Capítulo 2

88 12 0
                                    

Yoongi

Vaya puto coñazo de vida.

Estoy recostado en la cama, fumando un pitillo, pensando en lo poco que me gusta la vida que llevo.

Me llamo Min Yoongi y soy un alfa Negro de 17 años. Soy el capitán del equipo de baloncesto del instituto donde curso el segundo año. Todo un logro midiendo apenas 1'70. Soy muy serio, desagradable, perezoso, impaciente, borde y gruñón. Vamos, que tengo un carácter de mierda. Mi gran pasión es la música, por eso trabajo a veces, como técnico de sonido en un pub donde se toca música en vivo. Me gusta, aunque como casi siempre tengo que ir de noche, no es un trabajo fácil de compaginar con las clases. Pero necesito el dinero.

Escucho, extrañado, la puerta de casa cerrarse. No espero a nadie.

- ¡¡YOONGI!! ¿QUÉ HACES EN CASA? - escucho gritar a mi hermano mayor desde la entrada.

Cazado.

No le contesto y espero a que aparezca por mi habitación.

- ¿Hoy también te has quedado en casa, enano? - me reprocha Namjoon abriendo la puerta de golpe. - ¡Ve a la escuela, maldita sea!

¡Qué pesado, coño!

Kim Namjoon es mi hermano mayor. Es un lobo alfa Gris de 18 años de edad y estudia tercer año en el mismo instituto que yo. Ambon somos muy populares entre nuestros compañeros. No tenemos el mismo apellido porque somos hijos de distinto padre. Por esa misma razón somos de raza distinta y nos parecemos físicamente tan poco. Namjoon trabaja de medio turno en un restaurante. En la actualidad vivimos solos en un apartamento ya que nuestros progenitores están viviendo su propia vida. Nuestra familia tiene dinero, pero ambos somos demasiado orgullosos y preferimos sobrevivir por nuestra cuenta. De ahí que los dos tengamos la necesidad de trabajar para mantenernos. Por cierto, mi hermano es un misándrico incurable. Es decir, que odia a todos los hombres menos a él mismo.

O eso es lo que él dice.

- ¡Nam! ¿Qué estás haciendo aquí tan pronto? - le pregunto sorprendido de que haya llegado tan pronto.

- Sólo he venido a buscar mi comida - me responde encogiéndose de hombros.

- Trabajas en un restaurante... ¿No puedes comer allí?

- Quería ver si habías ido a clase, Yoongi - me confiesa.

- He tenido que trabajar esta noche y por la mañana tenía sueño - digo bostezando demostrando, con hechos, mis palabras.

- ¡Yoongi, no me jodas! Necesitamos trabajar, lo sé, pero no puedes descuidar tus estudios. Si te toca trabajar de noche, cuando vuelvas a casa, duermes lo que puedas, pero por la mañana, vas a clase. ¿Entendido? - me regaña, pero con cariño. - Y luego echas una siesta cuando vuelvas de clase.

- Vale... papá - le digo con la única intención de molestarle. - También tengo que trabajar esta noche...

- Te lo advierto, como tengas que repetir curso, te prohibiré trabajar y sin tu sueldo moriremos de hambre. Y entonces no te quedará más remedio que arrastrarte para pedirle dinero a mamá - me amenaza Nam con el dedo índice en alto. - Además de que serás una vergüenza para una familia de clase alta como la nuestra.

- Tú eres el puro de los dos. A mí se me permite ser la oveja negra de la familia - le digo con una sonrisa socarrona.

- Pero tú eres la semilla de fuerza - me recuerda mi hermano. - Todos esperamos que bendigas a nuestra familia engendrando a muchos cachorritos... Y Yoongi, ¡TIENES QUE IR A CLASE! - me grita de nuevo.

- Está bien. Mañana iré - siseo entre dientes dando la batalla por perdida.

- Además... te espera una grata sorpresa en la escuelaaaaa - canturrea Namjoon.

- ¿Una sorpresa? - pregunto curioso. - ¿De qué se trata?

- Di mejor de quién. Una novia omega para ti, hermanito - me guiña un ojo - Es del tipo velador del linaje. Es decir, tu pareja perfecta - sonríe ladino.

Me quedo mirando a mi hermano dubitativo.

No me estás tomando el pelo, ¿verdad?

- Es una gran oportunidad si lo piensas bien, Yoongi. Nunca has tenido como pareja a ninguna omega con esa característica. Es una suerte que además estudie en nuestro instituto. La luna y sus jueguecitos - dice poniendo los ojos en blanco.

- ¿Y cómo es que no la conozco?

- Digamos que es nueva - miente Namjoon - Además, tampoco es que hayas ido a clase mucho últimamente, enano.

- Espero que no sea una puta loca tóxica y celosa, porque tengo la paciencia bajo mínimos, Nam - digo con mi buen humor habitual. ¡deja de llamarme enano! - refunfuño. Odio ser 15 centímetros más bajo que mi hermano.

- Es mejor que cualquiera de las tías que te follas, hermanito. ¡¡Adiós!!

Veo salir a Namjoon de mi habitación y escucho como prepara su comida en la cocina.

Yo nunca he conocido a ninguna omega veladora. Sé que, si alguien como yo preña a una omega veladora, la probabilidad de engendrar un cachorro sano es casi del 100%. Y eso es algo que me llena de alegría ya que, los lobos del tipo semilla de fuerza, tenemos un gran instinto paternal.

Vuelvo a meterme en la cama porque realmente estoy agotado y necesito dormir si mañana quiero ir a la escuela. Y claro que quiero. Estoy deseando conocer a esa omega tan singular.

Cuando suena el despertador, me levanto, ceno algo y salgo pitando al pub. A las 2:00 de la madrugada estoy de vuelta en casa. Me acuesto y me duermo enseguida.

A las 06:30 de la mañana suena de nuevo el despertador.

Puto trasto del demonio.

Me levanto, me doy una ducha, me pongo el uniforme, desayuno y me voy al instituto. Namjoon ya se ha marchado.

Durante el camino hacia la escuela siento que mi lobo está nervioso, deseoso de conocer a la omega de la que me ha hablado mi hermano, por lo que acelero el paso.

En cuanto llego al instituto percibo un leve olor cítrico que no había olido nunca antes. Es simplemente delicioso. Dejándome guiar por mi lobo, busco desesperadamente la fuente de ese olor, sospechando de quién puede tratarse. Pero no la encuentro por ninguna parte.

Maldita sea.

Remember Creek 🔞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora