— ¿Aún no te hablas con Axel? –le pregunté tomando un sorbo de mi batido de frutilla–.
— Oh vamos Verónica, me había olvidado de que existía hasta que lo nombraste –se quejó–.
— Eso fue un no, lo siento.
— Mejor hablemos de otra cosa, ¿como te fue ayer con tu suegro? –evadió el tema–.
— Ammm bueno, me fue muy bien el es muy amable y, creo que si le caí bien –no podía decirle lo que había ocurrido, le prometí a Adam no contarle a nadie de eso y creo que si le agradé al señor Liam así que no creo que haya mentido en esa parte.
— Me alegra mucho eso, Verónica. Por cierto yo...
— Fawn –le interrumpió Adam–.
— ¿Fawn? –hizo una mueca–.
— Así me dice el, ahora vuelvo, iré a ver que quiere mi Gruff.
— ¿Gruff? ¿Estamos en el país de las hadas? ¿Que hada soy?
Reí levemente y me levanté— Vidia –y se quedó con cara de: ¿what?. Fui con el y al estar frente a el una sonrisa muy alegre se dibujaba en su rostro.
— A que no te imaginas que –soltó con entusiasmo–.
— ¿Que cosa? –sonreí a pesar de no saber el motivo–.
— Encarcelaron a Ángel.
— ¿Que? ¿En serio?
— A el lo han tenido en investigación debido a que lo han acusado de más de tres abusos y una de sus víctimas lo denunció e hicieron una investigación y encontraron su ADN en la ropa interior de la muchacha. Esto acabó Verónica –estaba feliz, aliviado, su expresión era de una felicidad inexplicable. Sonreí, con los ojos llenos de lágrimas, lo abracé. Adam correspondió mi abrazo.
Lo pude percibir, pude sentir esa paz esa tranquilidad y alegría que el sentía. Yo también estaba feliz, finalmente se hizo justicia. Pero no entiendo ¿por qué las autoridades esperan que pasen cosas terribles para poder actuar? Si hubieran actuado antes, esa niña no hubiera pasado por eso, era más que suficiente qué lo acusarán una vez para hacer una investigación, no más de tres. Aunque una niña inocente haya caído en manos de ese infeliz debemos ver el lado bueno, por ella, ese imbécil por fin va a pagar por lo que hizo.
— Jones –habló cerca de mi oído–.
— ¿Si?
— Sobre lo que dijo Lory, por favor no le creas, te juro que no es cierto, nuestra relación es real lo que siento por ti es real.
Me separé de el y lo miré, sin decir nada.
— no me digas que le haz creído, o que estás dudando de mi.—... Lo–lo segundo que dijiste...
— ¡Verónica!
— Lo siento pero tengo muchas cosas en la cabeza que... Me hacen dudar.
— ¿Es en serio? ¿Cosas como que?
— El que te hayas acercado a mi con una personalidad distinta de la noche a la mañana.
— Y yo creí que confiabas en mi –demandó– jamás te he dado razones para que desconfíes de mi, y ahora vas a creerle a la primer estúpida que te dice cualquier barbaridad, Verónica, ¡y estamos hablando de Lory!
— No le estoy creyendo a Lory ni tampoco estoy desconfiando de ti, se me metieron algunas dudas pero no desconfío de ti. O tal vez si... Bueno te estoy dando el beneficio de la duda.
— Beneficio de la duda –repitió, indignado–.
— Creí que me entendías.
— ¿Entender que, Verónica? “deberías entender que no es fácil confiar en ti debido a como eras” ¡si, fui un idiota, un mujeriego. Pero soy humano y por lo tanto tengo corazón! Me puedo enamorar y lo hice, me enamoré de ti te lo he demostrado. Pero parece que no ha sido suficiente –no podía decir nada, simplemente las palabras no salían de mi boca– debo irme, nos vemos luego. A menos que luego no quieras verme –escupió una pequeña risa, negando con la cabeza, incrédulo. pasó por mi lado pero luego se detuvo para darme un beso en la cabeza, finalmente se fue.
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Hasta que la muerte nos separe [Completa ✔️]
Roman pour AdolescentsA veces el siempre siempre termina. Un hasta que la muerte nos separe no será siempre como lo soñamos, Verónica y Adam lo entenderán de la forma más dolorosa... - ¿A que te refieres con eso, Jones? - Solo te digo que, no estas solo en esto, Adam. ...