Olivia infla su pecho, mientras que se reincorpora de la banqueta para poder tomar la tasa utilizada y colocarla en el lavaplatos sabiendo que estaban siendo observados cada uno de sus movimientos por Elián.
Sin embargo, intentaba mantenerse lo más tranquila posible, para no levantar sospechas de lo nerviosa que se encontraba por estar frente a él, por el simple hecho de saber quién era y las cosas de las que era capaz de hacerlo, sino que por cómo se sentía al respecto y lo confundida que estaba últimamente con su subconsciente y sus ideas.
No por nada el hecho de no poder dormir siendo algo que le dificultaba constantemente, gracias a las incansables ideas que se iban abriendo paso a paso en su mente.
Hacía un gran esfuerzo diario por no querer sentirse cómoda al respecto con lo que estaba ocurriendo.
—¿Estás todavía pensando mi propuesta o viendo la forma de poder huir?— Sisea terminando su bebida y dejando la taza apoyada cerca de su mano derecha.
Incluso, lo que más nerviosa la ponía ahora mismo era el hecho de cómo él no dejaba de analizarla con aquellos ojos azules tan penetrantes.
—Sí quisiera huir de vos lo hubiera hecho hace mucho tiempo, pero no me gustan las carreras...— Murmura fingiendo algo de desinterés.
Tiene que admitir, lamentablemente, para ella, y para su subconsciente que le gustaba y le excitaba el juego que estaban teniendo de ida y vuelta todo el tiempo.
Era cómo el gato y el ratón, y alguno de los dos en ciertas oportunidades cambiaban el rol, no siendo siempre los mismos, es por eso que les causaba diversión, y cierta tentación, en este caso por parte de la rubia.
Quién intentaba ocultarlo por sentirse conmocionada al respecto...
No estaba segura de sí sentir eso era algo correcto o algo completamente paupérrimo...
No tenía ni la menor idea de cómo se podrían llegar a tomar sus hermanos que ella tuviera sentimientos encontrados para con el castaño, o peor aún, se sintiera incomoda por la situación.
Era algo que le causaba hasta terror mencionarlo en voz alta, porque si lo hacía estaba más que segura de que entraría en cuenta y en razón de que algo, verdaderamente, estaba cambiando en ella misma.
¿Pero podía no sentirse sucia al ver al castaño de otra manera sabiendo que él había asesinado a Gael frente a sus ojos?
¿Podía mirar con la frente en alto cualquier persona que se le pusiera delante de ella sabiendo que Elián había sido participe del secuestro de su hermano?
¿Podría ocultar acá el brillo extraño al hablar con su mejor amiga y recordarle que aún se sentía vacía ñor la pérdida de aquel hijo que en su momento ella incluso había llegado a detestar?
Eran demasiadas preguntas para una simple y única respuesta que tenía en la punta de su lengua pero que no sé animaba a reproducirla de ninguna manera.
Elian sonríe de costado coqueto... —A decir verdad yo no tengo ningún problema en correrte, Barbie... Sabes que la acción siempre me divierte.— Le recuerda moviendo su cabeza hacia un costado.
Y también poniéndose de pie.
Para imitar rápidamente el gesto que ella había hecho minutos atrás quedándose, ahora, enfrentados el uno con el otro, a muy pocos centímetros de distancia.
Olivia aprieta tus labios e infla, nuevamente, su pecho alzando la vista hacia el castaño.
—Supongo que no me vendría mal un poco de aire.— Murmura con una mueca de resentimiento.
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OLIVIA
Teen Fiction-¿Un acuerdo?- Suelta. El rubio que tiene delante de él se ríe mientras acaricia la comisura de sus labios con ironía. -¡Eso mismo es lo que te estoy proponiendo!- Sonríe con malicia. -¡¡Nosotros no hacemos acuerdos, Elián!!, ¡¡Nosotros somos compet...