Lo más bonito de todo era despertar y encontrarme con su bello rostro frente a mi, incluso hasta dormida era hermosa. Ahora sé que todo sufrimiento tiene su recompensa al final: ella era la mía.
Ella era mi todo, no necesitaba más, con ella era más que suficiente. Era la que alegraba mis días con solo verla sonreír, con solo escuchar su voz, con cada te amo, cada te quiero. Cada caricia y cada mirada.
Era tan aterrador imaginar una vida sin ella, de solo pensarlo me sentía enloquecer. Sin ella no querría nada, sin ella mi vida no sería igual.
No soportaría la idea de no volver a ver al despertar aquel rostro adormilado que podía contemplar por toda mi vida.
Acaricié su mejilla, luego sus labios, deposité un beso en ellos y luego me senté para poder estirarme, pero en eso mi celular timbró y luego la llamada se cortó, iba a ver quién era: "Número desconocido", salió en la pantalla. No le di mucha importancia.
“De seguro alguien se confundió”, pensé.
De pronto, me llegó la notificación de un mensaje, tomé mi celular y lo revisé, al verlo, no pude evitar asustarme.
Aquel mensaje decía:“Felicidades, haz ganado un boleto al infierno”, y luego otro, “No debiste hacer eso, vas arrepentirte”. Por impulso bloqueé el número y lo eliminé.
¿De verdad la gente podía llegar a ser tan cruel por dinero? Ya veremos si el dinero lo salvará de la muerte algún día.
— ¡Adam! –alzó la voz llamando mi atención, quitándome de mis pensamientos.
— A-ah, ¿Si?
— ¿Estás bien? Te estuve llamando por un minuto.
— Lo siento. Estoy bien, tranquila.
— ¿Seguro?, tu respiración está agitada.
— ¿Agitada? –toqué mi pecho para sentir mis latidos, ni siquiera me había dado cuenta de cuan rápido latía mi corazon– !ah, si! Lo que pasa es que me pegué el dedo chiquito del pie.
— ¡Aush!
— Pero ya se me pasó, tranquila.
— De acuerdo, ten más cuidado, cariño. ¿Irás a trabajar hoy?
— Me toca en el bar, –dije– así que pasaré todo el día contigo.
— ¡Si! –dijo emocionada– ¿Hay planes para hoy?
— No, pero podemos crearlo juntos. ¿Tienes alguna idea en mente?
— ¿Reunión con amigos y familia?
— ¡Me parece super bien, es una buena idea!
Habíamos llamado a los chicos, a los padres de Verónica y a mi padre y planeamos reunirnos en el jardín de la casa de Robert.
Era una celebración por la noticia de que posiblemente Verónica recuperara la vista, yo tenía fe de que así fuera.
*
Tal como había dicho, pasé todo el día con ella, el embarazo le estaba causando demasiado sueño y a mí no me molestaba tenerla en mi pecho mientras dormía, debía aprovecharla mientras yo estuviera con vida ya que no sabía cuándo podía ser el último día que tendría el privilegio de tenerla en mis brazos.
Tuvimos sexo por un tiempo y luego nos pusimos a charlar de todo un poco. A hablar sobre cómo llamaríamos al bebé, estuvimos pensando por mucho, pero no llegamos a ninguna decisión.
ESTÁS LEYENDO
Hasta que la muerte nos separe [Completa ✔️]
Teen FictionA veces el siempre siempre termina. Un hasta que la muerte nos separe no será siempre como lo soñamos, Verónica y Adam lo entenderán de la forma más dolorosa... - ¿A que te refieres con eso, Jones? - Solo te digo que, no estas solo en esto, Adam. ...