Remember Creek 🔞

Capítulo 37

Jungkook

Entramos a la consulta y una mujer de unos 50 años que está sentada detrás de su escritorio, nos da la bienvenida con una cálida sonrisa en los labios. Mira con ternura como abrazo a mi pequeño alfa por la cintura y sonríe divertida. Tiene unas graciosas gafas redondas sobre la punta de la nariz. Me cae bien nada más verla.

- Vaya, no esperaba que viniera una pareja tan linda. Pasad - nos invita a sentarnos frente a su escritorio. - Según me ha dicho tu madre, eres un alfa que ha sido inseminado gracias a un huevo.

- Así es, Doctora - le contesta Tae sonrojado.

- Bien. Veamos cómo está todo. Por favor, quítate la ropa y ponte esta bata. Puedes dejarte la ropa interior. Cuando termines. túmbate en la camilla. Vamos a hacerte una ecografía.

- ¿No tiene que hacerme primero un test de embarazo? - le pregunta mi TaeTae.

- Créeme querido, no es necesario - dile la mujer con una dulce sonrisa en los labios. Tae obedece y se desviste para ponerse la típica bata de hospital.

Me quedo sentado pues no sé si puedo acercarme a él, pero la doctora me mira con una ceja alzada.

- Ven aquí, muchacho. Esto también te incumbe.

Sonrío a lo grande y me coloco junto a Tae que me da la mano, nervioso. Veo a la doctora levantar la bata de Tae hasta debajo de su pecho. Se pone unos guantes de látex y agarra un bote transparente.

- Esto va a estar frío cariño - le dice a mi novio antes de aplicar un gel transparente por su vientre. Tae, sisea, pero sonríe. Creo que está muy nervioso. Aprieto su mano para que recuerde que estoy aquí con él y que no voy a marcharme nunca.

- Bueno, ¿preparados? - nos mira la doctora divertida. Ambos asentimos.

La doctora tamo un aparato, con forma de lector de precios y empieza a moverlo por el vientre de Tae. Me fijo en su cara y la veo sonreír.

- Mira Tae, ¿ves esta bolita? Es el huevo - dice señalando una masa gris en el monitor que hay junto a ella. - Ha agarrado perfectamente - dice satisfecha. - Ahora fijaros bien. ¿Veis que está moviéndose algo dentro?

- Sí - contestamos a coro mi novio y yo, completamente concentrados en el pequeño movimiento.

Ambos la miramos ansiosos y ella nos devuelve una sonrisa tierna mientras coge un rollo de papel para empezar a limpiar la tripita de mi alfa.

- Felicidades chicos. Tae está embarazado.

Miro a mi TaeTae que aún sigue tumbado en la camilla. Sus ojos, cristalinos me miran llenos de emoción.

Yo también estoy feliz, mi amor.

Sin esperar medio segundo más Me agacho a besar los dulces labios de Taehyung, que me abraza por el cuello. La doctora nos mira risueña.

- Mi amor... un cachorrito. Nuestro cachorrito - le digo a Tae quien me regala la sonrisa más preciosa del universo.

La doctora vuelve a su mesa y la oímos teclear su ordenador mientras Tae vuelve a vestirse. Antes de que se abroche la camisa, acerco mi mano a su abdomen y lo acaricio con ternura. Tae mira mi mano antes de subir su mirada a mis ojos que siguen fijos en su tripita.

- Hola pequeño cachorro. Soy tu papá Jungkook. Gracias por hacerme tan feliz.

Sin esperármelo, Tae se abalanza sobre mí y me besa despacito, mirándome a los ojos. Cuando corta el beso, pega su nariz a la mía.

- Gracias por estar aquí, Kookie.

- No voy a irme nunca más - acaricio su nuca. - Vamos, tenemos que darles la noticia a los chicos.

Cuando Tae termina de vestirse, la doctora le receta unas vitaminas y nos da cita en dos semanas para hacer otra revisión. Se levanta y mi alfa le da un abrazo enorme que ella le devuelve, cariñosa.

Con el pomo de la puerta en la mano, dispuesto a salir, Tae se gira para mirar a la doctora.

- Perdónenos, doctora.

- ¿Por qué me pides perdón si no habéis hecho nada malo, Taehyung?

- Por los gritos de mis amigos cuando les demos la noticia - se sonroja mi novio y yo me río por su comentario y porque sé que está en lo cierto.

- No importa, querido. Si los gritos son de alegría, no nos importan.

Salimos y nuestros amigos se levantan como un resorte hasta llegar a nosotros.

- ¿Y bien? - nos pregunta Yoongi, que parece, para sorpresa de todos, el más ansioso de todos.

Tae y yo nos miramos divertidos. Agarro a mi alfa por la cintura y apoyo mi mano tatuada en su tripa.

- Felicidades caballeros. Van a ser tíos.

Gritos, felicitaciones, risas, lágrimas y abrazos no se hacen esperar. Más gritos y más abrazos hasta que acabamos los seis en un abrazo colectivo.

Sí. Sin duda, la llegada de este cachorro es algo bueno.