Hasta que la muerte nos separe [Completa ✔️]

Apuesta

— ¿Ya estás lista?

— ¿Como me veo?

— Como todo un hermoso ser mágico.

Yo tenia puesto el uniforme de Slytherin qué él me obsequió, estaba muy bonito; la falda me quedaba algo pequeña por lo que me daba un toque... Sexy, se podría decir.

— ¿Como me veo yo?

— Te vez... –mordí mi labio– guapo, sexy –realmente se lo veía bien, no sé cómo le hacía pero el uniforme le dejaba ver la perfecta forma de su cuerpo trabajado. En cuanto lo vi a mi mente llegó una imagen de el follandome con ese uniforme qué lo hace ver tan deseable. Lo único que quería era que me cogiera a lo desgraciado, o es decir: al estilo Wattpad, o Christian Grey.

Dejó escapar una risa divertida, sacándome de mis pensamientos— prometo follarte en cuanto terminemos la sección de fotos.

Creo que me leyó la mente. Sonreí y parpadeé como estúpida repetidas veces. Adam rió nuevamente y me tomó de la cintura para después depositar un beso en mi frente.

— Vamos –tomó su celular y lo colocó en el tripie y luego nos acercamos a la orilla del lago, alejándonos un poco del celular. Tenía temporizador por lo que teníamos tiempo de buscar una pose. Con una mano me tomó de la cintura atrayéndome hacia su cuerpo y con la otra mano sostenía su varita, levanté la mirada y lo miré a los ojos con una leve sonrisa. Coloqué una de mis manos en su nuca y con la otra sostuve mi varita, 3,2,1. Tomó la foto.

La sección acabó después de una hora y tal como lo prometió cogimos por una hora y media. Comimos, jugamos y corrimos por la orilla del lago, persiguiendo el uno al otro como unos niños, nadamos un poco más, nos sentamos a contar historias. Cogimos por última vez y finalmente nos fuimos a casa antes de que oscureciera. Fue un día maravilloso, algo que nunca en mi vida olvidaré. Él me llevó a su casa para pasar un rato más juntos y también para que viera a Norris.

Lo primero que hice al llegar fue subir a su habitación y tirarme a su cama; estaba cansada, aún sentía mi cuerpo pesado por el agua ¿y mis piernas? Literalmente me sentía como Bambi.

— ¿Quieres que te prepare algo de comer? –preguntó el castaño–.

— Mmm, tú me quieres engordar ¿verdad?

— Tal vez.

—... ¿Me amarías aunque fuera gordita?

— Yo pienso que las gorditas son chicas pasaditas de ricas, así que si, obvio que te amaría.

Reí— está bien.

— Ahora dime que deseas comer –preguntó nuevamente–.

— Mmm no lo sé, sorprendeme, Smith.

— Ya veras que te vas a chupar los dedos –me dio un beso en la frente y se levantó–.

— Vamos a ver si es cierto –desafié–.

— Oooh ¿me estas retando? –entre cerró los ojos–.

— Si, te estoy retando, ahora ve.

— Ja, ok, ya veras que digo la verdad –salió de la habitación–.

— Voy a agarrar tu celular para enviarme las fotos –grité–.

— Está bien –me devolvió el grito–.

Agarré su celular y lo prendí, tenía una foto nuestra de fondo de pantalla de bloqueo y el de inicio era un collage en la que apareciamos: Ares, Luna, Norris, él y yo. Sonreí al ver eso, entré a galería y habían un montón de fotos; más mías y nuestras que suyas y también fotos de luna. Deslicé la pantalla hacia abajo para seleccionar, pero, algo me llamó mucho la atención. Era un vídeo en el que habían cuatro chicos, dos de ellos eran Adam y Axel. En el vídeo estaba escrito de color verde  algo que decía: haz lo que te digo o ella sabrá la verdad. ¿A quien se referían? ¿Era a mi?