Capítulo 17

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Yoongi

Es sábado por la tarde y decido invitar a Jimin a cenar. Le encanta que hagamos cosas de novios. Y a mí me encanta complacerle. Aunque nunca voy a reconocerlo. Le llevo al restaurante donde trabaja mi hermano porque la comida es muy rica y siempre me hacen descuento.

- Y dime Jimin, ¿qué has hecho esta mañana? - le pregunto porque hoy me he quedado en casa durmiendo hasta tarde porque ayer trabajé hasta las tantas de la madrugada.

- Pues he ido al gimnasio - me dice mientras picotea de todos los platos. - La verdad es que no me gusta mucho ir allí - me explica mientras sigue comiendo.

- ¿No te gusta hacer deporte, pequeño? - le pregunto divertido. - ¿Eres un lobezno vago y remolón? - le digo para molestarle.

- No digas tonterías. Sí que me gusta el deporte... - parece dudar. - Bueno, realmente no mucho. Lo que menos me gusta es correr, pero si quiero aprobar gimnasia tengo que entrenar... - dice encogiéndose de hombros. - ¡Tae se ha reído de mí porque dice que soy muy lento y que tengo las piernas muy cortas, el muy idiota! - dice haciendo un puchero.

En cuanto oigo el nombre de ese alfa, todo mi cuerpo se pone en tensión. Me hierve la sangre de pensar que ha estado a solas con ese imbécil. Pero Jimin y yo hemos llegado a un acuerdo. Lo nuestro no puede funcionar si no hay confianza. Me ha explicado que ellos ya han hablado y que Taehyung ya no siente nada por él.

Y yo que me lo creo.

Me ha pedido que no le prohíba estar con él porque es su mejor amigo. Y yo, que no puedo negarle nada, he aceptado. Pero no me hace ni puta gracia.

- ¿Os habéis duchado en los baños del gimnasio? - pregunto de manera inocente.

- Claro, no íbamos a irnos a casa todos sudados - me dice con las palmas de sus manos hacia arriba, como si la pregunta sobrará.

- ¿Has estado desnudo, a solas, con otro hombre, sin mi permiso? - le pregunto sintiendo unos celos enfermizos.

- ¿Por qué distorsionas así las cosas? ¡Sólo he ido a entrenar con un amigo! - me chilla molesto.

- Jimin... acércate - le pido poniendo mi mano frente a su cara e indicándole con mi dedo índice que se aproxime.

Él, obediente acerca su cara a mi mano y yo acaricio su labio inferior con mi pulgar. Desciendo mi mano acariciando su mandíbula y su cuello con las yemas de mis dedos. Su piel se eriza cuando acaricio su nuez y deja escapar un sonoro jadeo.

Las personas de alrededor si giran para mirarnos, pero me da igual. Quiero que tenga claro a quién pertenece.

Mío.

Acaricio su rostro y su oreja para después enredar mis dedos en su pelo. Jimin apoya su mejilla contra la palma de mi mano, dejándose llevar por las sensaciones.

Entonces mi hermano nos interrumpe golpeándome la cabeza con la jarra de cerveza que me trae entre las piernas.

- Por favor, absteneros de hacer cosas indecentes en el restaurante, ¡marramos! - nos ladra. - No os pongáis cariñosos en mi turno. ¡Es muy molesto! - dice sentándose en nuestra mesa. - ¡Y tú, estás tan excitado que te han salido las orejas, niño! - le riñe a Jimin en un susurro mirando su cabeza porque tiene asomando por el pelo sus lindas orejitas.

Mi omega se lleva las manos a la cabeza para taparlas. Está sonrojado por la vergüenza.

Tierno.

- Estoy harto de atender a tanto cliente - dice Namjoon antes de darle un trago a mi cerveza.

- ¡No te bebas mi cerveza y vuelve al trabajo! - le ladro.

- ¿De qué estabais hablando antes de pasar a los preliminares? - pregunta Namjoon ignorándome por completo.

- Jimin ha ido hoy con su amigo Taehyung al gimnasio porque tiene mejorar su tiempo de carrera, pero no le gusta mucho correr - le cuento a mi hermano. - Yo te voy a enseñar a correr rápido como el viento, pequeño - digo mirando a Jimin.

- ¿Lo harás? ¡Oh! ¡Gracias Yoongi! Así podré aprobar gimnasia sin problema - dice emocionado.

- Alguien tiene que hacerlo... Serías una vergüenza para los lobos si realmente eres tan lento, paticorto - le digo de manera seria, pero de broma.

- Hermano, ¿Por qué mejor no reconoces que no quieres que vaya con otros alfas? - me dice mi hermano acabándose mi cerveza.

Miro a Namjoon con odio, pero tiene razón, lo hago por eso.

A veces olvido que me conoces mejor que nadie.

- Por cierto, Namjoon, hoy en el gimnasio, he visto a tu amigo - le dice Jimin.

- Querrás decir amiga - puntualiza mi hermano.

- No. Me refiero al chico que te fue a buscar el otro día en la azotea de la escuela - le explica mi omega.

- ¿El presidente? - dice de manera aguda Namjoon. - No somos amigos - suelta tajante.

- Pero yo el otro día... pensé que... - Jimin no parece estar entendiendo una mierda.

Bienvenido al club, bebé.

- Lo somos... bueno, no - mi hermano no sabe ni que decir.

- Al principio pensaba estaba contigo, pero luego he visto que no eras tú - le dice Jimin de manera casual.

- ¿El presidente no estaba solo? - se interesa Nam.

- No...

- Y la persona con la que estaba era un... ¿chico?

Interesante reacción, alfa.

- ¡Sí! Él estaba con un amigo - sonríe mi lindo omega.

- Hablando de carreras... hace mucho que no voy a una pista de atletismo - dice pensativo Namjoon.

- ¡Oh! ¡Pues deberíamos ir todos juntos! - dice emocionado Jimin.

- Por todos... ¿te refieres a nosotros tres? - le pregunta Namjoon señalándose a sí mismo. - No quiero ser un estorbo - finge ponerse tímido.

- Claro que no serás un estorbo. ¡Cuantos más mejor! - aplaude Jimin feliz. - ¡Iremos la semana que viene!

- ¿Has oído eso, Yoongi? ¡Cuantos más mejor! - me dice fingiendo emoción. - Lo siento, hermanito - me susurra Nam al oído mientras se parte de risa y me da golpecitos en la espalda.

Apoyo la frente sobre la mesa totalmente asqueado. A la mierda mi plan de estar a solas con Jimin en la piscina.

¿Qué te traes entre manos, hermano?

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