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-¡Justo lo que necesitamos una novia oliendo a vomito!- Malcolm se ríe dejando la taza de café en el mesón de la cocina.

Dónde Iván, Elián y él desayunaban, hasta que Lohan aviso que la amiga de Olivia, June pidió una pastilla para las náuseas.

-¡¡Solo cerrá la maldita boca, Malcolm!!- Golpea la mesa haciendo que los platos de cerámica se muevan.

Iván rasca una de sus cejas comiendo una tostada y no queriendo hacer ni una sola mueca

-Como sea, ni siquiera se que hago acá.- Rueda los ojos.

-Eso mismo me preguntó yo.- Bufa pasando una mano por su cabello.

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-Señor.- Hace un asentimiento con la cabeza a modo de saludo.

-¿Que sucede?- Suspira pasando la corbata por su cuello sin dejar de mirarse al espejo.

-Aparentemente la señorita Olivia se encuentra indispuesta, y su amiga está solicitando que se le brinde acceso al botiquín de la casa.- Alza su barbilla al final su oración.

-¿Que le ocurre?- Tuerce la cejas mirándolo.

-Desde que amaneció que se encuentra con náuseas y no se despegó del baño desde entonces.- Suspira.

Haciéndose a un lado cuándo Elián se abre paso al pasillo del tercer piso en donde solo está su habitación.

-Que Franco que me busque inmediatamente.- Ordena abrochando sus gemelos y bajando por el ascensor.

-Si señor.- Exclama, aúnque, ya no lo puede escuchar.

Apenas ingresa a la habitación, habiéndose encontrado con el staff de maquillaje y peinado en el corredor sentados en los sillones que dan a la terraza, bebiendo café, se encuentra con June, llevando una vestido camisonero para que sea más fácil quitar al tener el peinado echo, apretando una toalla húmeda en sus manos.

-¿Que es lo que le pasa?- Demanda saber queriendo ingresar al baño.

Pero no es necesario que ella responda, las arcadas de Olivia lo hace del otro lado de la puerta.

-Desde que llegue qué no puede salir.- Explica perdiendole todo el miedo posible.

Dos golpes a la puerta interrumpen la conversación.

-Adelante.- Su voz sale ronca.

-Señor. ¿Me estaba buscando?- Lo mira.

Elián abre la puerta del baño. -Quiero un médico inmediatamente.- Pide.

Franco asiente.

-Por supuesto, señor, en seguida me comunico.- Se retira a la brevedad, sin informarle a su jefe que su amigo ya se encontraba en la sala esperándolo.

-Olivia ¿Que estás haciendo con todo este numerito?- La llama encontrándose con la rubia limpiando su rostro.

Ella lo mira, aún, con las gotas cayendo del mismo.

Sus ojeras y sus labios oscuros es lo que más resalta en ella al estar tan pálida.

-No cancelare la boda, si eso te preocupa, Fitzcher.- Es lo único que dice de manera monótona.

OLIVIADonde viven las historias. Descúbrelo ahora