𝑰𝑵𝑴𝑨𝑹𝑪𝑬𝑺𝑰𝑩𝑳𝑬 || Thorin Oakenshield

057-🌷- Reto#2

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Abriste los ojos sin demasiadas fuerzas aferrándote todavía a la calidez de la cama. Era demasiado temprano para empezar con la tortura del día.

Dándote la vuelta te encontraste con Thorin; Él seguía tranquilamente dormido, sonreíste y aprovechaste para acercarte más a su lado. Thorin al sentirte no dudó en rodearte con sus brazos y acercarte a su pecho.

—Mi Reina —dijo haciendote sentir ese cosquilleo especial en tu cuerpo— Buenos dias.

Gimoteaste negándote a responder y aferrándote más al sueño que te poseía.

—Cariño... ¿estás despierta? —volviste a escuchar su voz.

—No. —balbuceaste alargando el quejido al pronunciar la palabra.

—¿Sabes que dia es hoy verdad?

—El día de "¿no dejemos dormir a la Reina?"

—Arriba. —se separó más de ti, sin dejarte mas opción que despertar de una vez por todas.

Comenzaste a bostezar y estirar los musculos, mientras Thorin con si rapidez caracteristica ya estaba listo de pie frente a tu cama.

—Si se supone que es "Mi" día ¿no podría solo ignorar el mundo y quedarme aqui?

—¿Quieres que todo el pueblo ignore este día? —asentiste.

—Podrías declararlo. Nadie se atrevería a contradecirte.

Thorin acaricio tu pelo y tomó tus manos sentándose a tu lado.

—Eres la Reina y el pueblo está emocionado por celebrar el primer cumpleaños de su Majestad.

—Eso no venía en el contrato el día de la boda —soltaste sin querer y él arqueó una ceja divertido— lo siento.

Un millón de quejas pasaron por tu mente. No querías, No te gustaban estas fechas ni mucho menos celebrarlas. Pero Thorin tenía razón, eras su Reina y quizas deberías hacer algunos sacrificios por tu pueblo.

—Te veré mas tarde —concluyó para dejarte un beso en la frente. Hiciste una mueca.

—¿ese es mi beso de cumpleaños? —te sonrió negando con diversión. Quizás la posición de Reina era complicada para ti, pero verlo a él cada mañana y tener sus pequeñas sonrisas solo para ti era lo que te daba fuerzas.
En ese mismo momento Thorin se acerco de nuevo para besarte, pero esta vez te aseguraste de no dejarlo escapar por unos minutos rodeándolo con tus brazos, culminando con una sonrisa en tus labios cuando te separaste de él.

—¿Mejor? —inquirió y asentiste con alegria— de pié, tus doncellas vendrán en minutos.

Pensaste por una vez mas en apelar a su lado bueno para rogarle que cancelara la celebración, regalos y las incómodas felicitaciones. Pero sabias muy bien que el mismo Thorin se habia esforzado por darte ese dia. De todas formas era el primer cumpleaños que pidian pasarlo con calma y paz en su Reino.

Asi que después de desayunar tus doncellas te llevaron hacia el salón donde tenian preparado tu vestimenta para esa noche; un hermoso vestido celeste con detalles blancos y bordados con hilo de oro esperaba para ser utilizado por ti al atardecer.
Sentiste una extraña calidez al pasar tus manos por la suavidad de las telas que caían con una elegancia inigualable. Quizas podrías disfrutar del ajetreo de esa noche, hasta pudiste imaginarte disfrutar un par de piezas de baile junto a tu Rey.

—Esta usted bellísima su Alteza —dijo una de tus doncellas— el Rey quedará impresionado por la luz que irradia.

—A él le gustaría aunque estuviese cubierta de fango —recordaste las veces que con suciedad encima en la costosa travesía que vivieron Thorin llegó amarte— pero....

En verdad te importaba que él te viera perfecta.

Las últimas luces del sol se perdieron detras de la montaña cuando tu peinado estuvo listo.
Los pasillos del Reino se encontraban ya vacíos, y era algo obvio porque todos ya esperaban por ti en el salón principal. Conforme mas te acercabas a el, mas podias escuchar el bullicio de la música y de la gente reunidas para celebrarte.

Te detuviste frente a las grandes puertas del salón, la música y el bullicio disminuyó considerablemente. Las puertas se abrieron entonces y un velo blanco cayó con elegancia hacia tus pies sorprendiéndote. Entre todos los rostros que te rodeaban distinguiste a Thorin que robó por completo tu atención.

—Mi Reina —saludó, tomando tus manos y besando el dorso de ellas.

La música comenzó a sonar en un ritmo que te fascinó haciéndote olvidar la multitud que te rodeaba observándote.
Sin discursos, ni actos de protocolos que debias seguir, los demas bailaban a tu alrededor levantando las copas en tu honor repetidas veces

Entre las risas de los presentes y la alegría de Thorin a tu lado tomándote de la mano te diste cuenta que estabas preocupada en vano, no debías hacerlo aunque esa voz en tu cabeza intentara sabotear tu felicidad con miedo.
Fue entonces cuando sorprendiste a Thorin con un beso en la mejilla.

—Gracias —le susurraste apretando su mano.

—¿Te gusta? —asentiste levantándote del trono y sacando las horquillas de tu cabello dejándolo caer y sintiéndote libre. Volviste a tomar su mano llevándolo de nuevo entre las personas que bailaban, dispuesta a disfrutar por primera vez esa fecha que solo Thorin pudo hacer especial para ti. Su Reina.

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Gracias por leer^^.🍃