Confesión

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Levi:

Levi al poner en marcha aquel auto sintió que toda esa fuerza incontrolable por fin disminuía, ahora lo único que le importaba era Daia.

- ¿Estas bien? ¿Ese tipo te lastimó?- Pregunto preocupado mientras manejaba.

- Si....estoy bien, solo me da rabia no haber podido defenderme- Dijo la chica apenada mirando hacia la ventana, ante esto Levi se le ocurrió una idea- Siento hacerlo pasar nuevamente por algo incomodo. 

- Tranquila, lo bueno es que llegue justo a tiempo o quien sabe que pudo haberte pasado. Si quieres.... puedo enseñarte un poco de defensa personal.

- ¿Enserio puede enseñarme? pues... creo que me gustaría- Respondió la chica un poco mas animada, aunque era claro que aun estaba asustada. 

- Bien, te enseñare pero cuando tu herida cure por el completo

- ¿Puedo hacerle una pregunta?- Pregunto Daia mientras sacaba la mirada de la ventana, Levi se lo pensó un momento pero creyó que era oportuno ceder.

- Si 

- ¿Cómo es que tiene tanta fuerza? y ¿Dónde aprendió a defenderse así? le juro que es primera vez que veo a alguien moverse con tal agilidad y fuerza como usted lo hizo, por un momento.... creí que lo golpearía hasta dejarlo inconsciente o peor ... por eso lo detuve no quería que tuviese problemas legales.

- Mmmm..... pues como te había dicho antes... Kenny nos crio a mi y a mi Mikasa, el es un ex policía y pues... nos enseño todo lo que sabia para que nos defendiéramos en caso de que pasase algo y no terminar como nuestros padres.....- Dijo Levi apenado a sus adentros al recordar su pasado- y bueno con respecto a la otra pregunta, ni siquiera yo se de donde saco la fuerza, solo siento que una especie de fuerza enorme se apodera de mi, según Kenny es una especie de padecimiento familiar. 

- Entiendo... gracias por compartírmelo se que es algo muy privado para usted- Dijo Daia sonriéndole débilmente, aquello hizo que algo dentro de Levi se ablandase. 

- Descuida- Contesto el pelinegro viendo hacia el frente.

- Este.... ¿Por qué se preocupa tanto por mi? solo soy su empleada...

Ante esto Levi no supo como decirle la verdadera razón tras la protección que le brindaba a aquella chica, por lo cual creyó que era oportuno aparcar el auto un momento y pensar lo que diría, hasta que algo que la chica dijo lo hizo quedar pasmado que hizo que su corazón latiese a mil. 

- Lo que dije la otra vez luego de que....usted me besara... no fue realmente lo que pienso- Dijo mas roja que un tomate- La verdad es que...... no he podido olvidarlo y creo que estoy sintiendo cosas por usted- Sentencio para tapar su rostro con ambas manos.

- Yo tampoco he podido olvidarlo mocosa.... y a estas alturas debes notar que eres mas que una empleada para mi..... yo... - Comenzó a decir Levi extremadamente nervioso, se sentía como un niño indefenso, a lo que veía como Daia retiraba las manos de su rostro para comenzar a verlo con sus hermosos ojos abiertos de par a par y estando aun sonrojada- yo.... hay una razón por la cual te protejo tanto y...... esa es que........mierda soy pésimo para esto, pues.......

Antes de que Levi dijese algo mas vio como Daia se acerco para besarlo, este quedo impactado ante la iniciativa de la chica pero luego comenzó a relajarse y disfrutar del momento para seguir con aquel beso, mientras llevaba sus manos hacia la espalda de la chica para posteriormente bajarlas suavemente hacia la cintura de esta para tener mas cercanía con la chica, a lo que ella jugaba con su cabello. Luego ambos se separaron para recuperar el aliento.

- Creo que eso deja en claro mis sentimientos- Sentencio Levi para acomodar un mechón de cabello de Daia que caía sobre su sonrojado rostro.

- Pues... eso creo- Contesto Daia riendo.

- Desde ahora eres la persona mas importante para mi Daia.... prométeme... que nunca te apartaras de mi- Dijo Levi mientras tímidamente tomaba las manos de la chica.

- Se lo prometo..

- Creo que es tiempo de que dejes de tratarme de usted.... ya no eres mas mi empleada, bueno me refiero a fuera de la empresa.  

- Lo siento es que es solo la costumbre- Contesto la menor riendo 

Daia: 

Daia se sentía extremadamente feliz y nerviosa no podía creer que desde ahora tenia una especie de noviamistad con su jefe y que sus sentimientos por el fuesen mutuos, ya que al momento de confesárselos creyó que este la rechazaría diciéndole que lo mejor era olvidarlo todo, pero se alegro bastante cuando este respondió a sus sentimientos.

Ahora mismo la chica se mensajeaba con Sasha diciéndole todo lo que ocurrió y que no se preocupara pues estaba bien yendo a casa de Levi ahora mismo. Luego de unos minutos finalmente llegaron a esta.

- No se si te parece bien pero....... si quieres.... puedes quedarte en mi habitación- Dijo Levi algo nervioso a lo que vio como Daia abría sus ojos como platos- No es lo que estas pensado, no hare nada que tu no quieras.  

- Me parece una idea excelente Levi- Contesto la menor sonriéndole.

 Ambos se dirigieron a la habitación de Levi para dormir juntos, esa idea le agradaba a ambos ya que  realmente necesitaban de ese tiempo juntos, sobre todo ahora que todo estaba aclarado entre ambos.

 Daia se acostó en aquella cama luego de cambiarse para cerrar los ojos de inmediato pues se sentía exhausta luego de esa larga y en un principio tormentosa noche, hasta que sintió como unos brazos la atraían hacia el tonificado pecho del mayor, haciendo que abriese los ojos de inmediato. 

- No sabes cuanto deseaba estar así contigo mocosa- Le susurro en el oído lo cual hizo que la piel se le erizase.

- Lo mismo digo- Contesto la menor mientras se giraba para depositar un beso en los labios de  este- Creo que lo mejor seria mantener esto en secreto por ahora.... no quiero que en la empresa piensen que tengo mi puesto solo por tener algo contigo Levi- Añadió la chica una vez mas mientras bajaba su mirada, temía que este se lo tomase a mal.

- Si así lo quieres esta bien, aunque yo no soy alguien que cuente su vida a los cuatro vientos y creo que lo haz notado y que no te preocupe los imbéciles de la empresa, si me llego a enterar que alguien te hostiga o algo por el estilo se las vera conmigo- Contesto el mayor mientras levantaba la barbilla de la chica para que lo mirase. 

- Gracias por entenderlo Levi- Dijo Daia para posteriormente recargar su cabeza en el pecho del mayor y quedar profundamente dormida, hace mucho tiempo que no sentía tanta tranquilidad al momento de dormir y eso la hacia sentir bastante bien. 

Bad Romance / Levi AckermanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora