dado la vuelta, pero creo que si lo hago, Jimin va a salir detrás de mí y va a arrastrarme de vuelta al apartamento.

Doy dos respiraciones profundas. Ya no hay vuelta atrás, tengo que aprender a tragarme el orgullo.

Cuando le echo un vistazo a la sala, veo que han cambiado la ubicación de los muebles. Ahora los sillones individuales están enfrentados y Jimin está sentado en uno de ellos, lo que significa que voy a tener que ocupar el otro.

Mierda.

Camino hasta allí y me siento. Mis manos aprietan mis rodillas con fuerza y tengo la espalda sumamente recta, mientras, Jimin me mira con intensidad y frialdad a la vez, es como si no se decidiera entre colocar un cuchillo en mi cuello o hacerme la chocolatada.

Quiero que estemos todos aquí para disculparme con ambos por igual, así que propongo:

-Podemos esperar a Jungkook.